Cuando bajamos a desayunar me doy cuenta de que los padres de mi asistente parecen no saber nada sobre lo sucedido entre su hija y yo hace unos instantes, por lo que por un lado me siento aliviado no deseo que piensen que me estoy aprovechando de su hospitalidad, pero por otra parte tengo miedo de alejar a mi asistente más de mí si no aclaro las cosas con ella; durante el desayuno intento hacerle la plática, pero esta solo me contesta con monosílabos por lo que me doy por vencido. —Regreso más tarde. —Comenta mi asistente una vez que se pone en pie, se acerca para despedirse de sus padres y luego le hace un pequeño cariño a Gala ignorándome una vez más. —¿A dónde vas Yildiz? —Pregunta su padre quien acaba de regresar de la cocina donde ha dejado los platos. —Me he quedado de ver con Mik

