Apariencias que engañan

5: No hagas esto

Perspectiva de Hannah.

Luego que llene las hojas que debía llenar fui donde la familia ahí se encontraba un muchacho cuando me acerque le explique todo de la mejor forma posible sin embargo se puso a llorar

— No se preocupe que mis compañeros están trabajando para averiguar quién es y atraparan al culpable.

— Eso espero.

Me levante y a la hora de almuerzo me encontré con Matteo entonces fuimos a comer a unas cuantas cuadras del laboratorio había una mesa

— ¿Cómo va con la investigación?

— Estamos avanzando ya hay algunos sospechosos del caso.

— Realmente espero que capturen al culpable. No me explico cómo pueden sentirse tranquilos cuando saben que privaron a alguien de vivir, pareciera que la conciencia se les murió hace mucho tiempo.

— Al trabajar en este medio te encontrarás con muchas personas, así que nunca confíes en nadie.

— Supongo que tiene razón, pero haré una excepción con alguien.

— Sin excepciones, Hannah.

— Lo siento, pero no me convencerá de lo contrario. Hay una persona en la que confío plenamente.

— ¿Quién es esa persona?

— Es usted — ella sonrió y él le preguntó si era en serio — si…. Usted se ha portado muy bien conmigo y sé que mientras esté a su lado nada me puede pasar.

Perspectiva de Matteo

Ella era muy confiada pero al menos yo no la traicionaría y trataría de cuidarla porque hay muchas malas personas que pueden hacerle daño.

— ¿Le gustó el almuerzo?

— Si cocinas muy bien, ¿Cómo dormiste?

— Por un momento pensé que estaba acostada en una nube su cama es muy suave

— Exageras — me reí y ella me miró con una sonrisa — pero me alegra saber que descansaste

Hannah terminó de comer y mientras yo comía, llegó Dylan con el resto.

— ¿Qué estás comiendo?

— Es comida que preparó Hannah, no sé cómo se llama.

— Son rollos de huevo, se preparar otras cosas referentes a la comida asiática pero necesito ingredientes que no se encuentran aquí. Por favor no me pregunten cómo sé cocinar porque creanme que no es agradable la historia.

Dylan tomó de mi comida entonces se sorprendió.

— Hannah esto está delicioso — Dylan se acercó a ella y le tomó sus pequeñas manos entonces la miró fijamente — ¿Quieres casarte conmigo?

Ella al escucharlo abrió sus ojos y se puso muy roja entonces se escandalizó, al soltarse de su agarre se cayó de la banca.

— Hannah, ¿Estás bien?

Ella se sobaba sus caderas entonces yo me acerque y le ayude a levantarse luego se colocó detrás de mí asustada, parecía una niña.

— Dylan, deja de decirle esas cosas a Hannah que la asustas — lo miré con reproche — no puedo creer que digas esas cosas como si fuera un juego.

— Lo siento — él rió nervioso — pero su comida es deliciosa, podría comer eso todos los días y la única forma es casarme con ella.

— Le agradezco que diga eso pero no es necesario que se case conmigo para probar lo que cocino. Puedo hacer un almuerzo mañana para usted.

Aunque le dijo eso ella no salía detrás parecía una niña miedosa

— Está bien. Discúlpame por ser tan impulsivo y no me tengas miedo

Dylan le extendió la mano pero ella tomó mi camisa muy fuerte, pobre, todo lo que había pasado la dejó con demasiados traumas y no podía culparla.

— No le tengas miedo es una buena persona aunque muy atolondrado, toma su mano.

— Está bien si usted lo dice

Hannah tomó su mano entonces sonrió realmente ella confiaba en mí.

— A mi mejor amiga le gustaban los rollos de huevos, aunque no podíamos comerlos con tanta libertad — sus ojos se nublaron — de vez en cuando lograba esconder unos y se los daba.

— ¿Qué ocurrió con ella?

Hannah se puso un poco incómoda así que decidí intervenir, todo lo que pasó fue muy doloroso.

— ¿Qué les parece si mañana comemos todos juntos?

— Si Hannah cocina, no tienes que decirlo dos veces.

— Está bien, cocinaré mañana.

Ella sonrió y luego nos marchamos una vez que continúe con los análisis descubrí al asesino así que lo lleve esposado.

Perspectiva de Hannah

Estaba con el familiar de Ángela cuando Matteo paso con un hombre esposado entonces él se fue corriendo pude ver que llevaba una navaja

— Señor no lo haga — salí detrás de él entonces lo tomé por la cintura y lo detuve a tiempo — por favor deténgase, estoy segura que su hermana no habría deseado que hiciera esto.

— Usted no sabe lo que es perder a una persona muy importante en su vida. No tiene idea del dolor que llevo por dentro así que suélteme.

Él me empujó entonces yo caí al suelo, cuando iba a apuñalar al asesino de su hermana fue que le tomé de la pierna.

— Sé lo que es perder a una persona importante y el dolor que usted siente, al menos ella no murió frente a sus ojos.

Cuando me escuchó se detuvo, entonces yo le tomé la navaja. Mientras la soltaba la retuvo por un momento y me corté.

— ¡Hannah! — Matteo me miró asustado — espera un momento.

Un oficial de policía se llevó al asesino y llegó otro para llevarse al hermano de la víctima, mientras que Matteo sacó un pañuelo y lo presionó contra mi herida.

— ¿Estás bien?

— Solamente fue una herida superficial, no se preocupe.

Me ayudó a levantarme y luego me llevó a la morgue.

— Espera un momento — Matteo me miraba angustiado — veré que puedo hacer para ayudarte.

— Solamente páseme un equipo de cirugía menor, se encuentra en aquella gaveta — señalé al fondo — el resto lo haré yo — él fue a buscarla entonces cuando me la llevo saque todo lo necesario para suturar y Matteo me preguntó si no tenía miedo de hacerlo — no. Cuando habían personas heridas yo me encargaba de suturarlas, en muchas ocasiones pude salvarlas pero en otras no ya que estaban infectadas y no había el medicamento indicado para tratarlos.

Cuando me coloque la anestesia comencé a suturar entonces Matteo me miraba atentamente

— Realmente eres arriesgada, mira que tomar de esa forma a ese muchacho, nadie lo había hecho hasta ahora.

— No le veía la razón por la cual se tendría que derramar más sangre que la que ya había, es ilógico.

Luego que termine de retirarme me vende entonces Matteo se sintió más aliviado, realmente él había sido mi ángel guardián.

— Discúlpame pero tengo que ir a hacerme cargo del papeleo.

— No se preocupe, yo estaré bien.

Matteo se marchó y luego yo salí de la morgue necesitaba ver al hermano de la víctima. Al llegar me miró apenado.

— Por favor ábrame, necesito hablar con él — el oficial lo hizo entonces yo entré a la jaula cuando estuvimos frente a frente le sonreí — no pienso levantar cargos contra usted pero por favor no cometa una imprudencia nuevamente.

— ¿Qué le ocurrió para que me dijera que al menos no había visto morir a mi hermana?

— Vengo de un lugar muy desagradable en el que nadie debería estar, ahí mire un suceso no muy agradable y no hay día que no lo recuerde, es muy difícil para mi.

— Le agradezco por haberme ayudado y tiene razón, mi hermana no habría querido que matara a ese hombre.

— Hablaré con Matteo, estoy segura que él lo ayudará para salir de aquí.

— Discúlpeme por la herida que le hice, espero que mejore…