BEHIRHAM

1018 Words

—Ya lo tenía en mis manos. El plan era completamente perfecto de no haber sido por la ramera de Kirina—espetó Zayd mientras bebía a su hermano, metido en aquel conjunto de seda color crema, acercarse a poner unos cubos de hielo, a su vaso de crista. Adnan levantó la mirada. Llevaban horas mirando estados de cuenta y hablando sobre lo diferente que sería si hubieran ganado la disputa en la mesa. —Es una perra que no sabe con quien se mete ni tampoco conoce límites. Debería dedicarse a tejer o a enviar dinero y agua a los niños hambrientos del África. Es su papel como mujer. —Eso no pasará. Tu sabes perfectamente que Samir la adora, siempre ha sido así. Se dedica a protegerla como si fuera un perro guardián y yo realmente creo que nuestro hermano no es tan santo como aparenta—bramó entre d

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD