*2 años después*
- ¿Qué? .- Ella forcejeaba.- ¿Qué es lo que quieres? ¿Por qué me traes aquí?
- Necesito que hablemos.
- A decir verdad a mi no me interesa hablar contigo.
- A mí tampoco pero esto es algo que nos concierne a ambos.
- ¿Y eso es?.
- Ya estoy harto de que nuestros padres nos obliguen a compartir. En verdad estoy harto de tener que fingir que no pasa nada.
- No entiendo cuando van a dejar esa absurda idea.- Resopló.- Esta mas que claro que a ninguno nos interesa tener una amistad.
- Entonces busquemos una solución.
- ¿Y cuál es?
- ¿Qué te parece si delante de ellos pretendemos que nos llevamos bien?
-......- Se cruzó de brazos y arqueó una ceja.- ¿Acaso no es lo que hemos estado haciendo todo este tiempo?
- Nos hemos estado ignorando que es diferente. No que seamos amigos, hablo de saludos casuales, evitar la hostilidad. Si ellos ven que nos calmamos entonces también se calmaran.
- No es mala idea.
- Bien, entonces a partir de hoy pretendemos que nos llevamos mejor.
- No queda de otra.- Rodó los ojos con fastidio.
Los chicos crearon un tipo de tregua el cual solo se llevaría a cabo frente a sus padres, ninguno tenía interés alguno que dicha tregua se volviera realidad, lo único que querían era que los dejaran en paz, así que desde ese día en adelante ambos chicos se saludaban casualmente y se hablaban de forma normal y sin hostilidad, pero sólo delante de sus padres haciendo que estos estuvieran felices.
Debido a esto los padres ya no ponían tanta insistencia en que compartieran porque suponían que sus hijos lo hacían por ellos mismos.
Ella y Cameron empezaban a sentirse aliviados, ya no se veían forzados a compartir, solo tenían que soportarlo en algunas fiestas y reuniones pero siempre buscaban la forma de evadir la situación, el método más factible era el de llevar un amigo con ellos, así se entretenían con sus amigos y sus padres no los molestaban.
Ella siempre llevaba consigo a su mejor amiga Laila la cual era alegre y dinámica, eran amigas desde la secundaria y los señores Parker la apreciaban bastante debido a eso no ponían objeción alguna para que esta estuviera presente. Cameron por su parte llevaba consigo a Candance Jones una joven atractiva y encantadora, se habían conocido en la Universidad por lo que su relación era algo reciente, aún así la chica se había ganado el afecto y la confianza de Cameron muy a pesar de que los Spencer no la veían con buenos ojos.
………
Esa noche las familias y amigos se reunían para festejar. Se trataba de la fiesta de cumpleaños de la señora Spencer y al igual que cada celebración se efectuaba de manera sencilla. Los señores Parker, algunos amigos más cercanos y familiares asistían, al lugar también asistían los amigos de los chicos los cuales en aquella ocasión pasaron una noche tranquila, como siempre ambos evitando tener que verse las caras.
Ella tiraba con impaciencia del brazo de su amiga, ambos corrían en dirección a la piscina de la casa Spencer, habían logrado extraer algunas cervezas y pretendían tomarlas para pasar un buen rato, pero las risas y las bromas se detuvieron repentinamente cuando divisaron algo que les tomó por sorpresa.
De pie en uno de los gazebos, amparados por la oscuridad de la noche se encontraban Cameron y Candance, el par se besaba y toqueteaba con impaciencia y lujuria. Ella, quien no necesitaba ver aquello y mucho menos tener problemas con su rival, tiró de la mano de su mejor amiga para regresar a la casa, quería huir de allí lo más pronto posible.
- ¡Tú!...- Cameron le gritó.- Ven aquí.
- ¿Ahora que quieres Spencer?.
- ¿No podías elegir otro lugar u otro momento Parker? .- Se acercó.
- Lo siento pero nosotros ni siquiera sabíamos que estaban aquí.- Tiro de la mano de su amiga.- Vamos Laila.
- ¿A dónde crees que vas? .- Cameron tiró de su brazo.
- ¡Oye! .- Laila lo empujó.- Quieto...- Lo miró fijamente.- No estás hablando con una de tus criadas.
- ¿Tú que te metes?...- Cameron se enojó.- ¡Retrocede!.- Le gritó.
- Esperen...- Ella intervino.- No vayamos a formar un espectáculo aquí.- Se giró hacia Cameron.- ¿Querías decirme algo?.
- Ven conmigo...- Tiró de su mano mientras le daba una mirada de muerte a Laila.- Ni se te ocurra decirle a mis padres lo que viste.
- Descuida eso no es asunto mío.
- Bien...Te lo agradezco.
- A mi no me agradezcas nada...- Tiró de su mano.- No lo hago por ti, lo hago porque en verdad no me interesa lo que hagas.
- Es bueno que no te importe mi vida...así como no me importa la tuya.
- ¿Terminaste?...- Observó a su amiga.- Me esperan.
- Por cierto...- Se acercó a ella.- Calma a tu amiga. La próxima vez que me enfrente no lo tomaré con calma.
- ¿Muy valiente?.- Sonrió con enojo.- Pero no tan valiente como para darle la cara a tus papis.- Se burló mientras se alejaba.
Cameron observó a la chica quien se alejaba con una sonrisa burlona, en verdad detestaba esa actitud que él calificaba como arrogante, para él aquella niña solo era un farsante que se disfrazaba de niña bonita y buena para ganarse a los demás, una pose mal actuada.
………
Después de la fiesta ambos se cruzaban a menudo ya que al igual que sus padres ambos estudiaban en la misma universidad, gracias a los señores Spencer, Ella cursaba la carrera de artes plásticas, amaba crear arte y su ingenio era grandioso. Cameron por su parte estudiaba administración de empresas, como heredero debía de tener conocimiento del manejo debido de las empresas.
Los chicos se cruzaban casualmente y no había un solo momento en que no se lanzarán una mirada de desagrado, en la Universidad conocían dicha rivalidad y a muchos les parecía gracioso, bromeaban con el hecho de que del odio al amor había solo un paso y que al final aquellos dos terminarían juntos.
……….
Ella almorzaba tranquilamente en la cafetería junto a su mejor amiga y su grupo de amigos aquella mañana. Laila era estudiante de medicina de último año, se especializaría en ginecología y obstetricia, ella y Ella se veían poco en la universidad así que aprovechaban cuando coincidían con el almuerzo.
Mientras Ella reía y bromeaba con sus amigos cierta repentina presencia hizo que su ánimo cambiara. Cameron entraba a la cafetería tomado de la mano de Candance, ambos caminaban muy juntos mientras platicaban con sus amigos, con lo que había visto la noche de la fiesta era más que claro que ese par tenía algo mucho más allá de la amistad.
La pareja finalmente decidió tomar asiento y lo hizo justamente una mesa frente a Ella, inmediatamente el chico y la chica se vieron empezaron a lanzarse miradas de muerte, hasta que una suave y varonil voz rompió con aquella tensión.
- Mi princesa.- Un chico se acercaba a la mesa de Ella.
- ¿Bryan?...- Se levantó con rapidez recibiéndolo entre sus brazos.
- Mi princesa...- Envolvió su cintura con sus brazos y la elevó.- Me moría por verte.
- Pumpkin..- Sonrió con emoción.- Yo también me moría por verte.
Cameron observó atentamente aquella situación y se sorprendió al ver que ambos terminaban el saludo con un tierno beso en los labios. El chico que estaba frente a él era Bryan Simons un joven 2 años mayor que Ella, hijo de un empresario farmacéutico y uno de los jóvenes más codiciados de la Universidad.
- Bryan.- Laila se acercó.- Qué bueno que estés de regreso, esta tonta ya me tenía hastiada.
- ¡Cállate!...- Ella empujó a su amiga para luego tomar la mano del chico y tirar con suavidad de él.- En verdad te extrañe tanto.
- El viaje se prolongó debido a que mi hermanito enfermó.- Depositó un beso en sus labios.- Pero ya estoy aquí.
Cameron veía la escena en silencio preguntándose en qué momento aquella chica había conseguido un novio y sobre todo a uno de los chicos más codiciados de aquel lugar. Sin dudas no sabía nada acerca de Ella Parker y aunque no le importaba tampoco dejaba de sorprenderle.
……..
Ella y Bryan llevaban 1 año de noviazgo, el chico era dulce y encantador pero también era de carácter fuerte y decidido por lo que fue quien dio el primer paso al acercarse. Había sido flechado por aquella chica,
Ella por su parte quedó prendada del chico para ella a parte de ser inteligente y decidido, era alguien especial y encantador. Su carácter alegre hacía contraste perfecto con su aspecto el cual era bastante atractivo, fue así como después de algunos encuentros y coqueteos casuales Ella y Bryan empezaron una relación.
- ¿No...novio?...- La señora Parker parpadeó.
- Si mamá...- Ella sonrió.- Recién llegó de Nueva Zelanda, estaba de vacaciones con su familia por lo que quiero aprovechar para que lo conozcan.
- ¡Vaya!.- El señor Parker forzó una sonrisa.- Tu novio debe considerarse muy afortunado.
- Yo soy la afortunada papá.- Sonrió.- ¿El domingo estaría bien?.
- Cariño...¿Olvidaste que el domingo vienen los Spencer? Hija...- La señora Parker resopló entre risas.- ¿Qué tan enamorada te tiene ese niño para que olvides una tradición de años?.
- Mamá...- Bajó la mirada avergonzada.- Está bien para mí, así mis padrinos también la conocen. Ellos son mi familia.
- Está bien...- La señora Parker sonrió.- Le avisaré a Tania así le preparamos algo de bienvenida a tu novio.
- No es necesario...- Agitó sus manos.- Con que la acepten está bien.
Para los padres de Ella la noticia de que su hija estaba en una relación fue un tanto sorpresiva y a su vez desalentadora pues aquel chico que había elegido no era el que esperaban, mucho menos el que querían.
Para los Spencer esta noticia también había resultado un tanto desalentadora pero a diferencia de los Parker no lo tomaron con desagrado, ellos estaban convencidos que a la larga sus hijos estarían juntos, incluso alentaron a sus amigos a darle una buena bienvenida al chico.
……..
- Oye... Ella Parker es una chica con suerte.- Candance sonrió.
- ¿De qué hablas?.- Cameron se quedó viéndola.
- ¿Y lo preguntas? Está de novia con Bryan. ¿Te parece poco?.
- Me parece muy bueno para ser verdad.- Bromeó.- Parker es muy aburrida y a la larga él terminará dejándola.
- No seas así...- Frunció el ceño.- No entiendo porque la odias.
- Es algo complicado, créeme…- Se quedó viendo a la nada.- No te gustaría saberlo.
- Si no me lo cuentas no sabré si es cierto.
- Linda.- Besó su mejilla.- Olvídalo.
Cameron se quedó en silencio mientras pensaba para sí mismo ¿Cómo le decía a su novia que conocía bastante bien a Ella Parker porque desde que nacieron han estado tratando de acercarlos? ¿Cómo le decía que el plan de sus padres no era que fueran solamente amigos, sino que los quieren emparejar?
Así es, Cameron conocía a la perfección el plan de sus padres, se lo habían hecho saber hace tiempo y también le habían hecho saber que sin importar que tanto se opusiera ellos tendrían la última palabra. Ella y solo Ella podría ser aquella la cual se convertiría en la señora Spencer.