Eternamente

Capítulo 3

La Profesora me abraza con fuerza, agradeciéndome en voz baja.

Su esposo estaba en la entrada, muy preocupado por todo.

—Me iré, no puedo seguir aquí de lo contrario todos estarán en peligro nuevamente.

—Tome mi número, puede llamarme cuándo quiera Profesora, la extrañaremos mucho.

Una vez todos se despidieron de ella, la vi irse junto a su esposo. Poco a poco todos se fueron, Jane se fue con su familia no sin antes tratar de convencerme de que fuera por Emma para ir a su casa, pero rechacé su invitación y ella llorando un poco se fue con su padre.

—Destiny, te quedarás unas semanas con nosotros en el castillo, no es seguro que vayas a tu casa.

—¿Qué? ¿Por qué no?

—Recibimos un avisó anónimo, tu casa estaba siendo acechada por un vampiro, revisamos toda el Área pero no encontramos nada —Dijo el príncipe, llegando con nosotras —Una Disculpa, soy Dereck Black.

—Un gusto Conocerlo Príncipe Dereck, son Destiny Healey —me presente haciendo una pequeña reverencia, aunque en mi interior tenía ganas de brincarle encima.

Aun así, había algo en el príncipe que no me convencía por completo, su aura era fuerte y potente, pero había algo de oscuridad en él, pero obviamente todos tenemos esa maldad en nuestro interior.

—Vamos —dijo Kate tomando mi mano y guiándome a la salida —Iremos a tu casa para que vayas por ropa, Tomaremos toda la que tengas, si necesitas mas estoy segura que podremos comprar.

Suspiró negando, por qué se que con ella es imposible. Una vez estuvimos a punto de llegar a casa, Kate recibió una llamada de Alice, que al instante me llamó para hacerme demasiadas preguntas.

Conforme arreglaba todo nuestro equipaje le contestaba sus preguntas, también estaba muy ansiosa por ver a Emma.

Este día nuevamente sobreviví, no sabía si el día de mañana correría con la misma suerte...

—Es una linda casa.

La voz del príncipe Dereck me sacó de mis pensamientos.

—Si, es una herencia de mi madre.

—Me ha llamado la atención el campo protector, son muy habituales en las brujas puras...

—Si, mi Abuela lo creó cuando mi madre era Joven, decía que asi mantendría a mi madre a salvo de los vampiros.

—Entonces ¿Eres Bruja? Por qué si es así, déjame felicitarte, ocultas muy bien tú esencia...

—No, no soy Bruja, mi madre si era bruja pero yo no lo soy, a mi me adoptaron cuando era una recién nacida, realmente Emma es la que tiene sangre de Bruja Pura.

Le dije terminando todo, unos minutos después llego Kate con todas las cosas de Emma.

—Dejame ayudarte.

Dijo el príncipe, acercándose rápidamente y en un acto de reflejos, me alejé de él. La situación se puso incómoda, así que solo le sonreí en forma de disculpa y tome mis cosas para salir de ahí, los humanos no tienen tanta fuerza, por lo que no pueden cargar varias cosas a la vez.

Fui bajando mi maleta con precaución pero el príncipe Dereck me la quito de las manos, me sonrió y salió de la casa con mi maleta para dejarla en el auto.

Miraba por última vez mi casa, esperaba poder regresar, pero siendo sincera conmigo misma, no creó eso posible, tarde o temprano se sabrá la verdad.

(••••)

Mentira tras mentira, odiaba hacerlo, pero no podía revelar lo que era, el temor de ser alejada de Emma era más grande que cualquier cosa, si bien nuestros padres eran Humanos, Emma si tenía Sangre de Bruja, ya que igual que a mí, a ella también la adoptaron.

Solo espero y Kate y Alice no digan nada, de lo contrario tendré que irme y alejarme de todo.

—Destiny.

La voz de Kate me sacó de mis pensamientos.

—Hemos llegado, Emma está en la habitación de Alice.

Solo pude asentir y bajar rápidamente para ir a la habitación, afortunadamente no me tope con nadie y pude llegar rápido.

Mi corazón se tranquilizó al verla a ella, mi pequeña niña dormía con tanta tranquilidad, que me gustaría tener esa tranquilidad ahora.

—Destiny ¿Estás bien?

Negué sin quitarle la vista a Emma.

—No puedo Alice, las cosas se están complicando.

Kate llegó y dejo mis cosas en la entrada, no sin antes cerrar la puerta y adentrarse por completo.

—Cuéntanos cómo te sientes.

—Saben que no puedo hacerlo y menos aquí, solo puedo decirles que si las cosas no mejoran, me iré de aquí.

—Destiny ¿A donde irás? No sabes que hay más allá de esta ciudad y si los lobos no son amistosos como creemos y si los sombras te hacen algo, las brujas podrían quitarte a Emma...

—Los Híbridos están siendo cazados, pero que pasaría si después empiezan a matar a Humanos o ancianos o incluso niños para que ellos salgan, no puedo poner en peligro a Emma, Ser una Multihibrida pondrá en peligro a Emma, no puedo...

Las palabras se quedaron atoradas en mi garganta, mis sentidos nunca fallaban, había varios vampiros escuchando nuestra conversación.

—¿Que ocurre Destiny?

—Alguien está escuchando.

Hubo pasos apresurados por llegar a la habitación.

—Ellos lo saben...

La puerta se abrió en cuento tuve a Emma en mis brazos. 6 Vampiros estaban en la puerta, el príncipe Damián y El príncipe Dereck también estaban ahí, más bien todos los hermanos Black.

El miedo hizo que mis ojos cambiarán de color y lo supe al momento en que Kate me miró asustada.

—Destiny...

—Tranquila por favor.

—Destiny no queremos lastimarte.

Vi a Dereck querer acercarse pero no lo permití, con mi magia lo empuje un poco para atrás.

—Destiny por favor, hablemos, ellos no te lastimarán.

Las palabras de Alice me hicieron voltear a verla.

—¿Lo sabían? ¿Les contaron sobre mi?

Su silencio me confirmó mis preguntas.

—Me traicionaron

Mi voz salía quebrada, mi vista se nublo por las lágrimas, mis mejores amigas me habían traicionado. Poco a poco baje la guardia, pero al instante que vi que los príncipes se acercaron a mi, abrace a Emma y me acurruqué en esa esquina, desapareciendo por completo de ese Lugar.

(••••)

—¡Mierda!

—¡Les dije que era muy apresurado! —grito Damián.

Todo rastro de Destiny había desaparecido, incluso sus maletas.

—No regresará a su casa, no sabemos a dónde pudo haber ido.

Alice lloraba sintiéndose culpable, su amiga ahora creía que la habían traicionado.

—¿Ahora que vamos a hacer? Si alguien más se entera, tanto ella como Emma estará en peligro.

—Nadie más lo sabrá, la buscaremos nosotros, sin soldados ni buscadores, solo nosotros —Dijo el Príncipe Alexander.

—Hay algo más —dijo Dereck llamando la atención de todos, suspiró y bajo la mirada —Ella es mi Tua cantante.

—Mierda.

Eso nadie se lo había esperado.

(••••)

No sentía nada a mi alrededor, abrir los ojos notando que estaba en las profundidades del bosque, mis cosas estaban a mi lado y Emma seguía dormida, me eleve hasta llegar al árbol mas grande y ver el panorama, estaba muy alejada de la Ciudad, muy alejada de la Manada de los Lobos, La ciudad de los Sombras no estaba a la vista y no habia ningún aquelarre de brujas por ningún lado.

Este territorio era neutro, no era de Nadie, bueno hasta ahora, a partir de ahora está el territorio de una Hibrida y muy pronto sería una ciudad para los Híbridos.

Una vez estuve en tierra, con mi magia fui construyendo una pequeña cabaña, una no muy grande, ideal para Emma y para mí, use una barrera para marcar mi territorio, de ahora en Adelante seríamos dos Brujas en esta cabaña, no podia permitir que siguieran pensando que era una Humana, seríamos un blanco muy fácil.

Mi corazón dolía, por mucho que no quisiera aparentarlo, dolía en gran manera, mis amigas me habían traicionado. Aun no logró encontrar una razón por el cual lo hayan hecho, sin embargo esto nunca la perdonaría.

Al dejar a Emma en la pequeña cama, note que seguía dormida, no tardaría en despertar y tenía que tener su comida lista. Olvidando todo lo que había pasado, me dispuse a arreglar la cabaña por dentro.

Aquí empezaríamos de Nuevo y si todo sale como planeaba muy pronto los Híbridos dejarían de ser perseguidos y así yo poder tener la paz que tanto me hace falta y la estabilidad que Emma necesitaba, no podíamos seguir huyendo, no podria hacerle eso a ella, le prometí a Mamá que la cuidaría y la mantendría a salvo y eso es lo que haré.

(••••)

Los pasos de ese Demonio se oían por todo el lugar.

—Señor, le tengo noticias.

—Habla.

—Existe la posibilidad de que exista una Multihibrida...

El vampiro levantó la cabeza para ver a su subordinado, en sus ojos se podía notaba el deseo por tener a esa Multihibrida.

—¿Es mujer?

—Es lo que se rumorea, más sin embargo aún no está confirmado.

—Muy bien, que investiguen bien y si la llegan a encontrar vigilenla, hasta que yo les de la orden de traerla.

—Si señor.

El subordinado hizo una reverencia y estuvo a punto de salir de la habitación, sin embargo escucho la voz de su jefe.

—Si algo le llega a ocurrir, pagarás con tu vida, ella será nuestra futura Reina.

El hombre solo asintió y salió de la habitación. La mirada que él vampiro tenía era una que reflejaba una obsesión profunda.

—Espero y seas tú Elizabeth, nuestros asuntos aún están sin resolver.

Dijo tocando la foto de una mujer que tenía en su escritorio, si la Multihibrida escapaba nuevamente, él la buscaría por todo el mundo, pero ella tenía que ser de él.