Ella levantó la mano para decirle adiós, pero la limusina ya comenzó a alejarse antes de que pudiera terminar la acción. Se quedó allí mirando el coche que se iba y la vocecita volvió a sonar, “¿puedes vivir así, Harmony? Todavía no es tarde para volverse, sabes que la felicidad no depende solamente de que una persona ame” pero ella negó con la cabeza y agitó la voz, es solo cuestión de tiempo y ella lo conquistaría, pensó y entró en su apartamento. Eddy era muy esquivo para el ojo público, apenas asistía a entrevistas. Invitarlo a una fiesta tampoco fue fácil e incluso después de intentarlo y lograrse, hay que preocuparse de que aparezca, lo que a menudo no hace y esa es la razón por la que ella no lo ve mucho en las reuniones de la sociedad. Él es una especie de multimillonario fantasm

