Luz está a espera que su padre salga de la habitación, ha pasado toda la tarde encerrada con la mujer, porque los ruidos continúan, solo que ahora son diferentes, Luz está con el oído pegado en la puerta, cuando de presto se abre tirándola al suelo, mira a su padre salir en bata.
—¿Hija, que haces aquí? —Rodolfo la ayuda a levantarse—
—¿Dónde está la ramera, dime donde esta? Esto no lo permitiré me lo prometiste. —Entra de un solo a la habitación y busca con su mirada a la dichosa ramera, en eso escucha ruido en el baño—¿Cómo pudiste, padre?
—¿De qué hablas? ¿Qué sucede contigo?
En eso abre el baño de un solo y ve una mujer de unos sesenta años lavándose las manos y un olor raro en toda la habitación, ella la queda viendo de pie a cabeza, ella esperaba ver una mujer delgada con buen a
