Respiró profundamente y asintió varias veces, intentando distraerse y volver a concentrarse. Era el día de su gran éxito. Bueno, más bien de dos grandes éxitos. Aunque le acepto, eso no quiere decir que le dará alguna prueba de amor, eso jamás, si no iba al altar de ningún modo ese hombre la tocaría, peor con la fama que se carga.
¿Qué eran los meses en la vida de una diseñadora que entraba en apogeo? La verdad nada. Los días de ella se basaban en trabajo de la casa Grant y costura en la casa de la señora Madelin. La última, había contratado a nueve muchachas solamente para que la ayudaran a coser y confeccionar. Se había despojado de un salón para que la joven ocupara para costurar los pedidos.
Ella iba a las enormes tiendas en la ciudad y seleccionaba las telas, los diseños, tomaba las
