SECRETOS

Dependencia emocional, interés, necesidad, pasión, erotismo, estabilidad, paz, l*****a y amor, era lo que ellos juntos me podían ofrecer... ¿Juntos?, no existía un dúo, no en esta situación, si quería ser alguien honorable y honesta debía escoger a uno de ellos y destruir al otro en el camino a la cumbre. Uno de ellos era maduro y Perfecto... Desmond Ratcliffe, un hombre poderoso, elegante, en el que confié siendo una niña. Fui su sombra, porque no podía ser la primera en su vida, tuve que conformarme con lo que podía obtener de él bajó la oscuridad, porque con él conocí la estabilidad. Dejé de preocuparme por el siguiente día para obtener lo que decía merecer, me sentía completa, tanto que llegué a pensar que en algún instante sería solo mío. Aunque todo cambió cuando él apareció, Clayrer Ratcliffe, una mala jugada del destino, con él pude sentirme viva, dejé las formalidades aún lado, disfruté la juventud sin arrepentimiento alguno. Desmond... Sabía que su sobrino nos traería caos. Tanto que evitó los encuentros juntos, pero contra el destino trazado nadie es vencedor. Clayrer fue la gota que derramó mi vida, cambió mi perspectiva, pero no quien era, y los secretos que arrastraba en aquella bella apariencia. Secretos... Todos tenemos secretos... los que aseguren no tenerlos, son los más podridos en ellos. Es imposible huir de ellos, porque cada paso lejos de estos son retrocesos feroces, lo sabía perfectamente, los tuve desde que acepte una relación secreta con aquel hombre, o cuando conocí a su sobrino. Cuando aquella familia me quiso consumir y acabar... tuve secretos perversos, inmorales, ellos pensaron que estaba a sus lados, que ayudaría a uno para destruir al otro, que debía escoger entre ellos o morir por ellos. Nadie pudo imaginar mi último secreto, mi última carta, la cual dictó que el verdadero veneno fui yo en ellos, y que ellos nunca fueron el mío, y qué tal vez nunca llegué a sentir aquel amor.