LEONARDO TORRES
La última vez que vi a Israel Santana fue hace poco más de síes años, no supe más de él desde que se retiró del FBI y de todo lo que tenía que ver con lentes o asesinatos, sé por qué lo hizo, ya no quería lastimarse él ni lastimar a su familia y lo admiro porque a pesar de todo el dolor sabe a amar a su familia.
En cuanto me dieron la lista de los agentes novatos que estarían bajo mi mando sonreí al leer el nombre de Isabella Santana Muller, no podía creer que la pequeña y frágil niña que un día lleve para que Israel decidiera que hacer con ella hoy vendría aquí al FBI, para estar bajo mi mando.
Sé que no está aquí por casualidad, vi sus notas y la opinión de sus profesores y todos están de acuerdo que ya ninguno tiene nada que enseñarle, por supuesto estoy seguro de qu
