Zeus

Capítulo 10 parte 4

— Estabas con tu cabeza en tu culo ¿crees que no me di cuenta que pasa algo? No soy tan tonto como Adrián, yo si uso mi cabeza y puedo ver que hay algo raro entre tú y la humana. Te recomiendo que lo resuelvas porque esto no puede afectar tu rendimiento. Sé que no hace falta decirlo, pero para todos eres como nuestro líder, teniendo en cuenta que tienes al jodido Zeus dentro tuyo deberías actuar más como un líder, aunque claro, tu dios no es tan centrado que digamos y menea la cola a todo lo que se mueve. No me importa cómo lo arreglen, no me importa lo que hagan, no me importa si se caen bien o incluso si quieren matarse, lo que me importa es hacer la misión correctamente y eso no se va a poder si tengo a mi líder y a la humana divina teniendo una guerra fría entre ambos. Arreglen su mierda. Adiós.

Aún mantenía el móvil en mi oreja, escuchaba el pitido familiar cuando una línea se corta, mi mirada estaba puesta en mi mesa de noche con una laptop y un móvil encima, pero realmente no estaba viendo esos objetos. Arreglen su mierda. Eso dijo, Damián era una persona desinteresada de todos y por todo, pero la historia cambiaba si se trataba de la misión que le encomendaron los dioses, no había un guerrero más centrado en cumplirla que Damián, nada se interponía entre su deber y él.

Zeus bufó “Con razón Hades lo eligió como contenedor, sus personalidades podridas se parecen” eso confirmó mi teoría sobre su dios diciéndole qué dios tenía en mi interior. Al parecer los dioses sabían más cosas de las que nosotros mismos éramos conscientes.

Me habría sorprendido si no fuera porque las palabras de Damián se quedaron flotando en mi mente, tenía razón al decir que no estaba actuando normal, yo lo sentía y lo estaba demostrando “esto no puede seguir así, necesito volver al que era antes”

Durante todo el baño que tomé pensé en las posibles salidas, esa mujer solo nublaba mi mente, mi cuerpo la deseaba, quería consumirla entera, pero era un alma divina, no podía corromperla, además que, con ella presente, mi mente no pensaba correctamente, no era yo. Tal vez si me alejaba unos días y me centraba en el trabajo podría ver más claramente la situación.