Alejandro está arreglando todo para su viaje a Estados Unidos, ha permitido que Lucero pase más seguido con su padre, a él le ha tocado estar una semana entera en la ciudad, agilizando las gestiones del viaje, en el hotel se siente como león enjaulado, camina de un lugar a otro sin tener esa paz. —Colocho, vete a la hacienda y me traes a mi mujer. —Como ordene jefe. Alejandro no soporta estar en abstinencia y le prometió a ella que no tocaría rameras mientras estuviera con ella, al menos eso se merece ella, de todos modos, a ella le toca estar en la embajada dentro de tres días, no pensaba separarla de su padre, pero la necesito en mi cama. Luz ha estado en el hospital durmiendo, aprovechando el permiso que él le concedió, su padre está estable, más sin embargo no ha despertado, el doc

