Alpha Garrett: Un bebé para la Navidad

Capítulo 4

Harmony

Ella entró a trabajar el lunes por la mañana. Había recibido un solo mensaje de texto de Damien el domingo por la mañana. "Lo siento, cariño, me han llamado para una reunión de negocios por parte de mi padre, en la finca. Te veré el lunes en la oficina."

Ella había mirado ese mensaje con furia, así que parecía que él esperaba que estuviera en la oscuridad. Le había respondido "Está bien. ¿Disfrutaste tu cumpleaños?", jugando la carta de 'no sé nada', ya que eso era lo que él estaba haciendo.

"Sí." Fue su única respuesta. Nada después de eso y ella tampoco había enviado nada. Era probable que realmente creyera que ella no sabía nada.

Caminó por el pasillo del cuarto piso hasta su escritorio y dejó su bolso sobre él. Podía ver que Chloe ya estaba allí sentada en su escritorio, y solo quería acercarse y abofetear a esa mujer. Pero no lo hizo. Faltaban dos semanas y media para Navidad, y se suponía que la temporada debía ser alegre. Ella había estado esperando una propuesta este año para Navidad también, con la forma en que Damien había hablado sobre comprometerse la semana pasada.

Harmony apartó la mirada de la chica, mientras el dolor la tocaba, ahora sabiendo que la chica allí había estado teniendo una relación con su novio, y probablemente todavía estaba durmiendo con Damien. Podría haber pasado todo el fin de semana en su casa, ya que él no la había visto; le dijo que estaba en la finca de su padre. Así que no había ido allí, ni siquiera pensaría en hacerlo porque él no estaría allí.

—Hola Harmony, ¿a dónde fuiste el viernes por la noche? Simplemente, desapareciste, nadie pudo encontrarte. —Chloe se acercó y se apoyó en su escritorio. Llevaba su atuendo de oficina habitual, una falda lápiz ajustada y una blusa de mangas cortas, aunque el bolsillo tenía un muñeco de nieve sonriente, les animaban a llevar algo navideño a la oficina.

Harmony incluso podía oír la sonrisa en la voz de la mujer, todavía hablaba como si siguieran siendo amigas, como si no hubiera pasado nada en absoluto. No estaba nerviosa ni avergonzada por lo que había pasado, claramente la aventura había estado ocurriendo durante un tiempo, así que le resultaba fácil actuar como si fueran amigas.

Harmony se sentó mientras decía:

—No sé, no lo recuerdo.

Oyó reír a Chloe:

—Tienes que dejar de beber tanto que te desmayas.

—Sí, no volveré a beber más. He terminado con no saber qué está pasando a mi alrededor. —Miró directamente a Chloe—. Ni siquiera sé cómo llegué a casa —Sacudió la cabeza, pero seguía observando a la mujer.

Ahora fruncía ligeramente el ceño.

—Todavía puedes beber, sabes, divertirte un poco.

—No, ya no —le dijo Harmony—. Creo que beber tanto con mis antibióticos lo empeoró.

—Bueno, mejor regreso al trabajo —declaró Chloe y se alejó, aunque parecía un poco molesta. Harmony observó cómo la chica le enviaba un mensaje a alguien en su teléfono mientras se sentaba en su escritorio. Vio la expresión de molestia y luego el furioso tecleo durante varios minutos. Antes de que golpeara el teléfono sobre su escritorio.

Ella la miró directamente con una expresión dura en el rostro, y luego intentó sonreír.

—Oh, mi papá es un verdadero dolor en el t*****o, ya sabes cómo es... Oh, lo siento, tú no lo sabes, ¿verdad?

Harmony no lo sabía. Se había llevado bien con su papá, con ambos padres. De hecho, también había sido una niña tranquila y bien educada mientras crecía. Y así pensó que era más un ataque hacia ella que una disculpa real. Harmony miró hacia arriba 15 minutos después, al sonido de su nombre, y vio a Damien venir en su dirección. Estaba sonriendo, como si no hubiera hecho nada malo, sonrió aún más al encontrarse con sus ojos mientras caminaba hacia ella.

Claramente, no pensaba que ella supiera. Movió sus ojos hacia Chloe y encontró que la chica la miraba con desprecio. Pero luego desapareció, y ella simplemente sonrió en un instante. Oh sí, todavía estaban en eso, pensó que podrían haber estado juntos todo el fin de semana, probablemente tenía razón, se dio cuenta ahora. La otra mujer en su relación no le gustaba que él estuviera allí para ver a su verdadera novia y sonriera.

—Harmony, te extrañé, cariño. ¿A dónde fuiste el viernes? Simplemente, desapareciste, y no pude encontrarte en ningún lado. —Se sentó en el borde de su escritorio y se inclinó para besarla.

Se apartó de él, no estaba dispuesta a dejar que ese hombre le plantara esos labios traicioneros, no cuando sabía que él había estado en otro lugar, y probablemente todo el fin de semana también.

Lo vio parpadear sorprendido.

—¿Harmony? —le preguntó por su repentina retirada. No era en absoluto normal, ella era bastante cariñosa en un día normal.

—No pudiste encontrarme porque estabas ocupado teniendo sexo con Chloe en una sala VIP.

—¿Qué? No lo hice. —Él la miró con desprecio.

—Sí, lo hiciste, yo misma te vi. —Ella afirmó, y lo había visto, puede que no lo recordara, pero tenía un buen video claro de haberlo visto.

—Cariño, creo que estabas soñando, ¿por qué haría eso? —bromeó Damien.

—Me gustaría saber la respuesta a eso también. También me gustaría saber cuánto tiempo ha estado sucediendo —Ella lo miró con desdén. No podía creer que aún intentara negarlo; incluso cuando ella había afirmado que lo había visto ella misma.

—Estabas borracha, Harmony. Tan borracha que apenas podías caminar tecta —comentó él.

—No tan borracha, no recuerdo que tú y Chloe estuvieran así —ella respondió con desdén.

—Eso es una estupidez —Él respondió bruscamente.

—¿Estupidez? —Ella le respondió cuestionando, su ira a la vista para que él la viera y escuchara, ya no podía contenerla. Se levantó y sacó su teléfono de su bolso, hizo clic en el mensaje y le mostró ese video, lo giró para que él lo viera, asegurándose de que el volumen estuviera encendido—. ¿Estupidez, de verdad? Eres un idiota infiel, Damien.

—¡Oh, lo soy! —se levantó de su escritorio y la miró con desprecio—. Te fuiste y te acostaste con algún tipo al azar, después de que te alejaras. Te convertiste en una cualquiera en menos de un minuto.

Su mano impactó su cara sin pensarlo mucho, una fuerte bofetada resonante, que hizo girar su rostro hacia un lado y lo hizo retroceder. Ella no era nada de eso, y él lo sabía, lo miró fijamente.

—Incluso si lo hiciera —dijo con rabia, no era una cualquiera.

Aunque no recordaba haber hecho eso, se sintió así la mañana siguiente, su cuerpo había dolido como si hubiera tenido sexo y mucho sexo.

—Terminamos, en el momento en que te vi follándola —dijo con rabia, mientras señalaba a Chloe—. Tú eres el que engañó, no yo —le gritó.

—¿Qué demonios está pasando? —les gritaron a ambos, y vio a Spencer salir de su oficina. Miró de ella a Damien y de vuelta—. Puedo escuchar el escándalo desde mi oficina.

—Terminamos, Damien —le dijo a Damien—. Espero que tú y Chloe sean felices juntos.

—Lo seremos —él le respondió—. Ella es mejor en la cama...

Su mano conectó con su cara una vez más, interrumpiendo su frase, y vio cómo la ira surgía en él. Así que eso era, la razón por la cual. Eso le dolió mucho viniendo de él, considerando que había sido su primero y único, y había aprendido qué hacer, cómo complacerlo y las cosas que le gustaban. Y ahora él le estaba diciendo que era mala en la cama.

Sentía las lágrimas acumulándose en sus ojos, incluso mientras su jefe le agarraba el brazo y le decía:

—Toma tu bolso, Harmony.

Ella lo agarró y fue llevada desde el cuarto piso directamente al departamento de recursos humanos, y empujada a una silla.

—Agresión en el lugar de trabajo —dijo de manera plana al hombre de recursos humanos—. Ella le dio una bofetada a Damien Blackwell en la cara.

Luego la miró con un ceño desaprobador en su rostro, y se fue de la oficina.

Vio a Joshua mirarla fijamente, y suspiró.

—¿Le pegaste a Damien?

—Sí, dos veces —Aadmitió—. Él me está engañando con Chloe. Acabo de enterarme.

Vio a ese hombre mirarla durante un largo momento de silencio, y luego dijo:

—Es un delito que puede llevar a despido, Harmony, y siendo que el padre de Damien es el dueño.

—No me importa, renunciaré antes de que me despidas —murmuró, no quería trabajar aquí y tener que verlos de todas formas, y sabía que lo haría.

Chloe y Damien probablemente se lo echarían en cara. Probablemente, también escucharía cuánto tiempo había estado sucediendo. No tenía idea de quién más aquí en la oficina lo sabía, y no se había molestado en decírselo a ella, y tampoco realmente quería.

—Él podría presentar una demanda —suspiró Joshua—. Su padre podría querer eso, una vez que se entere de lo que pasó.

—No me importa, le mostraré a su padre qué tipo de imbécil es su hijo, un cerdo infiel y traidor.

Se levantó y se quitó la placa, entregándole su identificación de la empresa.

—Dile a su padre que tengo a su hijo teniendo sexo con Chloe, todo está grabado. Con fecha y hora, en la fiesta de Navidad de la oficina el viernes pasado, si quiere presentar cargos por abofetear a mi novio por engañarme. Lo voy a publicar en internet, arruinaré la imagen de Damien. Si él tiene la intención de arruinar la mía.

Y salió de la oficina sin preocuparse por las ramificaciones.

Se dirigió desde Recursos Humanos a su escritorio y empacó sus cosas. Podía sentir a Chloe mirándola, no iba a quedarme aquí trabajando para esta empresa. No se quedaría aquí y los vería juntos, todos felices y saliéndose con la suya sin consecuencias, por quien él era, por quien era su padre. Dos de sus amigos ya no eran amigos de verdad.

Esperaba que Chloe supiera en qué se estaba metiendo, ella es la amante, y era probable que en algún momento más adelante, Damien también le fuera a engañar. Aunque Harmony dudaba seriamente que Chloe hubiera pensado en eso; una vez un traidor, siempre un traidor.

Golpeó la puerta de su jefe y la abrió. Él frunció el ceño al verla.

—Acabo de renunciar —dijo—. Mejor llama a alguien de la bolsa de trabajo —Y lo vio parpadear, había sido su secretaria durante poco más de cuatro años, era muy buena en su trabajo—. Me gustaría una referencia, por favor, sobre mis capacidades para el puesto que ocupé mientras estuve aquí. Puedes enviármela por correo electrónico —dijo y cerró la puerta.

Se dio la vuelta y se alejó por el pasillo sin siquiera echar un vistazo a su antigua amiga, aunque incluso ahora, al recordarlo, se preguntaba sobre su amistad. Chloe ya había estado trabajando aquí, también conocía a Damien, habían sido amigos mucho antes de que ella y él comenzaran a salir, y ahora se preguntaba si él y Chloe siempre habían estado juntos de alguna manera.