—Mmm —Mamá asintió lentamente y soltó la cabeza de papá—. Creo que lo sientes. Simplemente no sabes cómo expresarlo con palabras. "¿No sé cómo hacer qué?", rió papá entre dientes. Tenía aliento a café. A mamá le encantaba cómo apestaba. "Quiero decirte algo. Algo sincero. Y a modo de compromiso, ¿qué tal si antes de que respondas...", mamá movió sutilmente las caderas, haciéndole saber a papá que no había olvidado por qué estaba sentada donde estaba, "acordamos besarnos, sin parar, tan apasionadamente como lo hemos hecho en toda nuestra hermosa y perfecta vida juntos, por un minuto?" "E-eso... puede que dependa de lo que tengas que decir", frunció el ceño papá. Mamá flexionó y relajó los músculos de su trasero contra la erección de papá. Papá la agarró por las caderas y apretó su incr

