Después de terminar la cena ambos nos dirigimos a nuestros departamentos, aunque de un modo extraño sentía un comportamiento raro en el sobre todo al insistirle para subir a su domicilio y que de una forma enfática se negara, indicándome que estaba exhausto y que deseaba descansar.
Debido a la venta que debía realizar tuve que despedirme de mis autos. En vista del valor que tenían pude obtener una gran suma, sin embargo, al no ser suficiente tuve que desprenderme de gran parte de los ahorros que mantenía, de esa manera pude obtener la cifra correspondiente.
De acuerdo al lapso de tiempo previsto nos citamos en un café para entregar la suma en su totalidad. Ante esto estaba eufórico, mencionando que estaba agradecido por la ayuda que le prestaba.
Su trato hacia mí a pesar de ser
