Las manos de Christopher se entrelazan en el cabello de ella, le sujetaba con fuerza y ferocidad. Y por obvias razones no paraba de besarla mientras que sus manos bajaban lentamente acariciando cada parte de su cuerpo.
Él termina de desalojar la ropa que ella tenía puesta y ella se siente un poco cohibida.
Pero la mirada de él era una mirada cargada de deseo como si estuviera disfrutando lo que veía.
Él no dejó de besarla pero esta vez no la besaba con ferocidad, esta vez la besaba con cautela, lentamente haciendo que el cuerpo de ella despertara sin poder detenerse.
Elena se dejó llevar por completo, lo que estabas sintiendo era indescriptible, era algo que no podía explicar y que nunca claramente había sentido, ella aprovecha también y tocaba, sentía los brazos potentes de él.
Christopher dio media vuelta dejándola debajo de su cuerpo allí bajo dejando un reguero de besos hasta llegar a su ombligo, ella cerró los ojos sintiendo la excitación de la que tanto él hablaba y dándose cuenta certeramente de algo…Patrick no le despertaba ni un poco de lo que Christopher con un solo beso hacía.
Christopher bajó lentamente la ropa interior que ella tenía puesta, Elena por el instinto tapa su vientre, pero él con sus manos la separa evitando que ella lo siga haciendo.
—No lo vuelvas a hacer, al menos no conmigo… eres perfecta.
Esas palabras le dieron un regocijo en el estómago a ella. Una de sus reglas era que no se podían enamorar, pero evidentemente usaba palabras que de las cuales cualquier mujer podría enamorarse… definitivamente sus actos no eran muy coordinados con lo que hacía.
Él bajó y comenzó a dejar pequeños besos regados sobre el vientre de ella, Elena cierra sus ojos al sentir el contacto de la lengua de Christopher directamente en su zona sensible, él la besaba con inquietud y lamía cada parte de ella generando gemidos constantes.
Él la sostiene de las manos evitando que ella mueva su cabeza tratando de separarlo cuando pequeños espasmos se apoderan de ella, esa necesidad de poder retirarlo de allí o de poder tenerlo tan cerca para que siga haciendo lo que está haciendo es inconfundible.
El cuerpo de Elena comienza a convulsionar, es una sensación completamente placentera y ella solo puede torcer sus ojos y apretar los labios mientras que sus manos se sujetan de los cojines del sofá pidiendo y pidiendo más Christopher por su parte sigue succionando cada parte de ella y con sus dedos al tiempo entrando y saliendo rozando lentamente su clítoris, bebiendo todo lo que ella desprende hasta que comienza a temblar sin detenerse y el clímax llega y la atrapa fácilmente.
Elena gira su rostro en estos momentos cuando su respiración se está acostumbrando y volviendo a la normalidad se siente un poco cohibida un poco expuesta ante él quien todavía está vestida mientras que ella no solamente está desnuda sino que también acaba de sentir un gran orgasmo.
Cristopher se levantó un poco y haciendo que ella los mire mirándola fijamente lame sus labios y mete el dedo empapado de ella su boca saboreando eso hace que las mejillas de Elena se pongan completamente sonrojadas.
—Que tal —le pregunta él, ella mueve su cabeza—. Necesito que me digas si eso te dejo satisfecha, si quieres más necesito que te comuniques conmigo, porque esta es una de las maneras en las que yo podré saber que quedaste satisfecha. Necesito saber si te gustó.
Un manojo de nervios a poder a donde ella hablar de eso tan abiertamente no era algo que le apetecía mucho pero al fin y al cabo esto solamente era algo de sexo y posiblemente ella se cansaría y se iría.
—Me gusto, en realidad me gustó
—Perfecto, pude notarlo pero para mí es importante que me lo digas… Elena no quiero silencio, no quiero que evites hablar, decir gritar o gemir. Tus gemidos son música y la mejor manera en la que pueda sentir que estás disfrutando.
—La tendré en cuenta. Eso es nuevo para mí, no sé qué hacer, no sé cómo actuar, y me considero muy muy demasiado inexperta.
—Encantado de ser el profesor él estrecha su mano con seriedad Elena sonríe y hace lo mismo
Christopher comienza a quitar su ropa y Elena ha quedado un poco boqui abierta con lo que tiene el frente y vaya que sí, la ropa ocultaba muy bien lo que había debajo.
Él continuó besándola cuando estaban completamente desnudos y la besaba sin piedad. Ella le tocaba y eso electrificó por completo una parte de ellos. Él se acomoda en medio de las piernas de ella, para luego ponerse su preservativo y penetrarla fuertemente.
Ella se sobresalta al momento en el que él estaba dentro de ella los besos se vuelven lentos cuando él intenta que ella se acople un poco a esto.
Ella comienza a gemir y eso solo lo toma como la mejor invitación para poder moverse como más le gusta. Él comienza a mover sus caderas mueven tus lentos rápidos…movimientos que tocan ciertamente cada parte de ella y que la censura sin control
Ella mueve su pelvis también, generando mayor flexión entre sus cuerpos. Ellos que comienzan a mover rápidamente una y otra vez las manos de ella aprietan por completo la espalda de él, unos cuantos minutos después ambos explotan ella cierra sus ojos hija y exhala con profundidad mientras que él pone una sonrisa llena de maldad, convencido que ella se podrá convertir fácilmente en una gran obsesión para él.