La Socia Del Tirano

Resort

PDV Sarah

El barco en el cual estábamos, atraco en el puerto de la isla, apenas llegamos, me tuve que separar de Daniela, recibi varias mirada envidiosas de los demás emprendedores que estaban a mi lado.

Pude suponer que estaban imaginando que ya eramos amigas, y seguro que nos iban a tachar de “amiguismo” o algo asi, no había pasado ni 1 dia y ya teníamos la enemistad de todos aquí.

Quizas debi haber traído mas personal con nosotras, el resort era enorme, y solo con Daisy a mi lado no iba a ser suficiente cuando los demás nos detestaban sin razón.

Le eche una mirada a Dante, este ultimo seguia con Daniela, la tipa no se lo quitaba de encima, eso me molesto un poco, pero sacudi la cabeza y me enfoque en lo importante.

No era tiempo para pensar en nada de eso y menos en hombres, teníamos que concentrarnos en el concurso.

Quería impresionar a Daniel y obtener el contrato con el “grupo Durant”.

—Sarah, vamos, quiero conocer la isla, me dijeron que todo iba a ser gratis aquí, ¡Gratis! Vamos, rápido, quiero ir por todos los buffets —solto Dalia emocionada.

Parecia una niña que entro en una dulcería, pero le segui el juego y las 2 juntas despues de dejar nuestras cosas al personal del hotel donde nos íbamos a quedar, de inmediato nos fuimos a ver que tenia para ofrecer este sitio.

El hotel donde nos íbamos a quedar, era de 5 estrellas, nuestra habitación estaba en la parte mas arriba, en la zona de los pent-house.

El grupo “Durant” les había dado a todos los emprendedores finalistas un pent-house propio, ese despilfarro de dinero solo podria hacerlo una multinacional bastante rica, empresas mas pequeñas no gastarían tal cantidad en solo un grupo de desconocidos.

Dalia y yo entramos a nuestra habitación, y esta ultima solto un grito de asombro, era la primera vez que estábamos en un sitio tan lujoso como este.

Solo la sala del pent-house era mas grande que nuestro departamento, y eso que aun no habíamos visto las habitaciones y todo lo demás.

El balcon daba vista a la isla, Dalia fue emocionada a ver todo lo que el sitio tenia, yo en cambio me fui y asome hacia el balcon, y pude ver todo desde aquí arriba.

La isla desde esta altura se veía un poco pequeña, pero estaba llena de personas, parece que era un sitio turístico, pude ver varios hoteles mas a la distancia, y gente caminando de aquí para allá y aun mas en las playas, con muchos chicos surfeando olas.

Me senti un poco rara, nunca espero que llegaría a estar en un sitio como este, incluso cuando funde “Pear” junto con Dalia despues de graduarnos de la universidad.

—¡Sarah! ¡Sarah! ¡Ven a ver esto! —grito Dalia desde atrás.

Deje el balcon y fui a ver lo que quería, y la encontré mojando los pies en un Jacuzzi bastante grande que estaba en medio de otra sala que estaba al final de un corredor.

Joder, los lujos que se daban los ricos… con razón todos querían serlo….

Dalia ya quería darse un baño alli, de hecho, no espero nada y entonces se quito su ropa, y se quedo en ropa interior y asi mismos se lanzo al agua.

—¡Esta fría! —grito como niña antes de salirse de alli.

—Por supuesto que lo esta tonta, primero tienes que encender el calentador, si que eres tonta —le dije antes de caminar hacia ella.

Encendí el calentador del jacuzzi, y pude ver como las burbujas estaban poco a poco apareciendo en el agua, Dalia la toco con timidez, y entonces se metio, yo no me quede atrás y al final también me quite la ropa y luego de eso me lance al agua junto con Dalia.

Las 2 juntas pasamos nuestro tiempo alli antes de salir y luego nos vestimos y salimos para conocer el resort.

Aun faltaba tiempo para empezar con el concurso, asi que antes de que eso pasara, bien podríamos disfrutar.

Aunque antes de que pudiéramos irnos, en la recepción nos encontraron una pequeña tarjeta que según era de nuestra parte.

—¿Quién le dijo que nos entregara esto? —solte a la recepcionista.

—Es de parte de un hombre, no me dijo su nombre, pero me dijo que le entregara esta tarjeta y que lo llamara si tuviera alguna duda y quisiera alguien que le diera respuestas —dijo la chica.

Le di las gracias en ese momento y Dalia y yo miramos la tarjeta, en ella estaba escrito el nombre de Dante.

—Asi que fue él —pense.

Era su tarjeta de negocios, pude notar que alli se encontraba el nombre de su empresa o grupo empresarial, tenia un nombre un poco raro, seguro que lo invento cuando estaba mas joven y tenia una mente hiperactiva.

Me guarde la tarjeta y la puse en mi bolso para no perderla, Dalia alzo la ceja al verme hacer eso y me dijo que lo llamáramos ahora.

—¿Para que vamos a hacer eso? Me dio su tarjeta para llamarlo por las dudas, no para molestarlo a cada rato.

—Oh vamos Sarah, el tipo te dio su tarjeta, tenemos que aprovechar, por lo que vimos, él y Daniela son bastante cercanos, vamos, tenemos que aprovechar esa conexión, oportunidades como esta no llegan 2 veces en la vida —me dijo.

…

—Si no lo haces tu, lo hare yo.

—Primero vas a tener que sacarme la tarjeta de encima.

—¿Crees que no puedo? Además, seguro que espera que lo llames.

—Si, aja, como no.

—Sarah, el tipo te te ah dado 100.000 dólares de a gratis, y apenas nos encontramos, lo primero que haces es presentarte a la jefa del concurso y ponerse a tu favor, y ahora hasta te da su tarjeta… ¿En serio no ves las señales?

…

—Si me dices que no, te voy a dar un golpe, nadie puede ser tan lenta.

—Dalia, él no esta interesado en mi de esa forma, no seas ingenua.

—La ingenua eres tu que no te das cuenta, cielos, las señales se ven desde el espacio.

—Dalia, él lo único que quiere es solo mi proyecto ¿Si? lo mas seguro es que quiera comprarlo para su empresa y apropiarse de ello, no lo voy a dejar.

—Vamos, ¿En serio eso es lo que piensas? Yo creo que esta mas interesado en lo que tienes entre las piernas que en ese aparato inutl que falla a cada rato.

—¡Dalia! ¿Si sabes que hablas del proyecto de mi vida?

—Si, ¿Me vas a negar que esa cosa falla siempre?

—Pues… no siempre, además ya lo arregle asi que ya no falla tanto.

—Pero aun lo sigue haciendo ¿No? ¿Y piensas que eso le llamas mas la atencion que tu?

—Dalia, no seas ingenua, tipos como esos tienen mujeres por montones ¿Si? lo mas seguro es que justo ahora él y Frank se esten divirtiendo con todo un batallón de mujeres de la isla, son 2 tipos guapos y ricos, seguro que hasta ya están hartos de las tipas que los acosan, yo solo soy una mas del montón.

—Con esas palabras si que no lo vas a atraer, tienes que empezar a tener mas confianza.

—No se trata de confianza, se trata de tener los pies en la tierra, ¿Ya viste a Daniela? Ella esta varios puntos por encima de nosotras, y seguro que Dante esta acostumbrado a muchas chicas asi, el dia que yo le llame la atencion será cuando los cerdos vuelen, no pierdas tiempo en eso y mejor concéntrate en lo importante —le dije.

—Eso hago, aquí debe haber mucha gente rica, mi futuro esposo me debe estar esperando justo ahora allá afuera.

—…

—Mmm, pero bueno, si tu no quieres llamar a Dante para atraerlo hacia ti… tendremos que usar otras medidas —susurro Dalia.

—¿Cómo?

—Nada, nada, ven, vamos a ir a la playa, tenemos muchas cosas que hacer antes de que nos pongamos a trabajar.

Dalia me tomo del brazo y luego de eso me jalo con ella y me llevo donde quiso, no le dije nada y le segui el juego.

En poco tiempo llegamos a la playa, nos habíamos puesto una ropa ligera para la ocasión, Dalia se puso una ropa un poco mas apretada, las curvas se resaltaban aun mas con lo que tenia puesto justo ahora.

Yo en cambio me decidí por algo mas holgado, aun que aun asi Dalia me hizo usar un traje de baño que tapaba con una falda, senti como mis nalgas se salían en la parte de atrás.

No debi dejar que Dalia escogiera por mi, esta ultima me tomo de la mano para buscar un sitio donde dejar nuestras cosas.

En el camino vimos varios sitios para acomodarnos, a pesar de que había mucha gente en la playa, había espacio suficiente, pero Dalia no estaba conformo con ningun sitio y quiso que siguiéramos caminando, parecia buscar algo.

—Dalia, ¿Hasta donde vamos a llegar? Ya hemos visto buenos lugares buenos alli atrás.

—Si, si, pero no debemos conformarnos, recuerda que estamos en la etapa mas alta de nuestra vida hasta ahora, asi que mínimo necesitamos el mejor lugar para ambas, no me conformare con menos.

Negue con la cabeza, a veces tenia ocurrencias como esa, no le tome importancia.

Lo malo fue que recibíamos muchas miradas de los hombres mientras íbamos por alli, Dalia tenia una ropa que dejaba ver su cuerpo por lo que adonde fuera llamaba la atencion.

De hecho en el camino algunos hombres intentaron hablar con nosotras, Dalia los rechazo de inmediato, eso fue raro, normalmente ella seria la primera en seguirles el juego para ver que podía sacarles mas adelante.

Al final pude darme cuenta del por que tenia un comportamiento como ese cuando pude ver a Dante, en compañía de Frank y Daniela en un sitio algo apartado de la playa, donde los 3 estaban juntos.

Apenas note eso, me detuve en seco, y le di una mirada a Dalia, esta solo me sonrio y luego de eso, me tomo del brazo y quiso arrastrarme en esa dirección.