-¿Estás mejor ahora?-. Eliot fue tan amable como para quedarse sentado a mi lado por los últimos 35 minutos
-Todavía siento la necesidad de golpear a alguien…- suspiro mientras me pongo de pie.
Las personas en el parque ríen, corren, juegan, y yo sólo estoy intentando respirar.
-No puedo ayudarte con eso…- se pone de pie y comenzamos a caminar sobre el césped.
El silencio es tan cómodo que ni siquiera siento la necesidad de llenarlo.
-Debería ir a buscar a quien golpear, ¿cierto?-. Intento sonreír y sí, sus ojos abiertos y la expresión de su rostro me hacen la tarea más sencilla.
-¿Alguien a quien golpear?-
-Claro… podría buscar pelea con alguien y quitarme las ganas…- su rostro incómodo me está alegrando el día.
-No sé si… ¿deberías?-. y estallo en carcajadas.
-Mejor podríam
