Un bebe en camino

CAPITULO 11

Capitulo 11 "Nueva cosa"

Me la pongo con mucho cuidado de no romperla, cuando me doy cuenta que no me entra el pie. Saco el pie y veo que tiene papel dentro, lo saco y vuelvo a ponerle de nuevo.

-¿Te acuerdas de mí? Soy Jessica la ex novia de Gael, la mamá del pequeño Gael - me dice delante de mi.

Levanto la cabeza para verle mejor la cara. Enseguida recuerdo que la conocí en el cumpleaños de Gael. Llevaba un disfraz de esqueleto, como el que llevaba también Gael. Muevo la cabeza diciendo que si, mientras lo repito, varias veces el mismo movimiento.

-Si, del cumple de Gael - le digo mientras sigo moviendo la cabeza.

Me doy cuenta que me van genial las deportivas. Me quito las deportivas y se las doy a la chica para que me las pongo, para comprarlas. Voy detrás de ella, hacia recepción. Cuando de repente veo salir un niño del almacén de un año aproximadamente que va gateando para la salida. Veo que nadie se da cuenta y lo cojo en brazos.

-Gracias - escucho que dice la ex novia de Gael - Gael no vuelvas hacer eso, es peligroso - escucho que le dice al año.

Lo coge en brazos. Este era el hijo de mi amigo Gael, me quedo pensado durante unos segundos. Le da el niño a su compañera, mientras pone las deportivas en una caja y luego en una bolsa, blanca. Pongo la mano en el bolsillo del pantalón, para sacar la cartera, y los 25 euros que costaba las deportivas. Le doy el dinero, mientras cojo la bolsa con la otra mano.

-Muchas gracias, por todo- dice la dependienta, con su sonrisa en la cara.

Salgo de la tienda con una sonrisa de haber conocido al hijo de Gael, y de tener mis nuevas deportivas. Para mi eso era un paso importante para volver a tener al único amigo que se había dignado hablarme después de 9 meses. Sin yo, dar señales de vida. Voy por Castellón dando un paseo, pensando en que momento seré capaz de hablarle, a Gael.

-Hola Gael, soy Sergio Alex ¿Podríamos quedar? Quiero verte - le pongo en un mensaje de w******p.

Me quedo unos minutos dudando si mandarle el mensaje. Sentado en un banco de un parque donde Fatima " mi madre adoptiva" me llevaba mis primeros meses de vida. Hasta que volvieron a llevarme con mi madre de sangre, y no volví a pisar nunca más ese parque. Hasta hoy. Porque me recordaba a mis padres adoptivos. Me sentía mal por no seguir con ellos.

Después de un rato dándole vueltas a todo eso. Me atrevo a mandarle el mensaje de w******p.

-Si colega, cuando quieras - me llega al segundo de él.

-Ven al parque de las rampas, estoy aquí - le pongo seguidamente.

-En cinco minutos, estoy allí - me pone en el mensaje, y al segundo se desconecta de w******p.

Guardo el móvil en el bolsillo derecho del pantalón. Me pongo a mirar la naturaleza los arboles, las flores, etc. Todo era precioso a mi alrededor. Estoy esperando, mientras miro toda la gente. Cuando me doy cuenta, que no para de mirarme una chica. Me levanto del banco y me acerco a la chica que no paraba de mirarme.

-Hola ¿Me puede decir la hora? - le digo para empezar hablar con ella, y para saber qué hora era.

-Son las 5:00, aunque ya lo sabes - dice la chica tocándose el peló.

Me quedo súper rojo de saber que se había dado cuenta que llevaba el móvil en el bolsillo y que podía saber la hora.

-Llevabas el móvil en el bolsillo, es la peor forma de ligar, te visto - dice riéndose en mi cara.

Doy media vuelta súper enfadado y avergonzado de lo que me ha pasado. Se había quedado mi móvil sin batería y sólo quería saber la hora. Me giro y miro a la chica, directamente a la cara. Decido contarle

las cuarenta a esa chica.

-Mira tengo el móvil sin batería, gracias por ser una maleducada - digo mientras le muestro el móvil que no se encierre.

Vuelvo para el banco donde estaba antes, mientras noto que alguien me coge del hombro izquierdo. Me giro y veo a la chica detrás de mí. Con su pelo castaño, bastante rizado. Me doy cuenta que tiene unos ojos verdes, como la esmeralda. Tiene un cuerpo muy delgado.

-Siento haber sido tan borde -me dice la chica cogiéndome del brazo

-Sueltame, maleducada - digo al ver a Gael, a lo lejos.

Quito su brazo con desprecio y voy caminando hacia él. Noto como me sigue la chica como su necesitará mi perdón. Llegó cerca de Gael, como me mira con cara de extrañado.

-Sabes que te sigue una chica - me dice, mirándome y señalando a la chica.

Me doy la vuelta, sin saber que decirle. Se me queda mirándome.

-Chica, dejame - digo mirandola a los ojos.

Nos quedamos Gael y yo mirándola, vemos cómo se agacha y se sienta en el suelo. Los dos nos quedamos asombrados sin saber que decir y sin saber que le pasa.