Leonardo Greco. Balances. No me había divertido así en años… Llevo una botella de tequila, una de vodka, no sé cuántas margaritas y uno que otro trago de dudosa procedencia junto con Camila, estamos en una de las discotecas que forman parte de mi imperio. Como dueño, tengo acceso a todos y cada uno de los servicios de este lugar, solo lo mejor para mí, y Camila se ha estado aprovechando de eso, aunque no me quejo, lo estoy disfrutando. Hemos bebido, bailado, cantado, reído y hasta nos besamos un par de veces, es un sitio discreto por lo que no debe preocuparme de nada, pasamos por todos los pisos, hicimos desastres en todos y cuando llegamos al último todo se multiplico por diez. Estamos en la sala privada, el edificio consta de cinco pisos, cada uno con uno con algo peculiar, el últ

