3
374 Words
Más tarde, una luz me molesta, abro los ojos confundida y miro con atención. "¿Qué pasa?", pregunto, y un hombre se acerca a mí.
"Así que es ella", comenta con una sonrisa encantadora. Es el hombre más atractivo que he visto en toda mi vida, con la tez morena, unos enormes ojos verdes y rizos en la cabeza. Tiene pecas, supongo que del sol, pero es sumamente atractivo y tiene una sonrisa amable con labios irresistibles.
No sé qué me ocurre, pero me acerco a él. Estoy sedienta, cansada de aguantar todo el día, y pruebo sus labios. El hombre se queda impactado, evidentemente sorprendido por mi acción. Es el beso más extraño de toda mi vida. Permanece inmóvil mientras sigo probando sus labios. Los míos están muy secos y los suyos húmedos. Tiene un ligero sabor a champagne y whisky.
"Hola", comenta. "¿Cómo estas?" Para mi sorpresa, tiene una mirada amable.
"¿Me sacarás de aquí?", pregunto. Si supieras de dónde ha salido esa pregunta, él lo siente, y mi sonrisa se agranda.
"No, señor. Esta niña no está a la venta. Será castigada", comenta otra mujer de los altos mandos, elegantemente vestida, que se acerca.
"La quiero", comenta el hombre, tomando mi mano y ocultándome detrás de él, como si me estuviera protegiendo de alguna manera.
"Le he dicho que no está a la venta", dice la mujer.
"¿Cuánto ofrecen por ella?" pregunta finalmente el hombre. “Les daré el doble” La mujer abre la boca sorprendida.
"Bien", responde la mujer.
"Vamos", comenta el hombre, estando medio paso detrás de mí.
"Espere, la prepararemos para que esté disponible para usted", comenta la mujer. Yo niego.
"No, por favor", suplico, y el hombre niega.
"Me la llevaré. Así es… más sensual", comenta susurrando esto último, y la mujer asiente.
"Muy bien, por favor, esperaremos su llegada nuevamente. Ha sido un gusto trabajar con usted", dice la mujer.
"Colócate esto", comenta el hombre, cuyo nombre aún desconozco, y yo niego. Es una bolsa de color n***o.
"Es obligatorio para salir de aquí", murmura. Suspiro y tomo la bolsa entre mis manos, pero tiemblo. No puedo controlar mis extremidades y él me ayuda con cuidado. Traigo saliva.
- Writer
