Obsesión de papi

Pérdida

Cuando estaba apunto de verlo, un gran camión pasó e interrumpió la vista, entonces me puse roja de la rabia y frustración. El camión pasó y el carro ya no estaba. Me sentí impotente y frustrada.

-Siguiente.

Soy la siguiente en la fila, diablos, no debo demostrar frente a toda esta gente mi temor hacia las agujas. -relájate, Allison- dije para mí-.

Me senté y descubrí mi brazo con temor y manos temblorosas, es una pena que Alex tenga que hacerse estos exámenes otro día, al menos estaría aquí para apoyarme.

-Tranquila, no pasa nada- me dijo la enfermera, una mujer delgada, rubia con piel hermosa, ojos verdes y nariz aguileña.

-Rápido por favor rápido rápido... -dije con mis ojos cerrados y mi mandíbula apretada-.

-Listo, no pasó nada, ¿Viste?

En realidad, ella era muy amable.

-Sí, gracias.. (Sin embargo no me percaté de las lágrimas que habían corrido por mis mejillas).

-Ohhh la niñita estúpida va a llorar ahora...-Se escucharon varias risas-.

Era Trina.

-Trina, déjala en paz. -dijo Andrés, tratando de darme tranquilidad.

Salí de allí corriendo de inmediato. No porque le tenga miedo a esa Regina George frustrada, sino porque su sola presencia es un ave de mal agüero.

-¡Oye!

Me giré y vi que Andrés venía corriendo tratando de alcanzarme.

-Andrés no, yo no quiero tener problemas con tu novia... Ya déjame así, yo estoy bien; no me afecta lo que ella me dice, ¡me afecta el hecho de tan sólo verla!

-Lo sé, Trina es un estrés...

-¿Y entonces por qué estás con ella, duh?

-Ven, sentémonos allá y te cuento. -nos sentamos en una escalera que quedaba en un rincón, así nadie lo escucharía.

-Bien, escucha, sino fuera por esa estúpida, en este momento estaría besándote e insinuándome a ti cual loco. -decía lo anterior mientras acariciaba mi pierna-.

Me sentí extremadamente incómoda, quité su mano de mi pierna y tratando de olvidar lo anterior le dije:

-¿Qué tal si mejor respondes lo que te pregunté?

-Bien, ¿Sabes cómo se llama el director de esta universidad?

-Sí, Beck Harris, ¿no?

-Sí, pues el nombre completo de Trina, es Trina Lizette Harris Brown. Y yo no es que sea muy inteligente como para pasar a una universidad tan importante y exigente. Así que...

-Oh, entiendo... ¿Así que estarás con Trina hasta que a ella le plazca?

-Bueno, ese es el maldito plan, pero siempre que trato de terminarle o alejarme me recuerda "sutilmente" que de ella depende mi futuro, así que tendré que esperar a que ella se canse...

-Eso es horrible.

-¿Cual es tu nombre? Aún no me lo has dicho...

-Cierto-solté una pequeña risa. -Me llamo Allison.

-Qué lindo nombre, casi tan lindo cómo tú. -Para este momento su mano estaba casi llegando a mi glúteo.

-Am... Andrés yo ya me tengo que ir... -dije muy molesta-.

Cuando traté de irme, Andrés me agarró con fuerza y trataba de besarme, cuando agarró mi trasero empecé a gritar, en eso solo escuché el sonido de un puñetazo mientras veía a Andrés caer rápido en el piso. Volteé y vi a Felipe muy molesto, tuve que calmarlo y separarlo de Andrés.

-Gracias, Felipe - dije, tratando de calmarme-.

-Ni lo menciones. -me agarra de la mano-.

-No hagas eso.

-¿Por qué?

-Sólo no quiero... -dije incómoda-.

-Deberías dejarme, solamente estoy tocando tu mano, no como el idiota ese que te estaba casi violando.

-Mira, enserio te lo agradezco pero me tengo que ir, además no entiendo por qué me ayudaste, aunque te lo agradezco muchísimo.

-Porque nadie toca lo que es mío. Tú eres mi propiedad, Allison. Nadie te toca. El que lo haga que se atenga, estás segura conmigo.

Me puse pálida.

-Por supuesto que no soy de tu propiedad, no seas ridículo, ni siquiera te conozco, ¿Sabes? No me vuelvas a hablar, gracias por ayudarme, pero te quiero tan alejado de mí como quiero a Andrés, adiós.

Seguido de esto ella llegó hasta su casa, ahí estaba el carro parqueado pero era tan común en su día a día que ni siquiera la sorprendió.

Ringringring

-¿Aló?

-Buenas, hablo con ¿Allison Berenice Dunne Clark?

-Em sí, ¿con quien hablo?

-Para confirmar, eres hija de ¿Alvin Dunne y Madison Clark?

-Sí, si soy, ¿Qué pasa?

-Necesitamos que vengas al Hospital Norbwood West, ¿puedes llegar en menos de 2 horas?

-Creo que llegaré en hora y media. ya voy para allá.

El corazón de Alli estaba totalmente fuera de control, estaban pasando muchas cosas por su mente, tomó el bus y se dirigió a su destino. Pensando en todo lo que pasaría o podría pasar.

-Hola, soy la hija de Alvin y Madison Dunne. ¿En dónde están ellos?

-Oh, puedes subir al quinto piso, allá hablarás con el doctor Boris Wood.

Después de subir las escaleras con el corazón acelerado, nerviosa no solo por lo que me tenían que decir, sino también porque el nombre de ese doctor se me hace muy familiar; mi mamá una vez trató de hacerme una cita con él cuando yo tenía tan solo 14 años. Espero que no se porte como un enfermo.

-Hola, me dijeron que me necesitan, doctor ... ¿Boris Wood?

-Hola princesa.

Definitivamente es el mismo doctor. Tan solo que esta vez luce una barba y unas canas que resaltan en las raíces de su cabello.

-Am creo que me pueden informar aquí acerca de mis papás...

-Bien, Allison, necesito que te sientes conmigo, por favor.

Empecé a sentirme extremamente nerviosa y asustada, no supe qué noticia habrían de tenerme.

-¿Qué pasó?-Lo dije casi al borde del llanto.

-Primero necesito que me respondas unas preguntas.

-Claro... -dije expectante-.

-¿Tienes algún familiar que pueda estar contigo ahora?

-No, mis dos papás son hijos únicos, los abuelos por parte de mi mamá no los conozco, no sé donde viven y según sé, son algo desagradables. Y los abuelos por parte de papá están muertos, ambos.

-Allison, necesito que entiendas que no estás sola. Me tienes a mi, que soy un gran amigo de tu padre y tu madre, princesa, desde siempre. Y segundo, económicamente ellos te dejaron algunos ahorros que tenían, la casa la perdieron por un embargo, pero gracias a un gran abogado muy poderoso que se ofreció a ayudar, viendo la situación por ti, hizo que tus cosas y todo lo de tu cuarto no se lo llevaran. Además de algunas cosas de valor que puedes vender y adquirir un poco de dinero.

-Pero no entiendo, ¿por qué me dice todo esto?

-Escucha Allison,-Lo dice tomando mis manos con un tono y semblante sincero- Tus padres tuvieron un accidente.

-Ajá?... -El corazón de Alli estaba a mil.

-Allison, tus padres... tus padres fallecieron, lo lamento muchísimo mi niña, en verdad.

Sentí como todo daba vueltas y empezaba a escuchar todo más y más lejos, escuché el golpe de mi cabeza en el suelo pero no lo sentí.

Pasaron 2 semanas, por suerte conté con que aquel abogado, quien, había pagado lo de mi alquiler por 1 año, lo que me sorprendió, ya que ni siquiera lo conozco. Aunque últimamente he ido a clases, todo el mundo nota que estoy como ida, parece que estuviera muerta por dentro y por supuesto que tengo porqué estarlo, a pesar de que mis padres fueron grandes basuras conmigo, en este momento me siento más sola y desprotegida que nunca, aunque nunca me hicieron sentir diferente, ahora jamás habrá la posibilidad de que me quieran algún día. El auto n***o siempre me sigue e incluso más de cerca, con Felipe no hablo porque ni siquiera me importa. Escasamente trato de poner atención a mis estudios y en lo demás ... no puedo hacer más.

Pasaron dos meses y mi mente seguía igual, Alex estaba siempre pendiente de mi sin importar cuánto la ignorase. No hablo con nadie desde ese día. Incluso cuando cumplí mis 18, solo estuve en casa viendo tv, al ver que Alex y Felipe trataban de encontrarme, hui a un bosque que encontré los primeros días y me recluí en su puro oxígeno. Tres meses después de clases, empezaron las vacaciones. Decidí quedarme en casa, de todas maneras no tengo dinero para pagar una escapada a alguna otra ciudad.

Kemal.

Hoy, una vez más, me encuentro afuera de su departamento. Sosteniendo su foto, la primera que le tomé la segunda vez que la seguí. Su hermoso cabello largo y castaño, su piel suave e inmaculada, su pequeña boca; pequeña y hermosa. Su estatura, su cuerpo, sus ojos y sus hermosas pestañas me tienen loco desde el primer día en que la vi. Fue un accidente, pero la insistencia de mi cerebro en verla todos los días se tornó en una necesidad diaria.

Luego de investigar sobre su vida y saber casi todo, me di cuenta de que sus padres son una gran porquería con ella. Sobre todo su madre. Un día, mientras pensaba que jamás me haría caso a menos de que yo la obligara, decidí hablar con ellos, a sabiendas de que tienen millones de deudas y no tienen un solo peso, manejé hasta su ciudad de origen para ofrecerles dinero para que dejaran en paz a esa adorable niña, víctima de sus maltratos.

Sin embargo, un día en el que quedamos en reunirnos para acordar el pago, la madre de Allison, además de pedirme el triple (y por suerte tenía el dinero en ese momento), me dijo que debía darles una casa en Las Vegas. En ese momento supe que estaba tratando con unos estafadores de primera. Y descubrí que su padre es una basura, cuando en privado, me dijo que entendía mis necesidades. Que su hija es muy "caliente", y que desearía que no fuera su hija para hacerla suya. En ese momento tuve que salir a la calle y disparar al vacío, en modo de frustración. Vaya basura de padres que tiene ese hermoso ángel. ¿Cómo puede ser una criatura tan inocente y preciosa, hija de una bazofia de gente?

En fin, luego de acordar la dirección de su casa, porque sí, les daría una casucha para que nos dejaran en paz, se subieron a su auto, mientras la madre me distraía, el padre robó mi arma, mi dinero restante y mientras se subían al auto, la madre me gritó que Allison ya estaba vendida a un doctor, y que yo era un imbécil. Luego de perseguirlos en mi auto durante 15 minutos, llegamos a una curva muy resbaladiza, en la cual, mi auto se deslizó y por inercia arrastró al otro. Su auto evitó que el mío cayera a un precipicio y así, vi cómo los padres de la pequeña Allison caían a un barranco no tan peligroso, pero que provocó que dieran un par de vueltas en su auto.