bc

Los Últimos trinitarios

book_age18+
132
FOLLOW
1K
READ
spy/agent
revenge
versatile
comedy
gxg
serious
vampire
office/work place
supernatural
expirenced
like
intro-logo
Blurb

Entre la oscuridad de los tiempos, una mafia se quiere apoderar de nuestra isla. Nosotros somos los únicos designados por el FBI para detenerlos. Y en eso tiene razón, solo nosotros pelearemos para tener nuestra isla de vuelta. Nosotros conocemos nuestro terreno, somos hijos del fuego, venimos del horizonte en alta mar, donde el viento se esconde y el sol desvanece. Nuestro objetivo es detener todo este caos… o que se hunda la isla. Somos los últimos trinitarios.

chap-preview
Free preview
Misión Piloto
Danna Caicedo En este momento tengo dos armas que me apuntan, una es de Ashley y la otra es de Andrey Montoya, un peligroso mafioso por el que estoy decidida a acabar. —Valeria por favor, no lo hagas —Dijo Ashley suplicándome, esta lloraba aunque me apuntaba con el alma. —Yo te amo ¿¡Porque te empeñas en hacerme sufrir!? —Confié en ti, Rebeca —me decía Andrey que también me apuntaba —¿Cómo me puedes hacer esto? ¡Yo me enamore de ti! ¿¡Porque me traicionaste!? —Exclamó. Estaba a punto de decidir qué hacer, porque todo lo que haría a partir de ahora era decisivo para mi futuro. Pero la rabia y el dolor me dominaban. Sin embargo, este era el principio de todo. // . . . Meses antes… Subiendo, bajando. Subiendo, bajando. Punto y aparte. No sé. ¿Qué voy a hacer ahora? Bueno, lo que sé es que me da asco estar en este momento aquí. El hombre con quién estoy es un asqueroso. Estoy en una misión. Scarlette, mi compañera, me mira con cara de asco también, pero hay que aguantar hasta que se termine el tiempo. Falta poco para que vengan los del FBI así que tengo que hacer tiempo. Me encuentro en una especie de trio con este hombre, es un senador que tiene relaciones comprometedoras con los narcos de México y ha traicionado a estados unidos vendiéndole información clasificada a varios países, sin mencionar que anda en el negocio de trata de blancas y prostitución infantil. Ha hecho todo eso y solo es un hombre de 60 años canoso con cara de ser el típico abuelo que te visita un domingo. Así de inocente es la cosa ¿Eh? Dejó que el hombre me haga suya, mientras le pido a Dios que ya se acabe todo esto, estoy cansada, muy cansada de que no me dé placer, de que nunca lo haga bien, he tenido que fingir todo en esta media hora ¿Hasta cuándo? Veo que ya está a punto de venirse. Así que lo apretó más hacia mí y dejó que sus memorables 3 minutos sean mejor. Lo mejor para él. Así que cuando ya se viene lo dejo en la cama y lo miro con una cara sonriente. Aun así me siento frustrada, odio que los hombres sean tan egoístas en la cama. Me acerco a Scarlette y trato de saciar mis ganas bestiales de sexo, la beso despiadadamente y nos empezamos a tocar y ambas tenemos un orgasmo al mismo tiempo, le estamos dando un buen espectáculo a todo el equipo del FBI. Somos bastantes liberales, ya eso no es una sorpresa. —Hey chiquitas ¿les gustó? —Dijo el viejito canoso descansando en la cama. Ya estando saciada tenía humor para seguir con esto. —Sí, me encantó, me eres muy bueno. Excelente en la cama. —Dije dándole cumplidos. Tan falsos como la peluca verde que tengo en este momento. —Uy, lo sé, ¿quieres más? —Me tumbé encima de él desnuda, de verdad ahora los de FBI deben de estar ansiosos por entrar, me desean bastante. —Déjame pensarlo, quiero más, no me canso de ti. —Dije animada, incitándolo para cansarlo más. —Pero si ya lo hemos hecho más de 5 veces. —Dijo sorprendido. Estaba bostezando y quería llevarlo a mi objetivo, cansarlo hasta el extremo para que sea más fácil arrestarlo. —Lo siento, papi rico, pero es que tú eres delicioso. —Dije haciéndole caricias. —Está bien Liliana. —Liliana era mi nombre falso —Voy a cumplir tus deseos, pero dame 2 minutos para reposar —Dijo riéndose. Le beso la calva y me alejo. Asiento con la cabeza y me acerco a Scarlette, está, me mira con cara de no entender lo que pasa. —¿Hemos acabado ya? Quiero saber, ya no sé cuándo lo van a meter preso, ya están aquí los oficiales. —Dijo susurrándome. Estábamos disimulando con caricias mientras hablábamos para que el viejito no sospeche nada. —Se supone que el agente James debe estar por aquí de seguro vio todo el porno que hemos montado. Así que le voy a hacer la señal. —Dije buscando mi teléfono. —Aunque en este momento ya tiene el hotel enjaulado, no lo dudo. —¿Crees que debes de hacer esto ahora? —Pregunto, curiosa. —Obvio, Scarlette, tenemos ya que hacerlo. —Dije susurrándole. Le hice la señal a James, nuestro superior, simplemente era presionar un botón azul y este pues este parpad que ya estaban listos. Ahora solamente debía de ponerle el pequeño dispositivo para poder inmovilizarlo. Dejó que el viejo descanse y mientras él está sumido en un profundo sueño, yo le pongo un aparatito minúsculo que da corrientazo y lo despierto con un pequeño corrientazo. —Pero ¿qué? —Exclama confundido —Ronald Roberts es arrestado por tener relaciones comprometedoras con los narcos de México y ha traicionado a estados unidos vendiéndole información clasificada a varios países, sin mencionar que anda en el negocio de trata de blancas y prostitución infantil. —Dije mientras le ponía las esposas y Scarlette se encargaba de paralizarlo con sus fuertes brazos. —Mentirosa, hija de puta, yo nunca he hecho eso. —Dijo gritando, obviamente mintiendo. —Jaja, dice lo a los federales. ahora el FBI se va a encargar de ti y no tienes derecho a un abogado. Ya tenemos varios meses vigilándote y no te preocupes tesoro, mínimo tendrás una condena perpetua. —Dije levantándome, riéndome y tratando de sostenerlo para cuando venga james. Él estaba furioso, pero más lo estuvo en cuanto james y los demás agentes entraron a llevárselo. Se puso colorado, me puse una sábana y así desnudo se lo iban a llevar. —Gracias Agente Caicedo y Agente Díaz —Dijo James al vernos. —¿Caicedo? ¿No que eras Liliana López? —Dijo el viejito enfurecido.  —Ah, y mi nombre nunca fue Liliana. Soy la agente Caicedo. Además, eres malísimo en la cama —Dije riéndome, despidiéndome de él —llévense a ese asqueroso. Se lo llevaron desnudo, ahí se fue un horrible amante. —Oye, Vístete, ¿sí? Ya sabemos que tienes un cuerpo escultural, no hace falta restregarlo. —Dijo James cuando me vio fijamente —lo siento, cariño, ¿te afecta? Que mal por ti. —dije riéndome. Alcancé una sábana y me tapé. Busqué a Scarlette y esta estaba sacando ropa de una mochila. Mientras los demás agentes trataban de ver un poco de mi cuerpo, yo solo me reía y traté de alcanzar un pequeño minivestido que más que un vestido era una larga remera gris. Todos los chicos silbaron en plan broma y yo solo empecé a reír. —Ya vístete, eres exclusiva para mi —Dijo Scarlette apurando, yo me puse de una vez la larga remera. —Está bien, está bien —Dije riéndome —¿Y la ropa interior? —¿Desde cuándo te importa eso? —Dijo irónica. Yo solo me reí y nos fuimos de la escena. Necesitábamos reunirnos con nuestro jefe. // Ya en la sede del FBI me puse el uniforme y fue a encontrarme con Annel y Jhosep para ir los cuatro a informar sobre esta misión exitosa. Annel es un chico agradable y extrovertido, es nuestro amigo desde hace 200 años, de cuando nos encontramos en los campos remotos de La española. Se nota que es hijo de padre español por su color de piel clara y rasgos españoles. Actualmente se ha pintado el cabello verde al igual que Jhosep. Son grandes amigos. Jhosep es mi hermano mellizo, bien que se parece a mí pero es un poco más morenito que yo y un poco más loco. Ambos somos de madre dominicana y padre… pues no tengo ni idea, nuestra madre nos crio sola como buena latinoamericana promedio. Aunque nuestro padrastro… de eso hablaré luego. —Hola hermanita —Dijo Jhosep abrazándome —¿Qué tal la misión? Entramos en el ascensor plateado y ahí estuvimos a gusto hablando. Me arreglé mis botas marrones. Ya me había vestido y todos teníamos nuestros trajes militares que eran unos pantalones de camuflaje verde y una franela negra. —Estuvo buena, un poco aburrida para mi gusto —Me encogí de hombros —¿Cómo te fue con la esposa del senador? —Eso fue pan comido, Annel le montó un stripper que casi le da un infarto —Dijo señalando a Annel. —Oh, picarón —Scarlette se sorprendió. —Y nosotras somos las promiscuas. —A ustedes se les da todo fácil, son mujeres, nosotros tenemos que improvisar con nuestra labia —Dijo Annel justificándose. —Después de esta reunión ¿Vamos por un poco de vino? —le sugerí. —Necesitamos recargar energías, en especial yo. La palabra vino para nosotros significaba beber sangre humana. —¿Con Vicente? —Dijo Jhosep. —Él tiene los mejores. —Correcto. —dije y se abrió el ascensor, los oficinistas nos miraban con respeto. Pasamos por el pasillo central hasta llegar a la oficina del Agente James y el comandante Skinner. Ambos estaban esperándonos. Nos sentamos en las sillas correspondientes alrededor de una mesa redonda y cerraron las puertas. —Agentes Caicedo, muy buen trabajo, lideraron con éxito la misión. Aunque con métodos cuestionables, pero efectivos. Logramos capturar a todos los implicados sin hacer un escándalo nacional. —el tono de voz del agente Skinner indicaba alegría por ello. Creo que somos sus mejores agentes, ya que es con nosotros que sonríe. —¿Qué le digo señor? El placer bien usado es una arma muy poderosa. —Dije contestándole su hágalo. —Agentes Santana y Díaz. Brillaron como siempre, su dinamismo y lealtad con los agentes Caicedo es admirable. No he visto equipo más unido y sincronizado desde que yo era como ustedes, agentes jóvenes, capaces, fuertes. Ahora solo soy un costal de huesos —Dijo riéndose. —pero ahora necesito informarles de una nueva misión. —¿Nueva misión? Pero si ya salimos de una —Jhosep reclamo. —Estamos tan sorprendidos como tú, apenas nos llegó este informe hace una hora —Dijo James interviniendo. Skinner se sentó y james se levantó dándonos unas carpetas que decían “caso Montoya” —Estos son los expedientes de nada más y nada menos que un peligroso mafioso ruso. Nosotros hemos estado vigilándolo por meses, hasta que logramos saber parte de su plan y descubrimos algo que… no sé cómo lo tomarán ustedes. —¿Qué quiere decir con eso? —Dije con una actitud seria y pensativa. ¿Cómo es posible que una mafia este dándole pelea al FBI? Esto es extraño. —Este hombre —Dijo presentando su foto en pantalla, era un hombre que se veía imponente, pero con canas, aunque puedo decir que su apariencia era muy sexi, sus rasgos físicos estaban bien cuidados. —Es Andrey Montoya. De madre rusa y padre mexicano-estadounidense. Sé que es extraño porque deben de ser los rusos que se involucren en esto pero… este mafioso quiere entrar a estados unidos para expandir su negocio. Su organización se dedica a Tráfico de drogas, asesinatos, trata de blancas, fraude, extorsión, contrabando, apuestas ilegales, terrorismo, usura, prostitución, blanqueo de capitales, tráfico de armas y no sabemos qué más puede hacer este señor. —Bueno, un mafioso más —Dije irónica —pero ¿Por qué nos concierne a nosotros esta tarea? —dije curiosa. Algo no me cuadraba de todo esto. —Él quiere apoderarse de Republica Dominicana, para usarla como su isla personal para lavado de activos, prostitución y canal como tráfico de drogas hasta aquí —Dijo James. Me enfurecí de repente ¿¡Porque nuestro pais!? ¿Qué no tiene nada mejor que hacer? —Él no se apoderará de nuestra isla —me levanté de golpe —voy a hacer todo lo que esté posible en mis manos para hacer que caiga ese malnacido. —Cálmate, estas siendo muy impulsiva.  Aquí necesitarán usar más que sus cuerpos para distraer a los criminales, estamos hablando de un crimen organizado y que hay que hacerlos caer sin que se den cuenta. Cuento con su astucia y dedicación a ello. —Dijo Skinner. Traté de sentarme como pude y miré fijamente a james, él tenía la cabeza baja. —¿tendremos una semana de descanso? Es que estamos recién saliendo de una misión —Dijo Jhosep tratando de alivianar el tema. —Tienen dos semanas para organizarte, viajar a santo domingo y que puedan hacer sus respectivos planes, todos los demás datos están en esas carpetas. A cada uno se le ha depositado un millón de dólares para que puedan moverse por el pais. —Skinner dio su ultimo veredicto. Más que los privilegios y el dinero, estaba aún en shock al saber que a mi querido pais lo quieren invadir. —Gracias por sus servicios, pueden irse —Dijo James despidiéndose. // Salimos del lugar y nos sentamos en un puesto alejado donde venden tacos. Ahí acostumbramos siempre a reunirnos con Vicente. El sol ya estaba declinando y para distraerme un poco del día agitado que tuve, comí unos cuantos tacos. Los chicos no habíamos dicho nada en todo el camino, así que empezamos a hablar. —¿Cuándo quieren irse? Solo tenemos dos semanas para conseguir todo lo que planeemos. —Dije mientras devoraba un taco. —Pues por mi nos iríamos la semana que viene, sabes que aquí se hace más fácil algunos procesos que allá. ¿Llevaremos identificaciones y cedulas falsas? —Dijo Annel. —Si, tendremos que hacerlo —Dije pensativa —Nos iremos en nuestro jet privado para no levantar sospechas. Comunícate con Helidosa, ahí haremos nuestra parada. Luego… mañana pensaremos mejor que hacer. —Vamos a descansar chicos, además se me urge beber vino, me siento muy debilitada. —Dijo Scarlette recostándose sobre mí. —Tantas misiones cansan —Se rio Jhosep. —Y yo que tenía en mente ir a Dubái a conocer chicas árabes —Dijo Annel suspirando. —No mames tienes que llevarme —Se quejo Jhosep. —¡hola, chicos! —Vicente hizo su entrada, tenía 4 vasos de malteada que en realidad era sangre. Vicente es nuestro mentor desde hace más de un siglo y medio. Me encontró vagando en la guerra de la restauración y es una excelente persona, de esas que no te imaginas que son algo increíblemente sobrenatural. —Hey Vicente, ya nos hacías falta —dijo Scarlette —Pasa las bebidas. Él nos dio nuestras bebidas y nos deleitamos este delicioso manjar, hacia ya dos semanas que no probábamos esto y estábamos sedientos. En ese momento todos recobramos nuestro color de ojos rojizos, ya que cuando dejamos de beber la sangre son color n***o. Compartimos un poco antes de comentar la misión, aunque pensándolo bien, Vicente ya de seguro sabe todo esto, es un agente importante pero ya “retirado” entre comillas del FBI. —Ahora, sin rechistar, iremos a la base. Tengo que hablar seriamente con ustedes —Vicente estaba mas serio de lo normal. // Después de la sentencia de Vicente, ahora estamos relajados, quitándonos las botas del ejercito y solo estando con el pantalón del ejercito y una franela oscura. La rutina de Vicente para hablar era primero ¿sintonizarnos con nuestras raíces? No sé cómo llamarlo, pero él hacía que primero uno cantara un pequeño himno antiguo que cantaban nuestros antepasados tainos y luego hacíamos un característico baile que siempre lo veía divertidísimo que consistía en pisar fuerte y, no se como explicarlo. Así que después de quitarnos las medias, nos ubicamos y empezamos a cantar a la orden de él. A una voz, todos entonábamos el himno. —Vengo del horizonte Yo vengo de la mar Donde el viento se esconde Donde el tiempo sabe a sal Yo soy hijo del fuego Yo subí la montaña Y aprendí de la hoguera Entre caña y cizaña. Hicimos nuestro bailecito todo épico, cualquiera que nos viera piensa que estamos haciendo una invocación. Aunque no se equivocan, esto parece una pinche invocación mamona. —Recuérdenlo muy bien trinitarios. Son hijos del fuego, aprendieron entre caña y cizaña a no derrumbarse, a no decaer. Son dominicanos ¡no jodan! Recuerden muy bien sus raíces, ahí están sus fortalezas convertidas en debilidades y de las debilidades deben de aprender. —Los discursos de Vicente mas que inspirarme me hacían querer preguntarme de que libro motivacional saca todas estas palabras. —¡Marquen el paso! Nos formamos recto y en línea a su orden repentina. —¡Descansen, soldados! —Ordenó otra vez. Nos quedamos en posición firme, pero descansando los brazos y las piernas. —Ya recibí el informe tan descarado de lo que esta pasando en republica dominicana. Esto es una vergüenza, si Duarte viese lo estúpido que esta nuestro pais querría morirse otra vez —Dijo indignado. —¿Es acerca del mafioso que quiere adueñarse de la isla? —Dije curiosa. —Si, pero lo que mas me indigna es que solo por dinero se están vendiendo, la generación que esta ha perdido sus valores, se están volviendo esclavos sin misericordia solo porque una persona con dinero les esta ofreciendo un futuro incierto, desvanecido… —Dijo agarrando un cuchillo —En honor a nuestros ancestros, los vamos a liberar de ello y aunque no podemos intervenir de lleno en las decisiones de todos, vamos a formar dominicana a su antigua gloria. —Aprendiendo filosofía con Vicente, que cool —se rio Scarlette, Vicente la miro mal —Ya, tranquilo, solo era un chiste. El ambiente esta mas tenso de lo normal. Yo estaba reflexiva a todo esto ¿Cómo vamos a destruir toda una mafia sin que nadie se dé cuenta? —Confió en ustedes, tienen ideas brillantes pero ahora les sugiero… les sugiero y les suplico, que vayan con cautela, no sabemos de lo que es capaz este tipo y aunque aparentemente somos inmortales, debemos tener la guardia despierta. —Oh Vicente, ¿Por qué siempre se repite este maldito cliché del villano imposible? Viene alguien poderoso, parece que no lo vencemos y hualá, derrotado. Ya esto me cansa, solo somos agentes, no superhéroes. Amo a dominicana, pero solo es una misión más, solo es derrotar a un puto mafioso. —Dijo Annel irónico. —Cuida tus palabras Annel, aun así, recuerden lo aprendido. Merecen descansar por unos días ¿Cuándo empezaran como tal la misión? —Dijo Vicente cambiando de tema. —Empezaremos el lunes, ahora buscaremos lo necesario e iremos ideando un plan básico para infiltrarnos. —Dije, tomando la palabra. —¿No vendrás con nosotros? —iré una semana después, yo también necesito reunir una que otra información, acerca de su alimentación a base de sangre, tendrán que llevar reservas de acá, intentare contactar a una doctora dominicana para que nos facilite más reservas, necesitaran mucha sangre humana para esta tarea. —Se rio —Sus habilidades tienen que sobresalir a flote ahora. —Estaremos esperándote con ansias —Dijo Jhosep —Annel y yo saldremos ahora a buscar los datos que nos hacen falta. —Correcto, pueden marcharse. Pero Danna se queda, necesito aclararle algunas cosas —Dijo agarrando mi hombro. Todos asintieron y salieron a la velocidad de la luz de la habitación. Mire a Vicente, quien este me miraba preocupado. —¿Qué pasa? —Le inquirí. —Estuve buscando información sobre Andrey Montoya. Pero aun no la puedo dar como verdadera. Tu liderazgo se tiene que pulir ahora, tienes que usar la cabeza, no tu cuerpo —dijo sentándose —Danna, tengo sospechas de que este hombre es un viajero del tiempo. —¿Cómo es esto posible? —Dije sorprendida. —Solo tengo una corazonada, no le digas esto a los chicos, solo sigan con su plan, yo seguiré investigando para confirmar si esto es verdad o no. —Dijo sobándose la cabeza. —vaya, que día sorpresivo —me reí, incrédula a lo que escuchaba. —Así como nosotros somos superhumanos, ¿él puede ser uno de ellos? —Puede ser, pero solo es una teoría, solo tengo una foto antigua sin importancia, pero aún no se si es él. —dijo mirándome. —Nos mantendremos en contacto, ¿Okay? —Dije dando por cerrada la conversación. —Sé que tu eres la que mas siente por este país y te duelen sus habitantes, así que por favor no hagas una locura —Dijo Vicente dándome una sonrisa. —No te prometo nada. —Dije riéndome antes de irme a la velocidad de la luz hacia afuera. Apenas esta misión acababa de empezar.

editor-pick
Dreame-Editor's pick

bc

Navidad con mi ex

read
8.7K
bc

Bajo acuerdo

read
7.6K
bc

La esposa rechazada del ceo

read
163.5K
bc

Mi Sexy Vecino [+18]

read
50.0K
bc

Prisionera Entre tus brazos

read
85.8K
bc

Tras Mi Divorcio

read
509.0K
bc

Yo, no soy él

read
88.1K

Scan code to download app

download_iosApp Store
google icon
Google Play
Facebook