Nuestro Secreto

La boca suelta de Beatriz

Estoy sentando en mi oficina, me concentro viendo la ciudad o eso creo, llevo quizás una hora así, no puedo creer todo lo que hice con Olivia ayer en esta oficina, la señora del aseo hoy mencionó que partimos algunas cosas.

Hace unos meses quería destruir a mi esposa y ahora estoy aquí, anonadado por todo lo espectacular que son mis días. El hecho que Livi quiera tener un bebé conmigo me emociona, llegará ese que su padre nos arrebató.

-Señor el investigador está aquí.- escucho decir, mi asistente por fin me saca de mis pensamientos.-

Orlando ingresó, el mismo hombre misterioso que averiguó todo lo que sufrió Olivia hace años.

-Que gusto verlo de nuevo señor Malloy. Supongo que necesita de mis servicios.-

-Así es.- mencioné sirviéndole un trago, él lo recibió y se sentó, vi como sacó su libreta para apuntar.-

-Dígame señor ¿qué voy a descubrir?-

-Necesito que se realice un examen al cadáver de mi suegra, se encuentra en el cementerio central.-

-Vaya señor, eso sí que es un pedido especial ¿qué debo descubrir?-

-Su causa de muerte, no estoy seguro que sea la que entregó medicina legal hace años.-

-Bien señor, ¿será legal?-

-Me gustaría que así fuera, su hija pedirá la orden, yo me encargo de eso, solo quiero que busques todo sobre esa mujer, historia clínica, informe de defunción. Pero lo más importante, quiero que vigiles que la exhumación se haga sin complicaciones, necesito que nadie meta sus manos.-

-Lo haré señor, indíqueme los datos de su suegra y yo averiguaré todo.-

Media hora duramos en la oficina, le entregué todos los datos, también le pedí a mi abogado que tramitara la orden de exhumación, mi esposa lo firmaría sin problema. Quiero ayudarla a resolver la duda que tiene, si descubrimos que fue asesinada, podré enviar a su padre a la cárcel.

Un tiempo después y algunas reuniones la veo llegar, ella, la mujer que me vuelve loco.

Hoy viste de n***o, un vestido que solo posee una manga, su hombro izquierdo está descubierto, trae el cabello recogido en una coleta alta, sus zapatos rojos son idénticos a la pasión de sus labios.

-Hola James…- menciona contoneando su cadera, su aroma llega primero a mi lado.-

-Livi.- mencionó poniéndome de pie.-

-Tu abogado me visitó, traía una orden para ser firmada.-

-Así es cariño.- sus manos ya rodeaban mi cuello, solo me quedó tomarla de la cintura y subirla a mi escritorio.-

-¿Hiciste cambios aquí?- preguntó observando el lugar.-

-Reemplace algunas cosas, las rompimos ayer.- mencioné besando su blanco cuello.-

-Que vergüenza, no sé en qué momento nos convertimos en unos animales en celo,-

-Es tu culpa, eres hermosa y deseable.-

-Es mejor que no me sigas hablando así, estoy a punto de quitarme las bragas.-

-Tengo 20 minutos antes de la siguiente reunión.- mencioné apretando sus senos.-

Olivia me empujó, pensé que exigiría que me detuviera pero no fue así. Se bajó del escritorio, me dio la espalda y comenzó a quitarse sus bragas negras, lo hacía lentamente, quería que viera su bello trasero.

-Que sea solo 10 minutos, unos clientes me esperan.- mencionó recostándose en el escritorio.

Juro que fueron los minutos más calientes de mi vida, la puerta estaba sin seguro, cualquiera podría ingresar, fui rudo tal como le gusta a Olivia, ella solo gemía exigiendo que no tuviera piedad.

Seguro que la voy a embarazar, estoy haciendo todo de mi parte, le entrego hasta la última gota de mi ser.

Al final quedé de nuevo sentado mirando la ciudad, es como si un tornado viniera y te diera mil vueltas. Cuando ve que te deja sin fuerzas se marcha, así es Livi.

Casi la pierdo por estúpido… fue mi último pensamiento antes de ingresar a la reunión.

-“Señor ¿aprueba los planos?”-

-¿Qué?- mi mente estaba en otro lugar, no en la reunión.-

-Preguntaba ¿qué si aprueba los planos?-

-Envíamelos, quiero revisarlos con calma, mañana te daré una respuesta.- mencioné, sé que no me concentraría hoy.-

Salí de la sala de juntas, quise pasar a visitar a mi esposa, ella se encontraba en la sala de ventas principal, organizaba el lanzamiento.

La veía a través del cristal, hablaba y dirigía mientras se movía por el lugar, por un momento nuestras miradas se encontraron, yo no quería interrumpir pero ella sí, dejó su charla y se acercó a mí, solo sentí como nuestra labios se chocaron.

-Hola… ¿necesitas algo?- preguntó

-No, solo quería saludarte, verte un momento.-

-Terminaré pronto ¿me esperas y tomamos un café?-

-Me encantaría pero debo ir a visitar a los Madox, el proyecto ya casi saldrá y nos falta concretar unos puntos.- mencioné

-Entiendo, entonces te espero en casa, cenaremos los tres.-

-Si cariño, llegaré temprano y llevaré el postre.- mencioné

-Que sea de chocolate, deseo llenarme en cuerpo de él esta noche.- susurró mientras mordió mi oreja.-

-Livi….-

-Adiós esposo, te una buena tarde.- la escuché decir, su bello trasero me deleitó hasta que volvió a la sala para seguir con su reunión como si nada, solo me quedó pensar que yo no estaba a su nivel, Livi era es una mujer ardiente y yo solo un chiquillo precoz.

Llegue a la constructora Madox, ellos nos apoyan con proyectos, el último que estoy diseñando requiere su alianza. Son aliados estratégicos que siempre se debe tener.

Su compañía está en el centro de la ciudad, es dirigida por Armando Madox, un hombre que adora el dinero y las mujeres fáciles.

-Madox.- mencioné ingresando a su compañía, el solo sonrío y apretó mi mano.-

-Que gusto verte Malloy.- los dos estudiamos juntos, el era famoso por grandes fiestas y consumo de drogas, también sé que estaba enamorado de Olivia.-

-Vengo para que hablemos de negocios.-

-Claro pero primero quiero preguntarte cómo está Olivia ¿ya la dejarás?-

-Jamás.- respondí y me senté, sabía que tendría esa pregunta esperándome.-

-Bueno pensé que lo harías ya que su hermana se encargó de difundirlo.-

-Solo son rumores.- mencioné

-Bueno sé que vienes hacer negocios pero yo hice uno primero.- mencionó, lo vi cuando caminó hacia la puerta del baño, la abrió dejándome ver a Beatriz, la muy zorra venía arreglando su cabello.-

-Hola James.- mencionó, podía sentir su olor a bandida.-

-¿Qué haces aquí?.- pregunté

-Solo haciendo negocios.- respondió

-¿Una mujer embarazada anda en este tipo de negocios?.- le di una mirada de arriba abajo, qué asco de mujer.-

-Quería probar algo diferente Malloy, ya sabes cómo soy, además ya que no pude tener la original, me conformo con la copia.- escuché decir, Armando es peor que Beatriz.-

-Bueno yo me voy.- Beatriz se acercó a Madox, vi como le dió un beso mientras el otro apretaba su trasero, desde aquí podía ver que efectivamente Beatriz estaba en embarazo, un pequeño bulto se veía en su vientre.-

Ella caminaba hacia la salida, jamás sentí tanto dolor de estómago al ver a alguien como a esa mujer.

-Espera Beatriz, una cosa.- mencioné sin verla, seguía con los ojos en Madox mientras fumaba un puro en su escritorio.-

-James, sabía que no me habías olvidado.- mencionó volviendo.-

-No me interesa nada de ti, solo quiero que sepas que sé todo lo de tu padre, todo lo que hizo cuando tú y mi esposa eran niñas.-

-¿Qué? ¿Qué sabes?- mencionó nerviosa.-

-Solo dile eso a tu padre.- sé que por medio del miedo las personas hablan, Livi estaba segura al afirmar que su padre le mencionó que los accidentes pasaban, seguro ella vio o escuchó algo cuando era niña, supongo que Beatriz también.-

-Tu… tú no sabes qué dices.-

-Lo sé, pronto todo saldrá a la luz, que mal que tu nombre quedará expuesto como siempre, solo que algo más turbio ¿no es así?-

-James,.. no, tú no lo harías.-

-¿Por qué no? Crees que voy a perdonar que enviaran a Olivia a un manicomio, también que tu padre la moliera a golpes para que perdiera a nuestro bebé.-

-¿Lo sabes?-

-Lo sé todo, todo Beatriz.- respondí sonriendo.-

Vi como sus manos temblaban, la expresión de su rostro, era indescriptible, la verdad no la entendía.

-James yo solo fui una víctima, mi padre me obligó hacerlo.- respondió

¿La obligo? No entiendo a qué se refería, debía seguir preguntando, ella me daría información.

-Eso no lo creerá nadie Beatriz, siempre apoyaste las acciones de tu padre, podría decir que las disfrutabas.-

-¡No es cierto! Siempre ha sido una violacion, yo jamás lo he disfrutado.- mencionó casi en llanto, pensé que era cualquier cosa, menos esta asquerosidad.-

-¿El hijo que llevas dentro es de tu padre no es así?-

-Tengo que irme.- mencionó

-Antes de que lo hagas, quiero que me digas algo.-

-No quiero James, no quiero.-

-Lo harás, si no es así, hoy mismo publico las pruebas que tengo de tus actos amorosos con tu padre.-

-¿Qué quieres?-

-¿Cuál es la obsesión de tu padre con Olivia? Dime por qué no la deja en paz.-

Beatriz comenzó a caminar hacia la salida, supongo que no me diría nada, bastante información me suministró.

-Desea lo que nunca ha podido tener de ella.- mencionó y salió.-

De cierta manera me aliviaba su respuesta, el maldito bastardo jamás ha tocado a Livi, al menos no de esa manera.

-Vaya amigo, que puto enredo la de tu familia, mejor agradezco que no me involucre con Olivia.- mencionó Madox entregándome un vaso de whisky, creo que necesitaría al menos una botella para procesar lo que sucedió hoy en esta oficina.-

No sé cómo le mencionaré esto a Olivia, no sé si quiero saber qué le hacía ese hombre cuando ella era niña.