Harry
-¡esa mujer es una ramera!, como puedes estar con una mujer como ella, una cosa es que te la cojas de vez en cuando y la repartas a tus socios como la puta que es, pero que vivan juntos y duerman juntos eso ya es mucho- escucho los gritos de mi padre, estoy tranquilo en su oficia, ¿por qué me mandó a llamar?. Sabiendo la relación que tenemos.
-lo que haga con mi vida no es tu problema padre- me levanto, ¿cómo puede expresarse de Eda así?, si ni la conoce.
-me importa tu reputación que es la mía también- esta es la gota que derramó el vaso.
-te dejo algo muy en claro Thomas, yo con mi vida hago lo que se me da la gana, hace mucho que dejé de ser tu hijo- me mira enojado
-por desgracias eres mi hijo hasta el día en que yo muera, soy tu padre, trátame como tal- grita
-ese título no te queda para nada, ¿padre? Cuando fuiste realmente eso en tu vida- como puede ser tan sínico en este momento, aún recuerdo cuando era pequeño y este hombre me golpeaba en cada ocasión que tenía, diciéndome que era un bastardo, que él nunca quiso ser padre y que por eso no me consideraba sangre de su sangre.
-no te quiero ver junto a esa zorra, que se le ve por encima que es una trepadora- me tira las fotos en donde Eda y yo estuvimos días atrás en aquella fiesta.
-¿me mandaste a seguir?- rompo la fotos y se las tiro en la cara
-que más esperabas ere un Death, y no podemos relacionaron con sanguijuelas como lo es esa mujer- tengo gana de tirarlo al piso y romperle la cara, pero me detengo.
-ella no es nada de eso, es más decente que tú- se comienza a reír
-esa cabaretera ¿mejor que yo?, no me hagas reír- saca otras fotos- mírala, ese es el lugar al que pertenece, creíste que no lo sabía yo me entero de todo hijo- miro las fotos en la que Eda está bailando en ese maldito bar, ver esas fotos me enferma.
-tu no mandas en mi vida, dejé ese maldito infierno hace muchos años así que no vengas a decirme lo que debo o tengo que hacer con mi vida- rompo estas fotos al igual que las anteriores
-eso dáñalas, pero ni haciendo eso vas a ocultar con la clase de perdida es con la que estas-
-si ya terminaste de hablar, es mejor que me largue de aquí- lo miro fijamente- y abstente de llamarme, no quiero saber nada de ti solo quiero recibir la noticia de tu funeral- este hombre es mi padre, pero no siento ni una pizca de respeto hacia él, es como si fuera un extraño para mí, a quien extraño es a mi madre
Es una mujer tan tierna y dulce, que cometió el pecado de estar con un hombre como mi padre, como pudo enamorarse de un hombre como este que lo único que inspira odio y aberración.
-dejando a la zorra de lado, quiero que te cases con Alix ella si es una mujer de verdad- tiene el cinismo de imponerme un matrimonio, este hombre se ha vuelto completamente loco
-¿una mujer de verdad?- me rio en su cara- una mujer que para tener lo que tiene hoy en día tuvo que matar a su pareja-
-eso es mentira, solo son rumores-
-primero me pego un tiro antes que eso, o mejor aún, a ella- recalco
Se levanta molesto
-cómo puedes hablar de esa manera-
-si has investigado tan bien a Eda por qué no lo has hecho conmigo, sabrás perfectamente en lo que estoy metido o simplemente te haces de la vista gorda-
-no quiero hablar de eso en este momento, vas a casarte con Alix así tenga que llevarme a esa zorra por delante-
-¿Por qué tu insistencia en que me case con esa mujer?- lo cuestiono
-porque es una mujer decente y muy hermosa, es perfecta para ti-
-no me digas que ya te la cogiste, verdad, porque no me creas estúpido sé que engeñas a mi madre con cuanta zorra se te pase por delante- quisiera que mi madre lo deje algún día como puede estar tan ciega y amar a ese hombre
-como vez me acuesto con cualquier perdida, pero estoy casado con una mujer decente- no aguante más e impacte mi puño en su cara, como puede hablar así y dejar a mi madre con una cornuda.
-mira Thomas Death, a mí no vas a manejarme a tu antojo, por que el niño que golpeabas y manipulabas se acabó, y es mejor que te quites de mi Camino porque voy a olvidar que fuiste quien puso su esperma en mi madre- estoy por cruzar la puerta de su oficina
-estas advertido Harry- cierro la puerta muy fuerte y me lago de ese infierno.
Camino por la recepción y veo a mi madre, ella viene y me abraza fuertemente después de muchos años no tenía este momento con ella, la extrañaba mucho es una mujer muy hermosa y dulce.
-mi niño, que bueno verte- me abraza una vez más y besa mi frente, sus ojos están vidriosos y sé que quiere llorar, pero se retiene
-estas tan alto y guapo, eres todo un hombre- la miro y me doy cuenta de que el brillo de sus ojos a desaparecido, se la ve más cansada y algo apagada, pero aun es preciosa.
-tu estas muy hermosa madre-
-venias de ver a tu padre- mi sonrisa se apaga
-si, y no quiero hablar de eso madre, estoy muy feliz de verte-
-hijo quisiera verte más, no quiero que desaparezcas cariño- coloca su mano en mi mejilla
-lo se madre- tomo mi pluma y anoto algo
-este es mi teléfono y la dirección de mi casa- ella sonríe como una niña
-pero madre, no quiero que mi padre se entere no quiero ver a ese hombre nunca más en mi vida, así que cuando te aprendas el número y la dirección quiero que deseches el papel-
-pero cariño…-
-pero nada madre, y mejor no hablemos más de eso- me da un último abrazo
-te quiero hijo, eres lo más importante en mi vida- salgo de ese lugar y voy directo a la casa
Conduzco solo por el lugar, ¿Por qué mi padre dijo eso?, o aquí hay algo más que desconozco, ¿cómo mi padre y Alix hablaron?
Solo la recuerdo a ella "Linda" esa joven y tierna chica que conocí y que un día fue el gran amor de mi vida.
Pero la vida me la arrebato y de la peor forma, aún recuerdo ese sentimiento.
Pasan unos minutos y llego a casa, escucho unos gritos provenientes de la sala, me apresuro cuando escucho algo romperse.
-¡eres una zorra!- ingreso a la sala
-¡que me estás diciendo!, no es mi problema que tu señor ya no te haga caso- estas mujeres están halándose de los cabellos
-¡señor!, que bueno que al fin llegó no puedo separarlas- me acerco a ella y tomo a Eda en mis brazos
-no, ¡suéltame, Harry!, esta mujer tiene que empezar a respetarme- tiene el cabello alborotado
-es suficiente-
-no me importa si te revuelcas en la cama con ella, por mi pueden seguir haciéndolo pero que a mí me deje en paz- veo a Lura y ella agacha la mirada, creo que siente vergüenza.
Aquí la única que debería sentir vergüenza es Emily por comportarse de tal manera y yo.
-es suficiente- no la suelto, es como una fiera
-Emily quiero que empieces a respetar a Eda, y comportarte como lo que eres una empleada más en esta casa, nada más-
Me llevo a Eda a la habitación y como siempre se resiste
-¡suéltame! Harry- la miro y sin previo aviso la abrazo fuertemente, necesito un abrazo en este momento, son tantas cosas las que han pasado hoy, necesito un poco de paz
-¿Qué te pasa?- pero no me aparta, tengo que proteger a esta mujer con mi vida si es necesario
Siento un líquido recorrer mi mejilla, Eda se aparta.
-estas bien- su mirada es de preocupación, siento como se pone puntillas y besa mis mejillas junto con mis lagrimas
-tranquilo yo estoy aquí Harry, cuando lo desees-
La acerco más a mi cuerpo, ella me sienta en la cama y se sube a mi regazo
Besa tiernamente mis labios y me abraza una vez más, coloco mis manos en sus caderas y las presiono un poco, necesito estar con esta mujer, es como una droga para mi
-es mejor que te des un baño, sí- con sus manos alborota mi cabello
-si, es mejor que nos bañemos juntos-