TRES AÑOS ANTES. ESMIRNA, PROVINCIA DE TURQUIA. —Estás segura de que quieres hacerlo. —Es mi sueño, aunque no le digas a mi madre. Ismail sonrió. —¿No le gusta la idea? —Ella quiere que me case con un hombre que tenga posición y que pueda brindarme la vida que merezco y a la que estoy acostumbrada. Mi padre le apoya, pero no les culpo ¿Sabes? Somos parte de un mundo donde las conexiones los son todo y donde ellos están acostumbrados a desenvolverse—explicó mientras sujetaba un par de libros—. Tengo un plan. Le haré pensar que todo se hará como quiere para mantenerme en paz con ella y cuando llegue el momento, le diré que me iré a Londres. Detuvo su andar y el chico la imitó. —¿Y tu hermano que piensa? —Erkan me apoyará—aseguró—. Como siempre. Mientras ambos conversaban, escu

