¡No! ¡Por favor, no! —suplicó—. ¡No puedes hacer eso dentro de mí porque podría quedarme embarazada! ¡No tomo la píldora! Además, no quiero que me vean. Si tienes que cogerme delante de ellos, ¡hazlo sin que me vean la cara! ¿Por favor?
"¡No seas tímida, nena!", dije. "Ya han visto cada centímetro de ese cuerpo tan sexy. Quiero que vean tu cara roja cuando termine de follarte y te corra por todas partes. ¡Yo también quiero verte la cara cuando lo haga!"
Ella no se movió, así que la tomé por las muñecas y aparté sus brazos de su cara y su pecho.
—¡Por favor, cariño! ¡No me dejes ver cómo me follan! ¡No me gusta! —suplicó.
"¡Ya te han visto follando toda la noche, nena! ¡Quiero que te vuelvan a ver mientras sabes que están ahí fuera mirando! Quiero que vean tu cara roja, tu vergüenza y t
