5 Jeremy había vuelto. Leilani no quería pensar sobre el regreso de Jeremy a la isla. Estaba cansada y sudada. Lanzó a un lado la sábana húmeda y salió de la cama. Hacía un calor infernal en la casa. No podía dormir y cada vez que cerraba los ojos lo único que podía ver era a Jeremy. Atravesó lentamente la cocina hasta llegar a la puerta trasera. La abrió y se apoyó contra el marco mirando al jardín. Una suave brisa le golpeó su sudoroso rostro. «¿Por qué has tenido que volver?» ¿Y por qué no podía sacárselo de la cabeza? Tenía cosas más importantes en las que pensar, como la forma de hacer que el aire acondicionado funcionara. Tenía que trabajar un turno extra el fin de semana para conseguir el dinero suficiente para arreglarlo. O tal vez Kai podría hacer magia con sus manos y arre

