bc

Amor después del contrato

book_age18+
991
FOLLOW
15.6K
READ
contract marriage
HE
billionairess
blue collar
drama
office/work place
addiction
like
intro-logo
Blurb

Ashley Benson, es la única heredera de una inmensa fortuna hotelera. Benson&Benson y en su desesperación por cumplir la última voluntad que había dejado escrita su padre para liberar su fortuna, realizó un matrimonio de mentira que resultó ser lo más verdadero que había tenido en su vida.Steven Velázquez, después de atravesar un infierno, encontró la gloria en un matrimonio por contrato que lo hizo un verdadero rey, ya que no solo logró salir del abismo y convertirse en un empresario exitoso, sino que también encontró a la dueña de su corazón. ¿El amor es lo suficientemente fuerte para aceptar a las personas tal y como son?¿Podrán ser felices un insignificante vagabundo y una poderosa CEO?

chap-preview
Free preview
La boda.
«Narrador» Ashley Bonson: Hija única y declarada heredera de la gran fortuna Bonsón&Bonson estaba de regreso después de un viaje de negocios. Ella no sabía qué se tomaría meses en regresar y había tomado un vuelo a toda velocidad pensando cómo podía arreglar el desorden que estaba tocando a su puerta y no había tiempo para nada. Ella tomó un taxi a su salida del aeropuerto, llevaba mucho afán y desesperación, incluso pensaba que el conductor del taxi conducía lento y por eso le comentó que llevaba prisa para que, de alguna manera mágica, en segundos estuviera en su mansión. Al llegar, encontró a su amiga recibiendo algunos preparativos de lo que parecía un evento elegante. Todo aparentaba estar listo. —¡Amiga, aquí estás! —la recibió con un gran abrazo después de meses sin verla. —Todo esto sí que fue un gran reto para nosotros. —expresó mientras le mostraba como estaba quedando la sala de estar. —¿Quiere decir que se va a realizar mi boda? —Ella no podía creerlo, aunque sus ojos lo estaban viendo en ese instante. —Acabo de viajar de emergencia, hoy se cumplía el plazo que me dio mi madre y… ¿Dices que todo está listo? —No tenemos tiempo para hablar, Steven y yo arreglamos todo y mantuvimos el control. Nos costó mucho, pero hicimos que todo pareciera real en tu ausencia. —No entiendo nada, pero te debo la vida amiga. Si hoy se realiza esta boda yo... —Ella se quedó sin palabras y volvió a abrazar a su amiga. Te amo —Más tarde hablaremos y nos pondremos al día sobre todo lo que hicimos en tu ausencia. Ahora nos toca entrar a la casa, he traído a la peluquera y todo lo que tendrán que ver en dejarte hecha una novia. En cuanto me llamaste anoche y me informaste de que llegaba en la mañana, organicé todo para que no tengas que salir de la casa. Solo esperaba esa confirmación. —Estoy lista —expresó sin aún creer lo que están mirando sus ojos. Luz tenía todo organizado para recibir a Ashley a su llegada. Más tarde los encargados de peinado dejaron su pelo en ondas, pusieron un hermoso, diadema con perlas y llevaba su velo. Ashley iba pura al altar, aunque esto era un matrimonio por contrato. Luz no omitió detalle, hizo todo lo que alguna vez su amiga le expresó que sería el día de su boda y su día soñado. Pasaron la mañana entre maquillaje y vestidos, para estar listas a la hora de la boda. —Luz, acércate, si no respondes a mis preguntas te prometo que voy a quedar loca ¿Dime cómo lo has logrado? —Después de que Steven firmó el contrato de confidencialidad que le entregamos cuando iniciamos con los primeros pasos. Ese día te fuiste por la emergencia que se presentó. ¿Lo recuerdas? —ella, asintió. —Lo que jamás imaginamos era que esa emergencia duraría 5 meses, pero eres mi amiga, mi hermana y mi alma gemela. Yo no podía dejarte quedar mal frente a tu madre. —Pensé que lo iba a perder todo, Más adelante deberás contarme lo que sucedió, sabe que confío en ti y no te dejaré sola jamás. —Claro que sí, tendremos mucho tiempo para eso. Ahora vamos por el vestido. Ashley estaba lista para ver su enorme vestido de novia. Su amiga la ayudó y, al mirarse al espejo, una sonrisa irónica llegó a su rostro. Le parecía mentira que el día más soñado de toda mujer, para ella, se había convertido en un contrato, por culpa de una estúpida cláusula, que dejó su padre, ya que decía que una mujer no era lo suficientemente madura para guiar el imperio que ella había heredado. —No puedo creer que así sea mi boda. —Me habías dicho que estabas preparada amiga, solo piensa que es otro reto más de la vida y sigamos adelante. —¡Estoy preparada! —dijo sintiendo un gran vacío en su estómago. Todo estaba listo, llegó una limusina blanca, recogió a la novia y a su amiga para llevarlas a la boda. A su entrada, estaban todos los invitados, se les podía ver con una sonrisa marcada en sus rostros, pero dos rostros serios hicieron sus rodillas temblar. Allí estaba su madre junto al hombre que la crio y la marcó para siempre. En sus rostros había seriedad, ella sabía que no podían estar felices, ya que dudaban que encontrar al hombre perfecto y más después de que hicieron todo lo que tenían a su alcance para que esa boda no fuera posible. Caminando al altar quedó embobada mirando todo el lugar, su amiga había hecho su sueño realidad, todo era perfecto tal y como alguna vez lo describió. En ese momento su mirada se fue hacia aquel hombre apuesto que estaba al final del pasillo, no lo podía creer, no podía ser que se tratara de Steven. La última vez que lo vio 5 meses atrás, todavía se veía fatal, su piel estaba arruinada por el sol, su cabello estaba totalmente deshidratado, su cuerpo tenía falta de un buen exfoliante, la suciedad lo cubría y ese hombre que estaba en el altar se veía diferente, ella miró a Luz queriendo preguntarle dónde había quedado el vagabundo, más se acercó hasta él y unieron sus manos y sus miradas se encontraron y dio inicio el juez que pronto lo declararía marido y mujer. —Señorita Ashley Bonson ¿Acepta usted al señor Steven Velázquez, para amarlo, protegerlo y respetarlo, en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte los separe? Ashley escuchó esa voz, esas palabras que estremecieron su cabeza, su corazón se debilitó y volvió a mirar a los ojos de aquel hombre. No podía negar que era guapo, pero ni siquiera le conocía ¿Cómo puede ser posible que por el capricho de una persona, ella tenía que unirse a un hombre que no conocía? Ese día se juró a sí misma cerrar su corazón y guardar sus emociones para cuando le tocará encontrar al amor verdadero y cumplir los anhelos de su corazón. Ella solo repetía en su cabeza una y otra vez —Ashley, esta no es tu boda, es solo un contrato, una responsabilidad más en la vida. Como todas las que te ha tocado llevar desde el día de tu nacimiento. El juez, al ver que ella no respondía, volvió y repitió la pregunta después de aclarar su garganta para llamar la atención de la joven: —¿Acepta usted a Steven Velázquez? —ella volvió a mirar a Steven y entonces respondió —¡Acepto! Todo esto retumbaba en su cabeza fuertemente. Le parecía una locura, era una mujer que se había preparado, se olvidó de todo los placeres y se dedicó a ser la niña de papi y mami. A la persona que ella más amaba en la vida desde sus 8 años lo había perdido y esa era su padre. Dos años más tarde, su madre llevó a la casa a un hombre, que aunque la obligó a que lo llamara padre, ella nunca lo aceptó y nunca lo aceptará. Quizás todo lo que estaba sucediendo, era culpa de Jonás, pero ella no estaba dispuesta a dar un paso en falso, se iba a casar por contrato, iba a hacer lo que fuera necesario para proteger y cuidar la herencia que había dejado su padre. Claro que en el rostro de su madre no había una sonrisa, ella lo quería todo para su marido. Solo qué Ashley se prometió que aunque su padre tuvo una sola hija y su sueño era tener un hijo que lo representara, estaba dispuesta a hacerlo orgulloso de ella, aún estuviera en el cielo. —Debes mostrar una sonrisa, aunque sea pequeñita. —le susurró Steven, ya que ella estaba muy seria y su tristeza brillaba en su rostro. —Gracias por todo, no dejaste sola a mi amiga y eso es muy importante para mí. —En este momento todos nos observan. Ahora bailemos, que todos piensen que estamos enamorados. Luz hizo todo lo que pudo para que esté día fuera una realidad y ya falta poco para que termine. —Responde Steven. ¿Cómo consiguieron convencer a mi madre de que teníamos una relación a distancia? Mi madre está muy seria y eso solo me dice que está convencida de este circo. —Luz se encargó de enseñarme todas las palabras que iba a decir, ella no es tu amiga, es un tesoro valioso que debes valorar y cuidar cada día con celo. —Ella es mi fiel sombra y mi amor. Pero tú, ¿por qué me ayudas? La última vez que nos vimos, dijiste que no me conocías y estabas tan renuente a todo este teatro como yo. —En la vida hay que ser agradecidos, y las únicas personas que mostraron interés por mí, cuando yo era un simple vagabundo, fueron Luz y tú, así que pueden seguir contando conmigo. —Pero ahora estamos casados ¿Sabe lo que esto implica? —Cada día que pasaba leía aquellas cláusulas y las llevó muy presente. Prometo no quebrar ninguna y por agradecimiento viviré contigo los próximos 18 meses de matrimonio. Ellos hablaban mientras bailaban, aunque se habían dado un beso cuando el sacerdote los declaró marido y mujer, había sido algo rápido y al parecer los invitados deseaban más, así que en ese momento, en medio de la pista, cayeron flores desde arriba sobre ellos y todos a una voz comenzaron a gritar. —¡Beso, beso, beso, beso! —Ellos se miraron extrañados, entonces Steven le dio un suave beso, solo que no complació al público y volvieron a insistir —¡Beso, beso, beso! Entonces, por primera vez, sus lenguas se encontraron y sintieron un verdadero beso de quien se había convertido en su compañero. Ellos siguieron bailando y compartiendo hasta que se acabó la fiesta. Ashley se acercó a su amiga y le volvió agradecer por salvarle sus sueños y por todo lo que había hecho para que ese momento fuera posible. —¿Qué hubiera hecho sin ti? —terminó abrazando a su amiga. —Ahora estoy formalmente casada. Esto le quitó la sonrisa a mi madre y seguiré luchando por lo que es mío. —Esta noche no podemos hablar, pero tengo cosas que decirte muy importantes. —Luz hablaba con Ashley mientras no apartaba una sonrisa de sus labios. En ese momento, ambas se percataron de que los ojos de su madre no se apartaban de ellas, tratando de intimidar a Ashley, solo que no tuvo éxito. —Solo 18 meses y volveré a mi vida normal. —¿Ya lo viste bien? Steven está más atractivo que nunca. No parece que sea el vagabundo que recogimos en el parque hace solo unos meses. Ella se volteó y lo miró una vez más mientras tomaba algo para refrescarse. En su dolor por todo lo que estaba ocurriendo en ese momento solo veía al mismo indigente con ropa de diseñador y ahora convertido en su esposo. Su vida era cada vez más confusa y cada cosa y momento que atravesaba le dejaba una profunda herida en su alma.

editor-pick
Dreame-Editor's pick

bc

Her Triplet Alphas

read
7.0M
bc

The Heartless Alpha

read
1.6M
bc

My Professor Is My Alpha Mate

read
485.9K
bc

The Guardian Wolf and her Alpha Mate

read
539.1K
bc

The Perfect Luna

read
4.1M
bc

The Billionaire CEO's Runaway Wife

read
625.0K
bc

Their Bullied and Broken Mate

read
480.7K

Scan code to download app

download_iosApp Store
google icon
Google Play
Facebook