Ese día el hospital estaba más caótico que nunca, habían llegado insumos y Gianni andaba en todo lo que tiene que ver con la parte administrativa, todos andaban a manos llenas, no había tiempo para lamentar, para las quejas.
A media tarde había un poco más de espacio y estaba Gianni descansando en la oficina cuando escuchó en una rueda de prensa que ya empezaría a circular de a poco, los comercios comenzarían a atender al público también.
Parecía que el mundo estaba alcanzando un lugar razonable en el espacio que le correspondía, las cosas irían de manera lenta pero progresiva alcanzando su propio ritmo. Sintió alegría y decidió aprovechar el poco espacio de tiempo que tenía para informar a todos sobre esta buena noticia.
Hubo euforia a nivel general, lágrimas de alegría rodaron por alg
