A Mateo le gustaba darse sus lujos

1606 Words

—¿Este barco te pertenece? —preguntó con los ojos bien abiertos. Mateo sonrió de lado, esa sonrisa suya que siempre parecía estar a punto de soltar un secreto. —Uno de tantos. —¿Y cómo… cómo es posible que…? —Carolle estaba perdida entre la sorpresa y la incredulidad. —Carolle, los curas también tenemos derecho a relajarnos. —Mateo se dejó caer en un asiento, con los brazos cruzados detrás de la cabeza y una expresión de satisfacción. Ella no pudo evitar soltar una carcajada. —No deja de sorprenderme lo diferente que eres a lo que aparentas. —Eso lo dices porque apenas me estás conociendo. —Él le hizo un gesto con la mano para que se sentara junto a él—. Vamos, relájate. Este es un momento para disfrutar, no para analizar. Carolle se sentó, todavía con una sonrisa en el rostro, mie

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD