Desde aquella vez con Emily en esa fiesta exclusiva dónde la encontró con una chica y luego la llevó a un cuarto privado, bajo tácticas de seducción, no volvieron a repetir una sesión de spanking.
Aún así cuándo ella le fue a pedir ayuda, a pesar de que le había disparado a su mejor amigo Philip (ex novio de Emily para ese momento, lo cual motivó el disparo de hecho: ese rompimiento) y la mujer actual de éste, la ayudó a conseguir trabajo y un lugar dónde vivir. Prácticamente le había facilitado la vida.
Así que habían llegado a una especie de tregua y de alguna forma extraña, se habían hecho amigos. Aunque al principio se veían con cierto recelo.
Él la había llevado a ese cuarto en esa fiesta para castigarla de veras (pues estaba molesto por cómo ella había manipulado a su amigo para obligarlo a un compromiso) , aunque había hecho que se viniera...para ese entonces el compromiso de ella y Philip era insostenible y éste ya estaba con Chiara, su actual mujer y madre de su hijo.
Emily ni siquiera quería estar con Philip, lo hacía obligada por su familia, pues a ella le gustaban las mujeres...luego de todo el escándalo, la familia se desentendió de ella por supuesto ...y en el fondo a William le dió pena. Él sabía lo que era tener una madre nefasta como la de ella.
Al principio le dió un trabajo como camarera en "La Mazmorra", el club nocturno y selecto del cuál era en parte socio fundador y en parte dueño. Pero Emily era buena con los clientes. Sabía como lidiar con la gente de cierto nivel, así que poco a poco se había transformado en la persona en la que los Amos Fundadores (otros socios y dueños, como el propio William) podían confiar dentro de allí.
Era sus ojos y oídos, y de alguna forma se convirtió en una especie de relacionista pública.
Chiara Ferrante Seymour, la mujer de su mejor amigo Philip Seymour, no podía entender que él confiara en ella. También se había hecho muy amigo de Chiara.
— No puedo entender tu relación con ella ...y con total honestidad, no se si quiero saber...pero tú eres grande. No necesitas que te diga lo que tienes que hacer — fue todo lo que le dijo en su estilo tan crudo y sincero como siempre.
Chiara no era idiota. Sabía que hubo algo entre él y la rubia aunque no sabía exactamente qué.
Esa noche había creado alguna especie de lazo sí, pero nada de lo que se imaginaba Chiara.
Él sintió pena por Emily. Él había tenido una madre como la de ella, quizá de alguna manera sentía una especie de identificación con la joven.
En ese momento estaban haciendo una renovación en La Mazmorra y él estaba allí. Demasiado temprano, para lo que era un día habitual en ese sitio.
Ella estaba vestida con un pantalón de vestir n***o y una camisa blanca. Con unos stilettos y una coleta. Maquillaje sencillo.
Desde que su familia desapareció de su vida, Emily estaba mucho más relajada, parecía otra persona. Incluso había intentado disculparse con Philip y Chiara pero ésta última dijo que si la veía cerca de su casa ella misma le dispararía.
— Hola querida — la saludó William con una media sonrisa. Se sentía tenso, ese día la bolsa de Wall Street había caído y tuvo un día difícil en la oficina.
— Hola Will , te ves tenso...¿ Quieres que llame a una de las chicas para ver si están disponibles para la noche ? — las chicas eran un grupo de mujeres, spankees ocasionales: ejecutivas, mujeres de negocios exitosas, esposas de la alta sociedad etc. Todas mujeres con dinero y poder que gozaban bajo su mano y ocasionalmente eran sus compañeras de "juego".
— Si, por favor. Hazlo cariño...¿ estuviste pensando en la renovación, por eso me llamaste ? — iban a transformar La Mazmorra, le querían dar un nuevo aire. Algo más lujoso. Más elitista.
— Si ... verás, he estado sacando unas fotos. Todo consensual — aclaró. Y le mostró en su teléfono, las fotos. Eran buenas, de cuerpos, en blanco y n***o.
— Son muy buenas ...— admitió William — ¿ Qué es lo que quieres ?
— Me gustaría usarlas para decorar quizá algún muro, no sé...
Él se acercó a ella. Le acarició la mejilla. A diferencia de otro momento de su vida, Emily no rechazó el contacto. William se había transformado en alguien muy cercano.
— Haz lo que quieras cariño, confío en ti.
— Gracias William — dijo ella con ojos brillantes.
Él solo encogió los hombros.
El bajó la mano pero ella la atajó.
— En serio William. Gracias. Por todo.
— Está bien, no es nada.
— Pues para mí es mucho ...
— ¿ Cómo fue que tú y yo terminamos siendo cercanos ? — le preguntó él con un toque de sarcasmo y ella se sonrojó. Pues siempre se habían detestado mutuamente en el pasado.
— Bueno, llamo a las chicas entonces — ella evadió el tema, como siempre, lo cual sacó de William una carcajada.
— No seas así, ¿ No puedes simplemente aceptar un halago ? — lo reprendió a su vez ella.
"Maldito niño, ahora vas a aprender lo que es bueno..."
Emily no sabía realmente porqué él la había ayudado.
— ¿ Acaso tú puedes ? — le retrucó William.
Ella lo miró por un instante como si no entendiera del todo
— No me hagas caso linda, te veo luego — le dijo besando su mejilla y saliendo de allí.
Emily no tenía idea de que estaban igual de jodidos y él prefería que se mantuviera así.