Yasserley.
La arrincono contra la pared besándola con ganas, la alzo en mis brazos haciendo que sus piernas me rodeen, me rodea con sus brazos para sostenerse mejor y ya me estoy volviendo loco de deseo.
Llegamos a mi habitación a los tropezones y sinceramente no tengo idea de como hice para subir con ella en brazos y no ver una mierda donde no dejo de besarla, la acuesto en la cama subiéndome arriba, Dios que me revuelve todo esta mujercita hermosa, la desnudo en dos segundos y me ayuda a sacarme la ropa también aprovechando de tocarme el pene que ya está que explota, la giro poniéndola de rodillas y bien en el borde de la cama así estoy cómodo y las alturas pegan, entro despacio y grita medio asustándome.
—Yas.
—Me voy a mover un poco más.
—Aagg. —avanzo un poco más y su cuerpo se
