El sentir animal

Combates

Pasaron los días y el perrito que me había seguido se había adaptado muy bien a el entorno de la base, todos los militares querían a este canino, le colocamos el nombre de “Rufo”, y así pasaron las semanas, todo era prácticamente lo mismo, patrullajes de rutina, entrenamiento etc., pero todo esto iba a cambiar, un día mientras realizábamos patrullajes, el comandante “Alberto”, recibió por la radio, una orden del coronel,—Capitán Alberto, diríjase a las coordenadas, (-33,45), con su pelotón y préstenle apoyo a la brigada móvil 45, cayeron en una emboscada, ya varios pelotones se dirigen hacia allá—. El comandante inmediatamente, nos ordeno y nos preparamos, caminamos unos, 10 kilómetros, cuando entramos en el área, podíamos escuchar las detonaciones, y los disparos, ninguno de nosotros nunca había estado en un combate, nuestro comandante nos daba las ordenes e inmediatamente comenzamos a rodear la montaña, el plan, que había trasado el coronel, era que los 10 pelotones que mando en apoyo para la brigada móvil, rodearan las montañas e hostigar a el enemigo, cuando todos los pelotones estaban, ya en sus puestos, comenzaron los bombardeos, Varios aviones (EMB-314, super tucanos) de la fuerza aérea, comenzaron a atacar a el enemigo desde el aire, nosotros quedamos impresionados, con todo lo que estaba pasando, nunca en nuestras vidas, habíamos visto, ese tipo de escenas, después que los aviones acabaron, el general ordeno que comenzaros a avanzar, todos los pelotones comenzaron a rodear a el enemigo, ya dentro de la zona de alcance, pudimos observar, como aun varios guerrilleros atacaban a la brigada móvil 45, inmediatamente comenzamos atacar, ya teníamos rodeado completamente al enemigo, después de un largo combate, finalmente no se escucharon mas disparos de ráfagas, cuando entramos en la zona donde había estado el enemigo quede impresionado, se podía observar, como los bombardeos de los aviones, habían arrasado con todo, al menos unos 60 guerrilleros estaban en el piso muertos, la mayoría estaban mutilados, era una escena bastante trágica, también habían guerrilleros vivos, al menos unos 10 guerrilleros se le prestaron los primeros auxilios, después de que termino todo, hicimos un barrido de toda la zona, el resultado de la batalla fue abrumador, unos 65 guerrilleros de el frente 21 de las Farc resultaron muertos en combate, 10 personas heridas capturadas, por otro lado, la brigada móvil tuvo varias bajas, al menos unos 7 soldados resultaron muertos en los enfrentamientos, y unos 26 resultaron heridos.

Finalmente, luego de todo lo sucedido, llegamos a la base, nuestro comandante “Alberto” estaba muy feliz por nuestro desempeño. —Muy bien muchachos los felicito, a pesar de que han recibido poco entrenamiento y no es su deber estar en el área lo hicieron muy bien, por ese motivo les daré el fin de semana de descanso—. Todos celebramos esto, desde que estábamos en el espinal, no habíamos tenido tiempo para relajarnos y disfrutar un poco del pueblo.

Después de unos días finalmente llego la hora de salir, Isaías, Carlos y Andrés y mi persona, habíamos planeado ir a una discoteca, estábamos muy emocionados, era la primera vez que podíamos disfrutar del pueblo, luego de que nos preparamos y ultimamos detalles, llegamos a la discoteca, cuando pisamos el lugar, una hermosa chica nos atendió, —Hola bienvenidos, será un gusto para mi poder atenderlos, díganme que desean para tomar—.

La verdad la chica fue muy amable y además de eso era muy linda, nosotros comenzamos a entrar en ambiente y pedimos unas cervezas, la discoteca la verdad se encontraba bastante llena, habían bastantes personas, mientras estábamos disfrutando, Isaías, nos dijo, —Muchachos, miren en la mesa de allá, hay varias chicas y al parecer están solas, invitémoslas a nuestra mesa—.

 Nosotros volteamos a ver, y era cierto, estaban unas 5 chicas sentadas solas, nosotros nos emocionamos cuando las vimos, así que Isaías tomo la iniciativa y se dirigió a la mesa de ellas, después de un rato las chicas accedieron y se sentaron junto a nosotros, los muchachos estaban mas emocionados que nunca, desde que están prestando el servicio no habían tenido la oportunidad de estar con una chica, yo si me encontraba un poco calmado, mi mente nada mas estaba pensando en la mesera, mientras disfrutábamos con las chicas, un muchacho de unos 25 años se acerco a nuestra mesa, —Hola hermosas, ¿por qué no se van a la mesa con nosotros?, que hacen con estos perdedores—. Cuando Isaías escuchó esto, no pudo evitar sentirse enojado, la verdad Él tenía un temperamento muy fuerte, —¿Que pasa amigo? ¿No ves que están con nosotros? —. —Amigo la verdad no me interesan lo que ustedes puedan decir o hacer, solo me interesan estas hermosas chicas—. Después de un par de palabras más, el ambiente se volvió tenso, yo estaba observando todo en silencio, yo era mas calculador y no me dejaba llevar por la emoción, las chicas también parecían un poco incomodas, y se les podía ver el miedo en sus ojos, después que analice la situación dije, —Amigo, veo que tienes agallas y te sientes mucho por que tienes un arma en tu lado derecho del pantalón, Evitemos un problema mayor, si las chicas desean irse con ustedes, no abra problemas las dejaremos ir, pero si no quieren no insistan—. Mis palabras eran fuertes y claras, aunque era calmado, tenia mi temperamento fuerte, el chico pudo observar que yo tenia una mirada muy seria, además de eso que no me asusto al saber que ellos tenían armas, lo cual se tranquilizo un poco y dijo. —Está bien preguntémosle entonces a las chicas—.  Las chicas estaban entre la espada y la pared, no querían causar problemas, así que le respondieron a el chico, —La verdad es que llegamos con ellos y nos iremos con ellos, gracias por invitarnos—. El chico cuando escucho esto, se sintió un poco amargado, pero no podía obligarlas tampoco a irse con ellos, así que se marcho para su mesa, nosotros disfrutábamos del ambiente, bailábamos con las chicas, nos tomábamos nuestros licores etc., a pesar de que la estábamos pasando bien, yo no podía dejar de mirar a los chicos que querían quitarnos a las chicas, estuve atentos a ellos todo el tiempo, ellos a cada rato nos miraban y se hablaban entre ellos, yo les dije a los muchachos que estuvieran atentos, después de un rato la mesera nos trajo la siguiente ronda de alcohol, la verdad a mi me llamaba la atención así que decidí tomar la iniciativa y le dije, —Hola, oye muchas gracias por atendernos, ¿cómo te llamas?—. —Hola, hasta que por fin decidiste hablarme, yo me llamo carolina, mucho gusto—. —que nombre tan lindo, jaja como así que hasta que por fin te hablo, no pensé que una chica como tu se fuera a fijar en mi la verdad—. —Y por que no? La verdad eres bastante simpático—. La verdad mientras hablaba con ella, pude sentir, como nos entendíamos muy bien, cada vez el coqueteo era un mayor, de un momento a otro, el chico que nos había interrumpido anteriormente a mis amigos y a mí, se acercó a donde yo estaba hablando con la mesera, —Nena que pasa, por que no nos has traído las bebidas—.

Su tono fue un poco desagradable, pude sentir que esta persona sentía algo de envidia, la verdad sentí mucho enojo en ese momento, pero me calme, la chica fue rápidamente por sus bebidas y se las entrego, ya después que el chico se marchó, le pregunte que, si ella sabia quienes eran esos chicos de esa mesa, ella me dijo, —Los chicos de esa mesa son guerrilleros de la zona, tengan cuidado—.