Capítulo III

1990 Words
— Usted dirá señorita en que la podría ayudar — le comento con una sonrisa Realmente estoy más calmado con respecto a que solo me necesita para algo de esta magnitud, ya me había hecho la idea en mi cabeza de que a lo mejor habría cambiado de opinión y me despediría de mi trabajo. — Pierda cuidado se que está preocupado debido a que yo podría haber cambiado de opinión — aparto la mirada avergonzado al haber sido muy obvio —. Cuando tomo una decisión no hay nada que me haga cambiar no hay de que preocuparse — Es bueno escuchar eso de su parte señorita Cavanaugh — le digo posicionando de nuevo mi mirada en ella Al instante de decir esto notó algo que no puedo identificar en su rostro, a pesar de que me encuentro cerca de ello eso me genera un poco de intriga pero optó por apartar ese sentimiento en mi interior. — Realmente tengo unas dudas con respecto al señor Avery, tuve muchas quejas de parte de otras personas por el papel poco satisfactorio desempeñado en esta empresa — continúa:— Aunque lo que me genera algo de intriga es que nunca escuché nada de su parte señor Nodstorm — Es que ocurría muy pocas veces, así que no pensé que valdría la pena mencionarlo — esquivo la pregunta sin saber que más decir, sinceramente eso es lo primero que se me ocurre Se me queda viendo un rato, después de unos cuantos segundos optar por decir: — No voy a opinar en lo que respecta a mentir, pero quisiera que me contara la verdad de lo que ocurría en este lugar, siento que usted más que nadie me podría sacar de mis dudas. — ¿Cómo se dió cuenta?, bueno tampoco es como si fuera experto mintiendo — medito internamente Siempre he odiado las mentiras de sobremanera. La manera más fácil de destruir una relación ya sea de pareja, amistad o familiar es la mentira, para mí no hay mentiras 'blancas', para mí todas las mentiras son lo mismo. Las personas normalmente se esconden en lo que a eso respecta que es una pequeña mentira, pero yo no estoy de acuerdo todas las mentiras son parte del engaño, no hay algo como pequeñas o grandes todas son lo mismo. Aunque las odio, no quiere decir que no las diga, pero es que tampoco es cómodo hablar sobre el abuso que tienen hacia uno por ser "diferente", nos juzgan por todo, por ser flaco, por ser gordo, por tener dinero o por no tenerlo. En la vida te vas a topar siempre con ese tipo de personas que te juzgarán por todo, uno lo que tiene que hacer es aprender a ser feliz con lo que se tiene así sea poco, porque si hay algo que sí está escrito en piedra es que así como hoy puedes estar en lo más alto del mundo, mañana te podrías encontrar con la sorpresa desagradable que lo perdiste todo. Yo que tuve una vida algo difícil, comprendo esos pequeños matices para algunos quizás imperceptibles, debido a que alguien muy importante en mi vida oculto algo casi no me doy cuenta de lo que le pasaba. Pensé que era el único dañado y me sentía feliz siendo de esa manera al pensar que me encontraba protegiendo a la persona que más amo, ame y amaré. Mi hermosa hermana. Salgo de mi estupor, respiro profundamente. No sé porque pero esta chica me genera como una sensación permeable en mi interior, me empuja a decirle todo y eso que solo me ha dirigido un par de palabras. Como si se preocupara no solo por mi, sino por el ambiente laboral en si, es diferente a cómo ha sido en mis anteriores desempeños labores. Había olvidado como de lindo es que alguien se preocupe por ti. — Muy bien señorita, ¿Que dudas serían esas? — le pregunto decido a responder una y cada una de ellas, dice algo en voz baja pero no logro discernir lo que quiere decir exactamente Notó una mirada en ella, pero no distinto en si las emociones cruzan sus facciones. Sorprendido observo como mueve ligeramente su cabeza, conozco eso es cuando una persona trata de aclarar sus ideas. — ¿Que la habrá hecho desenfocarse de nuestra conversación? — así como llega esa duda se va —. ¿Que carajo estoy pensando?, eso no es mi problema — ¿Señor Nodstorm? — escucho qué pregunta, lo que me hace despertar de mis pensamientos —. ¿Se encuentra bien? — Si, disculpe no fue mi intención — le comento — Tranquilo — apacigua con una sonrisa, vuelve a preguntar:— Lo que quiero que me hable, es sobre... El acoso laboral Sus palabras me dejan estático en mi lugar, de todas las cosas que me pude haber imaginado por la que pudieron haber despedido al señor Avery, nunca me imaginé que esa sería una de las razones principales. No soy tonto si me lo pregunta es porque algo de verdad habrá en eso. — Le voy a ser completamente sincero principalmente porque usted me ayudó allá afuera, y también porque veo que usted podría hacer un cambio en el ambiente laboral — Creeme que nunca permitiría nada de eso, no es honesto tratar a otras personas, como él lo hizo con usted allá afuera — continúa:— Además que no soportaría verlo ser amedentrado de esa manera nuevamente Sus últimas palabras me confunden demasiado, siento que estamos de un asunto completamente diferente al que nos encontramos tocando anteriormente. Decido no empujar más así que optó por ignorar sus palabras a razón de que no se el porqué de ellas. — Bueno señorita... Comienzo a relatarle todo lo que ha ocurrido en este lugar desde que comencé a trabajar aquí, como nuestro anterior jefe abusaba de su autoridad. Aprovechaba cualquier mínimo momento para agredirnos psicológicamente en más de una manera, al principio comenzó con burlarse de por cómo nos vestimos, de las llegadas tardes. Hasta que paso a palabras más fuertes como: basura, inepto, bueno para nada. Acompañado de muchas otras palabras despectivas que no vale la pena ni mencionar y que el no era el único, el vicepresidente también estaba incluído en el paquete, entre los dos nos hacían este tipo de trato poco humano. Notó como de su mirada apacible, y bondadosa que tenía anteriormente a raíz de que lo voy contando cada uno de las cosas que él nos decía. Su rostro se va oscureciendo cada vez más, eso me sorprendo. — ¿Cómo una joven tan bonita puede cambiar tanto? — susurro viendo el cambio en ella Ocurre otro cambio, pero está vez vuelve a darme una sonrisa. Tantos cambios me tienen mareado. — Muchas gracias señor Charles A pesar de sus palabras de agradecimiento siento como un matiz diferente en ellas, aunque no percibo en si el trasfondo de ellas. — Será.. No, no es posible, ¿o si? — dudo de si me habrá escuchado o no Optó por pensar todo lo contrario aunque eso no evita que me sonroje o un poco más, menos mal que me tapa la barba porque sino estaría en graves problemas. No puedo pensar de esta manera de mi propia jefa, además es obvio que estamos en una liga muy diferente. Se nota desde lejos, ella es una joven de piel aceitunada, pelirroja que llama demasiado la atención además de unos hermosos ojos verdes que me dejan congelado en mi lugar. Aparto mi mirada rápidamente de ella al darme cuenta que la estoy mirando demasiado, bajo un poco la mirada dando de frente con su pecho lo que me hace ponerme más nervioso. Decido llevar mi mirada hacia la ventana detrás de ella. — Bueno muchas gracias por su cooperación señor Nodstorm, necesitaba de alguien que me ayudara en esto y sentí que usted me podría disponer la información necesaria para cerrar esto — me comenta con una sonrisa enigmática — Pierdes cuidado señorita el que debería darle las gracias soy yo — me levanto de mi asiento, creo que eso sería todo —. Si eso es todo creo que debería retirarme — Así es, espero que tenga una buena jornada ya sabe que cualquier cosa que necesite aquí estaré esperando — su mirada me pone demasiado nervioso sin razón aparente no creo que debería sentirme de esta manera Ella se levanta al igual, que yo para despedirse con un apretón de manos. Estiró la mía para estrechar su mano, en cuanto nuestras manos hacen contacto una corriente cruza por todo mi cuerpo. — ¿Que es esto? — me pregunta abrumado por esta sensación tan extraña Me doy cuenta que ella experimentó lo mismo debido a su reacción muy notoria. Separo mi mano lentamente de la de ella sin querer hacerlo exactamente, reúno fuerzas de dónde no se que tengo para apartarme a unos cuantos centímetros de ella. Le doy un leve vistazo antes de dirigirme a la puerta, cuando estoy apunto de abrirla recuerdo algo y me volteo justo en ese momento. En cuanto efectuo este movimiento y la veo, algo se remueve en mi interior algo que nunca había sentido, es su mirada está diferente a cómo hace unos momentos. Me sorprendo de sobremanera debido a esto, su mirada es más oscura su ojos verdes parecen un bosque denso en medio de una oscuridad enigmática. Salgo de mi estupor para acercarme nuevamente a ella — ¿Se te ofrece algo tan rápido? — me dice con burla, pero es una burla diferente a la usada con el señor Avery temprano, es más juguetona — Que raro... — me digo al ver cómo su mirada se va apaciguando, ignoro este hecho para preguntarle lo que recordé hace unos momentos — Disculpe mi atrevimiento, es que me tengo ir algunos días temprano debido a una obligación que tengo todos los días — le comento, pensé que de molestaría debido al abuso de mi parte, pero es todo lo contrario — Claro, pero debes entender que debo de saber que compromiso sería ese para que tengas que salir temprano todos los días Asiento, ella tiene razón. Este fue uno de los problemas principales que tuve con mi anterior jefe. Nunca le agrado la idea de que yo tuviera que salir más temprano, a pesar de que me apurara y dejara todo listo — Entiendo señorita, espero pueda entender los razones además no es algo que tenga que ocultar siendo sincero — continúo:— Es que tengo que buscar a mi hija después de su jornada de clases, si me voy a la hora que marca la salida sé quedaría esperando mucho y no quiero que se quede sola — ¡Oh! — una sorpresa aparece en su rostro, y algo más cruza sus facciones se ve como.. ¿Deprimida? —. Bueno esas son razones mayores, puedo aceptar eso sin problemas pero creo que deberías ponerte de acuerdo con tu esposa para ese tipo de cosas y no causar problemas Me rasco detrás de las orejas a la vez que una mirada avergonzada cruza mis facciones. Optó por no afirmar no contradecir sus palabras, no creo que seamos tan unidos como para yo transmitirle la verdad. — Mi defecto es confiar demasiado rápido, creo que lo mejor es no contarle el transfondo además apenas la conozco siento una confianza que no puedo ocultar, pero siento que no es el momento idóneo — medito internamente — Si es de esa manera, no hay problema en que sea como usted dice señor Nodstorm — comenta con una sonrisa que me deja congelado en mi lugar Sin saber que más decir me giro en mi lugar, para encaminarme nuevamente a la puerta para posteriormente abrirla. — Que cambio tan raro... Pienso en lo que me acerco a mi escritorio para terminar mis actividades normales.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD