Mientras que Charles comenzaba su nueva vida, en California también las cosas iban cambiando, Isabela, a pesar de que también estaba sumida en un mar de sentimientos, veía como día tras día el tiempo pasaba y no volvió a saber de Charles, en cambio, con Jordan comenzó a ver una nueva oportunidad. —Preciosa, muero de ganas por verte, Isabela, me estás volviendo loco —Jordan le expresó en una llamada. —Bueno Jordan, pero como te lo he dicho, debemos ir despacio, hasta ahora llevamos un mes conociéndonos, y pues bueno —Isabela enredó sus dedos en el cable del teléfono —Solo espero que las cosas vayan bien entre los dos—Eso último se lo dijo con honestidad, pues añoraba el momento en el que dejará de tener sentimientos por Charles. —¡Claro que sí! Yo tengo muy claro todo lo que me has

