—Yo simplemente no sé por qué, él no va a aceptar de todos modos y... —¿Qué no voy a aceptar? —Me asusto con su voz. —Uh... Hola. Bueno, es que... Mi madre insistió en que te invite a ti y a tu madre a cenar hoy y... Lo sé... —Aceptamos la invitación. —¿Cómo? —No puedo creer que venga. —Dije que sí, ¿te decepcioné? —Sí... Quiero decir no, solo me quedé sorprendida —Maldición, estoy nerviosa—. Mis padres cenan temprano —¿Cómo que mis padres cenan temprano? No tenías otra cosa que decir, Isabelle. —Hmm, está bien, estaremos allí a las siete, ¿está bien? —Sí, está perfecto —Guardo silencio por unos segundos —Hasta luego. —Hasta luego, Isabelle —No puedo explicar el sentimiento que me dominó, pero definitivamente no era decepción como él imagina. —Entonces él viene —Dora pregunta de

