(Pv Daniel)
—Ya llegamos, iré a comprar los boletos.
Cuando llegamos a la estación, me quedé sorprendido al ver el enorme tren a vapor que estaba en el andén mientras la gente comenzaba a entrar en los vagones.
La enorme locomotora negra con el nombre “Expreso de la Estrella” brillando en letras doradas me emocionó más de lo que esperaba mientras se podía ver el humo blanco que expulsaba desde la chimenea, había un vagón con lo que parecía ser carbón para alimentar el fuego como en las películas de vaqueros, el siguiente parecía ser la cocina por lo que podía ver desde las ventanas, seguido de lo que parecía un vagón comedor, después habían más vagones que parecían divididos por tres secciones de acuerdo a los colores que tenían, los primeros tres estaban pintados de color rojo oscuro, los otros tres eran de color verde y los últimos tres eran de color azul.
—Increíble, mira Sora es un tren ¿No es hermoso? —pregunté cargando a mi hijo.
—Que bonito—dijo emocionado viendo el humo saliendo de la chimenea—. ¿Tene fego?
—Si, encienden fuego y así se mueve por esos rieles ¿No es genial? —dije muy contento—vamos a ir adentro y veremos muuuuchas cosas guay.
—¡Quero verlo! ¡Quero verlo! —exclamó Sora emocionado.
—Aquí tienen—dijo Atem cuando llegó dándonos dos boletos que decían “Segunda clase” con una franja verde junto con el número de cabina donde estaríamos junto con el horario de comida en el vagón comedor y el horario de partida.
—Gracias Atem—dije muy contento—, ¿Vamos subiendo?
—Si, será lo mejor—dijo antes de acomodarse la mochila que había traído.
Nos acercamos al tren, pero de pronto Atem se alejó de la puerta de Segunda Clase.
—¿A dónde vas? —pregunté extrañado.
—Las Bestias y los Híbridos sólo podemos ir en Tercera Clase—me explicó como si fuera lo más normal del mundo.
—¿Por qué? —pregunté enojado—, entonces iré contigo.
—Nada de eso, sube al vagón que Risha ya debe estar ahí, mejor que se quede contigo a que cause algún problema—dijo antes de irse y subir a los vagones de Tercera Clase.
Sentí como si mi estómago se hundiera hasta el suelo ¿Entonces esa “paz” que dicen tener es simplemente una especie de racismo silencioso? Me recordó cuando mi esposa era joven y fue rechazada por la forma en que vestía o las mentiras de su hermana, pero nunca fuimos rechazados por nuestro color de piel o nuestra sangre y verme en esta situación me hizo sentir miserable.
Sin muchas ganas subí al vagón de segunda clase y entregué nuestros boletos, el encargado me indicó cual era mi cabina así que llevé a Sora a su asiento, él estaba muy emocionado y cuando entramos vi que ya estaba ocupado por una mujer de cabello n***o y lentes oscuros usando un traje azul oscuro estilo militar.
—Buenos días—saludé nervioso, la cabina era pequeña, con espacio para cuatro personas, así que supuse que seríamos compañeros de viaje.
La chica levantó la vista del libro que tenía en sus manos.
—Buenos días, pasen por favor, pueden tomar los asientos de la ventana—dijo en un tono amable, parecía una chica noble así que traté de ser educado aunque por dentro estaba nervioso por compartir espacio con una mujer.
—Gra-gracias—dije tratando de respirar profundo y calmarme, por ahora no había tenido problemas con las mujeres, excepto la sacerdotisa, así que esperaba que pudiera seguir así.
Sora corrió a la ventana muy contento y yo subí nuestras cosas al portaequipaje antes de ponerme en el asiento frente a Sora que miraba todo desde la ventana, la chica volvió a leer y no hizo ningún otro ruido, luego de unos minutos llegó un anciano de unos setenta u ochenta años sentándose junto a nosotros luego de saludar.
—Mmmm ¿Debería buscar a Risha? —pensé antes de que se escuchara la bocina del tren y comenzara a moverse poco a poco—, lástima que no tengamos celulares.
—¡Papá se mueve! —exclamó Sora muy contento.
—Así es cariño, y nos va a llevar de viaje—sonreí feliz de que Sora pudiera conocer todo esto, sin duda era mucho mejor que el metro de nuestro mundo.
—Jojo qué niño tan adorable—decía el anciano—, seguro que se la pasarán muy bien en su primer paseo con sus padres.
¿Mn? Miré extrañado al anciano y de pronto vi que en su maleta se asomaba el pico de un cuervo que rápidamente se escondió al sentir mi mirada.
—¿Risha? —pregunté en un susurro, a lo que el anciano sonrió antes de llevarse el dedo índice a los labios.
Decidí no decir nada más y sólo me senté a mirar el paisaje, todavía me sentía mal por no tener a Atem con nosotros, pero no quería arruinar el primer viaje de mi hijo...la próxima vez me aseguraré de que vayamos los tres en el mismo lugar.
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(Pv Atem)
Miraba por la ventana ignorando el ruido del vagón, los vagones de Tercera Clase eran filas de dos sillones donde apenas cabía una persona de talla promedio distribuidas a lo largo del vagón donde mucha gente se quedaba de pie si no alcanzaban asientos a tiempo, el problema es que muchas de esas personas eran híbridos o bestias y algunos eran de por sí más altos o anchos que una persona normal, por lo que aunque el tren era de mucha utilidad, era realmente incómodo moverse libremente o si quiera quedarse sentado.
Algunos híbridos que podían verse físicamente como humanos podían ir en Segunda Clase y aquellos con rango A o S podían ir en Primera Clase, pero como mis orejas solían salir cuando me sentía nervioso o molesto no quería correr el riesgo y hacer un escándalo.
Admito que me sentí mal cuando Daniel me miró triste por no ir con ellos, realmente estaba feliz que me viera como su igual, pero no quería que su primer viaje en tren fuera en un espacio apretado donde podías resbalarte del asiento si te ponías medianamente cómodo y seguramente Daniel estaría temblando de miedo cuando una chica lo rozara sin querer.
—Primero debo ayudarle con su miedo a las mujeres, por suerte ya no se pone tan nervioso pero todavía le falta mucho para tener una conversación con una extraña—pensé recordando la horrible vida que tuvo en su mundo.
Este lugar también era bastante sexista pero jamás habría imaginado a una mujer tan enferma como para encerrar a un hombre y a su hijo luego de matar a su esposa.
Miré las montañas con tristeza pensando que tal vez estaba forzando la relación con Daniel, digo, él me tiene confianza pero ¿Será por algún síndrome de Estocolmo? ¿Se puede enamorar una víctima de su rescatador? Ciertamente no somos una pareja y tener sexo no nos convierte en una, pero no quiero que de pronto diga que le gusto por ser el único que lo trata bien.
Además no me ha dicho que es bisexual, sólo está conmigo porque se siente seguro por ser hombre.
—Dioses, tengo un lío enorme en la cabeza—pensé con frustración.
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(Pv Elena)
Cuando salí del Palacio seguí al héroe hasta la estación de trenes usando un hechizo de camuflaje, hacía mucho tiempo que no iba a una misión de investigación así que estaba un poco ansiosa, pero tenía que concentrarme, el destino de mi esposo dependía de lo que descubriera en este viaje.
Me puse en la fila justo detrás del chico gato y escuché el número de la cabina de los boletos de Segunda Clase y cuando se alejó pedí el mismo número, al principio el chico de los boletos me dijo que los asientos son al azar a menos que sea un grupo familiar, así que le pagué extra para que me diera el boleto, luego subí rápidamente para que no me vieran entrar, metí mi maleta en el portaequipaje y saqué un libro para parecer que estaba concentrada en otra cosa, poco después el héroe entró con un niño pequeño, ambos entraron y se sentaron junto a la ventana.
—Buen día, con permiso—dijo un anciano entrando torpemente a la cabina con nosotros.
En eso, noté que el anciano tenía un cuervo en su bolso y me pareció escuchar el nombre de Risha, así que concluí que debía ser uno de los trucos de la bruja.
Una vez que comenzó el viaje, el niño miraba todo con emoción ¿Nunca había estado en un tren? tomé nota de eso y también noté que el héroe actuaba como su hijo por un momento antes de perderse en sus pensamientos, en ningún momento fue arrogante diciendo que era el nuevo héroe ni nada parecido, por lo que debía ser muy tranquilo.
Luego de un rato, fingí levantarme para ir al comedor, dejé mi libro entre mis cosas con un hechizo de escucha, aunque no estaba segura si Risha lo detectaría, esa mujer era un misterio absoluto.
Fui primero al baño para ver si el chico salía o si iría directamente al comedor, pero no parecía querer moverse.
Cerré con seguro la puerta del baño y saqué un pequeño espejo de mi bolsillo.
—Hermes ¿Estás ocupado? —dije mirando el espejo y en unos instantes el rostro de mi novio apareció.
—Hola cariño ¿Cómo va todo? —me preguntó en tono bajo, por lo que debía estar en un lugar público.
—Todo bien, el héroe efectivamente tiene un hijo de unos dos o tres años, no es arrogante y la bruja Risha está en su grupo o al menos está con ellos en este viaje.
—Entiendo, nosotros también investigamos, vive en la posada de Ur y por alguna razón le tiene miedo a las mujeres.
—Si, noté que se puso tenso cuando me vio, seguiré investigando.
Corté la comunicación y regresé a la cabina, me acerqué con cuidado y saqué el espejo fingiendo que me arreglaba, pero en realidad estaba viendo lo que ocurría en la cabina, el anciano ahora era un chico de cabello blanco que acariciaba al cuervo que dormía en su regazo, el héroe cargaba a su hijo que se había dormido y parecían conversar tranquilamente.
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(Pv Daniel)
—...Si, hay mucha injusticia, pero al menos las bestias pueden usar el tren, por lo que no se quejan mucho—me dijo Risha luego de que le expresara mi enojo—, tranquilo, llegaremos en unos minutos así que no será tan molesto para Atem.
No estaba del todo convencido pero no tenía más remedio que aceptar la realidad.
—Sabía que Atem no podía ir a la segunda zona, pero no pensé que habría tanta discriminación—me quejé.
—Bueno, si sube su rango podría ir en primera clase, ahí sólo pueden subir los ricos o los de rango A— me contó—, pero tendrás que ir tú solo a la Zona Media, como héroe podrías incluso llegar a la Zona Alta así que puedes conseguir misiones más raras.
—¿En serio? —pregunté esperanzado.
—Si, los héroes pueden cambiar el curso de este mundo, pero claro si subes y fracasas en una misión importante la Iglesia te menosprecia y la gente comienza a rechazarte—explicó rascándose el cabello corto ahora que tenía el aspecto de un chico—, pero claro tú en primer lugar no juraste lealtad al Rey ni a la Iglesia, así que no pueden rechazarte si nunca tuviste relaciones con ellos.
—¿Eh? ¿Tenía que hacer eso? —pregunté sorprendido.
—En teoría sí, pero ya se jooo…ya no pueden decirte nada—dijo rápidamente antes de ver que Sora estaba despertando y evitó decir malas palabras frente a él—, así que cuando regreses ve a la Zona Media y toma dos o tres misiones de rango A, si las cumplen en un tiempo determinado obtendrán mayor prestigio y como eres curandero el peligro será menor, iré contigo.
—Muchas gracias, Risha—dije emocionado.
—Papá, quero hacer pipí—me dijo Sora de pronto.
—Oh, vamos al baño entonces—dije y rápidamente lo cargué para irnos.
Salí hacia el pasillo y pasé al baño para bajarle los pantalones a Sora y ayudarle.
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(Pv Elena)
¡Mierda!
No tenía sitio dónde esconderme así que rápidamente me trepé al techo del vagón justo a tiempo de que el héroe pasara.
Bajé rápidamente pero no sabía cómo entrar sin levantar sospechas, así que me dirigí al siguiente vagón.
—Conque una misión para subir de rango—pensé recordando la conversación.
Luego de un rato asomé la cabeza y vi que el baño estaba desocupado, así que debieron regresar a la cabina, esperé un poco y vi que Risha volvía a verse como un anciano así que entré como si nada mientras anunciaban que llegaríamos a la siguiente estación.
—Ven Sora, vamos al comedor para probar la comida—dijo el héroe y el pequeño tomó su mano antes de salir antes de que el tren se detuviera y tuvieran que lidiar con la multitud.
Tomé mi libro y vi que efectivamente tenía toda la conversación, me quedé leyendo todo mientras la gente salía del tren, al parecer el héroe estaba enojado porque su pareja estaba en los vagones de tercera clase, en eso levanté la mirada cuando el tren comenzó a moverse encontrándome a Risha como una mujer que me miraba con una sonrisa espeluznante.
—¿Qué pretende, señorita?
—¿D-disculpe? ¿D-dónde está el señor que estaba aquí? —pregunté fingiendo confusión.
—Me temo que usted no está interesada en él, sino en el héroe—respondió como si nada—, ¿Podemos fingir que realmente no escuchó nuestra conversación por medio de ese libro? —señaló antes de mirarme seriamente—, si eres de la Iglesia te advierto que no dejaré que informes nada.
—No tengo nada que ver con la Iglesia—afirmé sabiendo que de nada serviría negarlo—, sólo quería conocer al nuevo héroe del que la gente habla, además eso no es algo que le incumba a alguien como usted.
—¿Jooo? Pero resulta que sí me interesa—dijo cruzando sus piernas y volviendo a sonreír mientras la cabina se oscurecía ¿Estábamos en un túnel?—, ¿Qué pretendes? Lo que digas marcará tu destino.
De pronto miré con cuidado por la ventana y casi me desmayo al ver que estaba totalmente cubierta por cuervos con los ojos rojos mirándome atentamente.
—Un simple hechizo de transporte te mandará fuera del tren y antes de que te estrelles en el suelo morirás devorada—dijo sonriendo tan tranquilamente que no pude evitar temblar de miedo—, así que dime ¿Qué pretendes?
Sabía que esa mujer cumpliría su amenaza, estaba totalmente atrapada ¿Cómo pude bajar la guardia tan fácilmente creyendo que no me haría nada?
—Quería pedirle al héroe que me ayudara con una misión importante para mi familia, pero no estaba segura de que pudiera cumplirla así que quise investigarlo.
No era una mentira, sólo estaba dando la información necesaria para que supiera que no tenía ninguna mala intención.
La chica me miró seriamente, estaba asustada ¿Qué tan aterradora podía ser una mujer como Risha?
Luego de lo que me pareció una eternidad, ella miró a la ventana y todos los cuervos se fueron volando.
—Mmmmm no sentí que mintieras, pero no estás diciendo toda la verdad—dijo colocando sus codos sobre sus muslos y apoyar su cara sobre sus manos—, te dejaré vivir por ahora, pero te aconsejo que hables con él antes de que bajemos en la próxima estación.
—D-de acuerdo—susurré luchando por mantener la calma.
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(Pv Daniel)
—No sabe mal, es como la comida de un avión.
—¿Qué es un avón, papá? —me preguntó Sora mientras comía un poco de pan con la sopa que nos sirvieron.
—Es una máquina gigante que sirve para ir volando a algún lugar—le dije divertido mientras comía un poco de pollo frito.
Aunque yo apenas viajé en avión unas dos veces a lo largo de mi vida, nunca tuve problemas con la comida de estos, digo no era como la que nos servían en la cafetería de la escuela.
Miré la pared del vagón comedor que tenía un mapa de la línea que parecía encantado ya que no sólo mostraba las estaciones sino que se podía ver un pequeño tren que se movía, indicando en tiempo real hacia dónde nos dirigíamos.
—Llegaremos pronto a la estación—dije terminando de comer—, ¿Quieres que pidamos el postre? —pregunté a lo que mi pequeño asintió rápidamente terminando su pan—, jeje tranquilo tranquilo, lo podemos pedir para llevar, espero.
Llamé a una de las meseras y pedí el postre, ya que sólo tenían un menú establecido, todos comíamos lo mismo, aunque noté que la gente a mi alrededor parecían ser también de segunda clase, tal vez los que vayan en los vagones de lujo coman en estos.
La chica nos sirvió una especie de bollo relleno de lo que parecía mermelada de fresa rodeada de un círculo de miel, Sora terminó de comer y tomó el bollo con su mano para darle un gran mordisco pero luego puso mala cara.
—Uggghhh papá sabe feo.
—¿En serio? —pregunté antes de probar el mío…oh por dios ¡Está demasiado dulce! —, ¡Ugh! Tienes razón.
Parecía que hubieran tirado un saco de azúcar sobre la masa, era tan empalagoso que sentí que mis dientes se iban a romper por el exceso de dulce.
—Yo buscando azúcar por la ciudad y ellos desperdiciándola—susurré tomando agua rápidamente, agh necesito un café o algo amargo para calmarme.
Pagué la comida y por desgracia no tenían algo como encuestas de servicio o hubiera puesto una queja. Salimos del comedor y volvimos a la cabina todavía con el mal sabor de boca, entonces vi que Risha tenía su apariencia de chico frente a la joven que me miró un poco inquieta.
—Disculpa, tú eres el nuevo héroe ¿Cierto? —me preguntó cuando me senté.
—Si, digamos que sí—dije deseando tener algo para bajar el azúcar en mi boca.
—Este joven me dijo que están buscando misiones para subir de rango—me dijo—, hay una misión que quiero que me ayuden, pero antes…la persona que me encargó buscarlo me pidió ponerlo a prueba.
De su libro sacó una hoja de pergamino doblada y me la entregó, la abrí y aunque ya entendía un poco mejor el idioma, todavía me faltaban algunas palabras por entender.
—¿Una misión de localización? —pregunté extrañado, más porque era de rango A.
—Hay dos cajas ocultas en la región Este que queremos encontrar, su contenido es un misterio pero mi Amo está interesado en encontrarlas—explicó la chica—, hace meses que puso el anuncio pero nadie ha respondido, si puede tomar la misión y cumplirla, le daré una misión de mayor valor que le ayudará a subir de rango y nivel, sin mencionar que las recompensas son muy valiosas, pueden quedarse con todos los tesoros que consiga en el camino.
Leí la misión y me sorprendió la cantidad de experiencia y dinero que podíamos conseguir, además decía que había una gran posibilidad de conseguir armas muy valiosas.
—Tengo que hablar con el líder de mi grupo antes de tomar una decisión—dije mientras Sora miraba el pergamino curioso—. ¿Cómo podemos comunicarnos con usted en caso de aceptarla?
—Sólo tiene que ir al cualquier gremio de aventureros y pedirle al encargado que les asigne la misión, yo recibiré el aviso—explicó la chica—, Como tal no hay fecha límite, pero si pueden resolverlo antes de que llegue el invierno les vendría bien, dudo que puedan conseguir las cajas con las tormentas y bajas temperaturas.
—Eso no nos da mucho margen de tiempo—medité.
Según mis cálculos, podríamos estar más o menos a principios de Octubre, ya que todavía estábamos en otoño, pero el invierno podría llegar a mediados de noviembre o principios de diciembre si se basaban en el mismo tiempo de la Tierra.
—Por favor consúltelo con su grupo, con lo que ganen podrían vivir cómodamente este invierno—insistió la chica antes de levantarse—, eso sería todo, con permiso.
Abrió la puerta de la cabina y se fue rápidamente, dejándonos con Risha.
—Si aceptan la misión, quiero ir con ustedes— dijo rápidamente—, si es lo que creo que es, quiero estar ahí para verlas—la miré extrañado—, sólo habla con Atem, aprovecha que vas a conocer a su grupo y diles, si suben todos de rango, podrías cambiar el mundo.
—Eso suena algo exagerado—dije nervioso.
—Lo digo en serio, los héroes más valiosos son los que han traído grandes progresos—aseguró—, este tren, el tranvía, aguas residuales, los conciertos, todos esos tesoros importan más que pelear contra los Reyes Demonio, ¿No quieren tener algo de tu mundo aquí? ¿No te gustaría cambiar algo?
Rápidamente pensé en el horrible dulce que me dieron, si pudiera montar una pastelería, podría incluso dar clases para evitar semejante atrocidad.
—Tal vez sí lo haya, no creo que haga un cambio drástico, pero podría salvar el paladar de muchos—respondí.
Ella me miró confundida pero no dije nada más, definitivamente traeré dulces de calidad a este mundo.