Por fin llegaron las vacaciones de verano y el primer año universitario culminó sin ningún problema. Solo queda esperar que mi hermano y Sofi salgan a sus citas y viajes para que yo pueda escabullirme de la casa sin que me noten y pasar tiempo con Michael. O eso creía. — Oh… entonces no vas a estar en tu casa por dos semanas. — No, voy a regresar al orfanato. Lo hago en cada vacación que tengo. — Entiendo… avísame cuando regreses. Voy a extrañarte— digo colgándome de su cuello y atrayéndolo en un abrazo. Estoy en la casa de Michael. Es la primera semana luego de la finalización de clases, y ya va a marcharse. Me siento un poco triste pero entiendo que tiene cosas que hacer. Y no voy a interponerme en su camino. — Solo serán dos semanas princesa… tal vez menos.

