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La Ceremonia de Quince años
La niebla volvió a hacerse espesa y cuando se abrió ante el esper, éste pudo ver el auditorio donde dos largas filas paralelas de guías y esper esperaban para la ceremonia de Selene. Zack recordaba ese momento. También fue su ceremonia. Podía verse a lo lejos junto a Noah a la edad de 15 años.
La primera prueba de compatibilidad tenía mucha parsimonia y se hacía en el centro de entrenamiento en presencia de los Guías y Esper de más alto rango, los tutores y maestros. Cada meta humano de 15 años, pasaba a una mesa ceremonial con una máquina bellamente decorada con los colores grises o negros dependiendo de la clasificación donde cada joven ponía la mano en un espacio pequeño para que una lanceta desechable los pinchara en el dedo índice y recogiera una gota de su sangre. La pantalla mostraba solo el rango y la palabra positivo o negativo.
El nombre de la luz o el de la luz acoplada no se revelaba. Esto se hacía en la sala de guerra donde el guía era llamado para ser asignado a un esper con el que tuviera la compatibilidad necesaria.
A lo lejos, pudo ver a los dos jóvenes guías avanzar en la fila hasta que el que lloraba anteriormente fue analizado y la pantalla brilló en blanco "G1- Mach Positivo". Su expresión de alivio fue evidente y casi gritó de felicidad, pero su amigo le afirmó el hombro para que se calmara.
- Felicidades. - le dijo con una sonrisa
-También tendrás un compañero Andreas...- le dijo con una gran sonrisa.
- Así será. Nos veremos en el salón común. - le dijo antes de verlo caminar hacia el exterior siguiendo la fila de quienes ya habían hecho la prueba.
El joven contuvo el aliento antes de poner la mano en el dispositivo. Sintió la lanceta y luego alzó la mirada para ver la pantalla, pero su corazón se apretó. "G2- Mach negativo". Todo su mundo se detuvo con esas 8 letras. El salir negativo implicaba que no tenía un compañero con SICOM y debería entrenar con espers que no rechazaran sus estelas. Habían pocos G2 en esta generación por lo que su guiado sería sobre solicitado. Un estremecimiento al recordar las manos y el aliento de guía recorrió su espalda y casi no hizo vomitar en el lugar.
Levantó la cabeza para ver a las autoridades y vio al guía Hill observándolo con una gran sonrisa. Conocía esa expresión. Esa noche lo llamaría a él.
La Habilidad de Zack
Zack caminó abriéndose paso en la bruma y pudo reconocer la oficina del encargado del Centro de entrenamiento. Estaba parcialmente oscuro, con una luz lateral y podía escuchar los jadeos en un sofá cercano.
Por los sonidos y chapoteos de choque de piel con piel hasta ser indecorosos dejaba más que claro que alguien estaba teniendo relaciones sexuales.
Avanzó con cuidado para no ser escuchado cuando escuchó la súplica del joven.
- Dejame ir...- suplicaba, llorando con las manos amarradas en la espalda mientras estaba en cuatro patas con la cabeza apoyada en uno de los brazos del mueble - No le diré a nadie, pero déjame ir.
- ¿Dejarte ir? - le preguntó el guía con los pantalones abajo embistiéndolo con rudeza al tiempo que usaba sus estelas para someterlo, provocándole dolor y dificultades para respirar - Sabes que hago esto por tu bien. Eres un guía que debe estar listo para realizar el toque de guía con eficiencia. Debes tener experiencia para darle placer al esper mientras lo estabilizas.
- El guiado no es para el placer. Es para ayudar al esper. - aclaró el joven.
- Eso es cierto, pero también follar es algo bueno ¿No te sientes bien cuando te follo?
Andreas apretó los dientes para no decir lo que pensaba. No había placer en ser penetrado a la fuerza por un hombre que lo controlaba físicamente con sus habilidades provocándole dolor, como si lo desgarrara. Aunque fuera un G1 y él un G2, el recibir las estelas de otro guía por tanto tiempo provocaba un serio malestar físico al igual que a los esper cuando recibían las estelas de un guía con el que no estaban vinculados.
- ¡Córrete ya y déjame ir! - le gritó.
- Cogerte viendo esa cara de enojo me calienta más, Andreas... Tan furioso y no puedes hacer nada... Puedo tocarte y no podrás quejarte... Podría hacerte sentir bien... - le dijo sujetando el m*****o del más joven, pero Andreas se movió hacia adelante sacándolo de él haciendo que gruñera de dolor ante el movimiento brusco.
- ¡Mantén tu culo quieto, imbécil! - le regañó, soltando su m*****o para masturbar el propio antes de agarrarlo con una mano de las caderas - Yo digo cuando he terminado contigo...
El guía más viejo lo penetró con brusquedad haciéndolo gritar por lo que el hombre le puso la mano sobre la boca.
- ¡Cierra la boca! - le dijo inclinándose hacia él embistiéndolo con rudeza - Gritas como una puta.
- Me vas a desgarrar, maldito. - gruñó el guía - Si me revisan diré que fuiste tú.
- Tonto ¿Crees que te creerán?
- Por supuesto... - dijo burlón recibiendo las embestidas del guía que estaba a punto de correrse gimiendo ruidosamente.
- Cargo y puesto. - dijo el guía hundiéndose profundamente en su interior con un siseo - Si tratas de contar esto sólo tú serás el afectado. Me encargaré de que no puedas salir o trabajar en la comunidad Norm.
- No podrás ocultar lo que haces para siempre. - dijo mordiendo su labio para aguantar el dolor. No le iba a dar el gusto de ver lo mal que se sentía.
- Todo lo que hago es por ustedes, guías o esper sin compañero necesitan estabilizarse y aprender. Aún son muy jóvenes... Su cuerpo aún es muy suave y frágil.
Acarició al joven de manera sugerente en las nalgas y en el costado haciéndolo temblar de asco. Se movió para que el guía aumentara la velocidad.
- Córrete y déjame ir a dormir. - le dijo apretando los dientes casi llegando a las lágrimas por el dolor y la frustración.
El guía gruñó cuando se vino, jadeando sobre el joven como un perro en celo. Dio la última embestida para vaciarse en su interior y salió de él dándole una nalgada.
- Buen chico... - le dijo sentándose en el sofá para recuperar el aliento - Vete a dormir.
Andreas se levantó y se vistió con rapidez para salir del lugar a toda prisa sin ver a Zack oculto en la oscuridad.
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