-Una vez en mi oficina no dejaba de ver por la ventana, quería tener una vista de Mia y mi padre.- -Alfredo llegó, me informó que todos los hombres de seguridad habían llegado, así que fui a su encuentro- -Estaban reunidos alrededor de 10 hombres, ellos eran mi primera línea de seguridad, eran los encargados de organizar toda la logística.- -Una vez entre comencé con el interrogatorio, no soy una persona paciente, tampoco voy a perder mi tiempo hablando así que sin mediar palabra alguno le dispare Justo en la frente al primero- -Una vez cayó, apunte al segundo- -Todos guardaban silencio así que uno más cayó el suelo- -Iba por el cuarto hombre cuando lo escuché hablar- -¡Fue Reinaldo!- gritó el hombre -¡No es cierto!- se defendía Reinaldo. -El nos ofreció un millón de dólar

