Sonrió.
—Nada me detendría de hacerlo de nuevo.
—Eso me queda claro.
—El Meclis es el menor de mis problemas cuando tenemos un traidor entre nosotros. Manejaremos este tema con calma. Déjame atenderlo por mi mismo. Mis ojos ya están en búsqueda del culpable. Es cuestión de tiempo para que sea encontrado y entonces, ajustaremos cuentas. Erdem tampoco debe ser descuidado. La muerte de los Tamer me hizo tomar precauciones también. Las cosas se moverán de más de aquí en más, especialmente si viene desde arriba. Confirmaré si Erdem tuvo algo que ver en todo esto y si es así, le enviaré nuestros saludos.
Llevaba analizando sus movimientos muy de cerca. Si no lo detenía ahora, más adelante, cualquiera que pensaría que podía iniciar una guerra con la Turk y no era de esa manera. No podía p
