La siguiente clase con Eva decidí ser un poco más fría, no le preste demasiada atención y los pocos segundos que nos miramos fijamente fueron solo para asegurarme que estaba entendiendo. Sentí como cada vez estaba más tensa y una expresión de confusión reino en casi toda la lección. Les quiero aclarar que yo estaba muerta por tocar a Eva, por besarla, por tenerla, pero quería ver como reaccionaba al verme tan fría y distante, por lo que al final grité triunfo, ella se había dado cuenta. -Profesora, ¿por qué está tan distante esta clase?- siento toda su atención puesta en mí, la miro, con mi rostro más inexpresivo posible y con un respiro casi de fastidio le explico que he tenido una semana agotadora. Mi amada hace algo que no esperaba, me da suaves paseos con su mano en mi hombro, consolá

