Pov: Viktor Wolfstein. «Haz que se enamore de ti. Luego, rómpela.» Esa fue la orden. Y a las órdenes no se les pregunta. Se obedecen. Volteo la hoja disfrutando el sonido que hace el grueso papel al pasar de página. Ni cuando intento relajarme ella sale de mis pensamientos con sus imposiciones. — ¡Viktor! —exclama Beatrix, eso fue rápido. Como si la llamara con mis pensamientos. Intento predecir si está muy lejos. No vuelve a llamarme, si supiera dónde estoy no lo haría. Cierro el libro colocándolo perfectamente en el estante que antes estaba. Doy algunos pasos perezosos hacia el fondo de la biblioteca, como si vigilara el perímetro. — ¡Viktor! —vuelve a exclamar. Me pierdo en el fondo de la biblioteca retomando mi camino hacia la puerta. — Viktor, sabes muy bien... —

