Capitulo 2

1354 Words
A la mañana siguiente me encontraba recolectando las últimas verduras que faltaba.No me había faltado ningún tomate,en esos día le había consultado por ese extraño incidente a mi marido.Me había afirmado que él no había tomado aquellos frutos,eso me había aparecido aún más curioso:Ya que no podían desaparecer de la nada,¿O sí?. Cuando terminé,ya estaba avanzando a la casa.Me sentía levemente observada, aquello me confundió.Entré a la casa con rapidez, cerrando todas las puertas con llave. Me asomé por la ventana del frente, deslizando un poco la r*****a de la persiana. De nuevo estaba aquel hombre del sombrero y traje de color marrón.Pero esta vez,estaba frente a la casa de mi vecina llamada Camila en su vereda.Lo miré un poco confundida. Decidí confirmar si estaba todo bien cerrado,al igual que las ventanas. Bajé las cortinas,estaba algo asustada. Nuevamente tómo el teléfono y sin parar de mirarlo, llamé.El sujeto no se movía, solo veía en mi dirección. Aquello me pareció verdaderamente extraño,no sabía cuál era sus intenciones y tampoco quería ver averiguar. Sin más preámbulos,había tomado una pistola de mi marido.Ubicada arriba de un ropero.La había puesto en mi cintura,sabía disparar Emilio me enseñó.Por lo cual no era problema. Cuando volví a mirar por el cristal,aquel sujeto ya no estaba.Enseguida habían llegado los oficiales. > Unas extrañas náuseas me dominaron. Fui corriendo al baño más cercano que tenía la casa,lancé todo el desayuno que tenía.Cuando vi mi rostro,después de lavarlo con agua fría en el espejo.Me asusté estaba, completamente blanca con los labios color violeta. Tomé un vaso de agua y me dirijo hacia el comedor más precisamente a mirar por la ventana.Si,no había nada extraño.La policía había llegado,revisó por los alrededores nuevamente sin encontrar una pista de aquel sujeto extraño. Lamentablemente mi marido ya tenía que viajar a una ciudad próxima. Por lo cual me encontraba sola y él se había ido hace 3 días.Pero yo sabía cuidarme,no necesitaba tanto de él. Tenía mi arma,debía estar atenta.Tal vez lo mejor sería irme a la casa de mi madre,pero tenía miedo dejar la casa sola y que aquel hombre pudiera ingresar.Sinceramente no sabía qué hacer,por lo cual marqué al número del hotel donde se hospedaba y me atendio: —Amor, nuevamente estaba aquel misterioso hombre del sombrero. Estaba frente de la casa de Camila aquello me asustó en sobremanera porque observaba a nuestra dirección. —¿Y la policía? —Lo mismo de siempre vigilaron un poco alrededor, no encontraron ninguna pista de aquel hombre.Hay un móvil cerca,aún me siento insegura. También tengo mi arma cerca de mí. —¿Quieres ir cerca de tu mamá? —Nolose. —Tal vez estarías mas tranquila. En el momento que pude cortar,me marché directo a mi habitación.Comencé a colocar ropa en maletas(mía y de mi esposo), sin mirar verdaderamente lo que era.En otro bolso guarde toda la ropa interior mía. Tomé dinero,algunos artefactos de higiene personal y me marché. Miré por encima de mi hombro, ambos lados de la casa con temor profundo. ¿Algo podría pasarme?, pero aquí me encontraba alejándome por medio de mi auto. Luego de un par de minutos había llegado a la casa de mi mamá,me sentía un poco aliviada.El nervio constante de que ese hombre apareciera,desvaneció. Mamá al llegar,me miró confundida porque no le había avisado de mi visita. —¿Pasó algo cariño? —Quise venir aquí,siempre hay un hombre parado frente de mi casa.Lleva puesto un sombrero y un traje color marrón.Ya lo ví en dos ocasiones,mirando mi casa sin tapujos. —¿Y la policía? —Simplemente dieron una vuelta de manzana,un par de vecesNo encontró nada extraño fuera de lugar. Al ingresar a la casa,aún tenía mi mamá intacta mi habitación de soltera.La única diferencia,era que la cama era de dos plazas en vez de una sola.Aquel lugar,poseía un tamaño bastante grande así que estába conforme. Un par de horas más tarde,intento llamar a mi esposo confirmándole donde me encontraba.Él se había relajado en sobremanera,por lo cual yo también. Esa misma tarde,recibí la visita de mi amiga Emma.Quien vivía al lado de mi casa, le había pedido si podía encarecidamente abrir la canilla de mis plantas para que no se me mueran.Ella lo estaba haciendo sin problema en ese día. —Hola amiga,traje unas verduras de tu huerta. —Muchas gracias,amiga. —¿Cómo has estado? —Bien,gracias. —Ahora dime verdad—dijo aquello,cuando mi madre se marchó a hacer las compras. —Masomenos asustada. Estábamos sentadas en el pórtico,el sol nos entibiaba del frío.Una suave brisa nos dejaba bastantes serenas,sobre la mesa blanco habia te y galletas. —Yo no ví a ningún sujeto, sinceramente. —Todos piensan que estoy loca al parecer—dije con pesar. —No,solo digo que no lo ví. —Gracias amiga. —De nada, espero que todo a solicione asi no tengo que visitarte hasta aquí.—mencionó mi amiga, ambas nos reímos. Cuándo se marcha,un silencio sepulcral me recibe en la casa. Mire hacia ambos lados,antes de ingresar.Me deja desconcertada, un golpeteo suave en la puerta me sacó de mis pensamientos.Al acercarme pude ver a mi madre del otro lado. Al abrirle ella me habló: —Hija¿estás bien?—dijo y me tomo de la mano. —Sí,mamá,con Emma tuvimos una agradable tarde. —Eso me reconforta—dijo y se dirigió directo a cocinar. Yo me quedo Servando ambas ventanas de manera sospechosa y con cuidado.Luego de ayudar en el almuerzo,yo me encontraba almorzando junto con mi madre. —¿Cómo te sientes? —Ultimamente,estoy bastante cansada y agotada.En más,en el dia de ayer tuve un repentino mareo junto con náuseas—dije aquello y mi madre me miro con sorpresa. —¿Estarás embarazada? —Deben ser los nervios,mamá. —Yo estaba así de ti. —Nolose ,solo quiero que está extraña pesadilla termine y volver a mi hogar—suspiré con pesar. Mi madre, me veo con tristeza y me tomo de la mano sonriéndome para darme ánimos. Tenido un extraño sueño por cuál, estaba acostada en la cama. Despertarme luego de varias horas yo no era de dormir tanto mi madre aún existían que estaba embarazada aunque yo le negara ese simple hecho. Pensaba que era todo el estrés del momento de aquel hombre misterioso que se aparece nadie podía encontra. —Estuve leyendo,sobre un nuevos test de embarazo. —¿Test de embarazo? —Si escucha lo que leeré: La solución la encontró en los años 30 el genetista Lancelot Hogben, tras comprobar cómo al inyectar a las hembras de rana de garras africana un extracto de pituitaria (donde se genera la LH) procedente de otra rana, esta comenzaba a desovar. Esto le llevó a pensar que quizás podría obtener el mismo resultado que con los roedores, pero sin tener que matar a los animales, ya que las ranas liberan directamente los huevos después de la inyección. 10.000 ranas en peligro crítico de extinción aparecen muertas en Perú Tras comprobar que sus sospechas eran ciertas, en 1937 él y el también genetista Francis Albert Eley Crew viajaron hasta Reino Unido, desde Sudáfrica, con 1500 ranas de garras africanas. La prueba pronto se convirtió en un éxito, por presentar un gran número de ventajas con respecto a los métodos anteriores. Hasta entonces era necesario poner dos inyecciones de orina al día, durante tres días, a un total de cinco roedores, que luego debían ser sacrificados. En el caso de la rana bastaba con una sola inyección, los resultados podían verse en un máximo de veinticuatro horas y, al no ser necesario matar al anfibio, podía reutilizarse, por lo que resultaba mucho más barato. La prueba además era muy precisa, con más de un 90% de eficacia, aunque a veces no diferenciaba correctamente la hCG de la LH, por lo que podía dar positivo por embarazo durante el pico de ovulación. Pronto el test comenzó a realizarse en laboratorios, donde los ginecólogos enviaban muestras de orina de las pacientes que querían conocer su estado. Todo funcionaba perfectamente. —¿Debo ir? —Tienes turno, en una hora cariño.Lleva tu orina, veremos.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD