— Hannah, tienes que calmarte. Ahora regresa a la camilla, necesitamos chequearte. — Me siento bien, sabes que la peor parte se la llevó Matteo ya que quedó encima de mi. — Haremos lo imposible por ambos, pero por favor regresa a tu lugar. Acepté ya que ahí solamente estorbaba, cuando lo hice me hicieron varios estudios. Luego de comprobar que todo estaba en orden me trasladaron a una habitación, pero no sabía nada de Matteo. Esto me puso intranquila cuando decidí irme para averiguar qué había pasado con él Peter entro. — Hannah, ¿Qué haces de pie? Deberías estar descansando. — Necesito saber qué ocurrió con Matteo. — Matteo está en otra habitación, ya se encuentra estable. Así que regresa a la cama porque lo que te pasó no es jugando, sigues viva de milagro. — Me tranquiliza saber

