Nos falta un titulo

Primer año- Parte 1

Cuando fui contratada como asistente por la cadena hotelera XPRINCE me imaginaba corriendo por los pasillos de los hoteles, viendo temas de hoteles como asistente del administrador o algo parecido ya que cuando pasé entrevista fue en un salón muy elegante de una hotel ubicado en el centro de la cuidad. Pero cuando me indicaron para informarme que el puesto era mío, me citaron en las oficinas que se encontraban en otro lugar que no eran los hoteles.

Mi primer día de trabajo transcurrió aparentemente con tranquilidad, me informaron las labores que tenía que realizar, los horario entre otras labores. La asistente que reemplazaría se retiraría ya tenía como 50 años creo había trabajado con su padre más de 20 años como su asistente, el Sr. Arturo Moore le dejaría la gerencia a su hijo mayor Thiago que así me indicaron que se llamaba e iba a ser mi jefe, mientras hacíamos el relevo de temas laborales me comento que el Sr. Moore era una persona muy amable y con buen carácter así que supuse que mi jefe su hijo era igual y que tendría un jefe perfecto, pero no la vida nunca es fácil y menos regalada. En esos después de la hora de almuerzo, apareció el mayor tormento de vida mi jefe don gruñón, Alicia y yo amabas lo saludamos cuando lo vimos entrar, el solo nos dio una mirada seria y se metió a la oficina y a los minutos salió.

-        Sra. Alicia, necesito el último informe financiero de la empresa y los temas pendientes por resolver como un listado también de los relevos que le hará a la nueva asistente.

-        Y usted que me está mirando, consígame un te o café bien cargado, rápido. Lo mire de perpleja y solo atine a seguirlo mirando.

-        Me dice a mí. Le digo señalándome

-        Si a ti a quien más o acaso eres invisible o tonta.

Mentalmente le daba un puñetazo por sus palabras groseras que salían de su boca. Solo me di media vuelta sin responderle y me fui a prepárale su café cargado quise echarle un montón de azúcar a ver si le endulza un poco el alma amargada pero no quería que me despidieran así que descarte esa idea.

Toqué la puerta unas tres veces, pero nadie respondía así que decidí ingresar a la oficina y fue una mala decisión.

-        ¡¡Sal de la oficina!! Quien te dio permiso de entrar

-        Sr Moore toque tres veces

-        Y porque tocaste crees que puedes ingresar así por así

-        Sr disculpe solo le traía su café cargado

-        Ya no quiero nada, ha puesto igual que esta horrible y aparte ya se debe haber enfriado

-        Pero…. Sr……

-        Lárgate acaso no entiendes

Lo que mi mente solo pudo creer es que ese hombre está muy loco, Alicia se acercó a mi poniendo su mano en mi hombro y mostrándome un sonrisa

-        Niña, tenle mucha paciencia y suerte

-        Gracias Sra. Alicia, espero tenerla

Y así continuo mis labores hasta las 6 de la tarde, las cuales miraba el reloj y solo quería salir corriendo, casi después de ese grito el pedía información tras información, pero la que entraba a su oficina era Alicia, espero unos 10 minutos más y decidí tocar su puerta varias veces y no sabía irme o no, pero estaba cansada así que decidí coger unas notitas y pegarla en la puerta de su oficina indicándole que me retiraba.

Al llegar a mi departamento me tire al sofá, me quite los tacones y fui feliz respirar aire puro, al momento siguiente estaba en el piso al sentir un dolor en las pompas ya que me caí del sofá y no sé en qué momento me quede dormida, cuando vi la hora me percate que eran cerca las 10 de la noche así que decidí prepararme algo de cenar y luego tomar un baño relajante y a dormir nuevamente, pero esta vez en mi cama para no caerme.

Al escuchar mi querida alarma no dude en alistarme para el trabajo y con toda la motivación posible para poder empezar el día con el pie de derecho, al llegar a la oficina, empecé a arreglar el escritorio de mi jefe y el mío preparar la cafetera y algunas cosas para tener todo listo ante su llegada, pero he ahí mi conflicto mi jefe llegar minutos antes de los 8 de la mañana con la cara de amargado como el día anterior.

-        Buenos Días Sr Moore.  Y así recibí la primer rechazo de mi jefe en la mañana

-        Es un maleducado. Pensé, debería llamarse don gruñón en vez de Sr Moore, que fastidio.

-        Srta. Nandez. Grito don gruñón

-        Necesita algo Sr Moore. Le dije al ingresar a su oficina

-        Cuantas veces le voy a repetir que si no le autorizo la entrada a esta oficina no se ingrese.

-        Como escuché su grito hasta afuera supuse que….

-        No me interesa sus excusas dígame quien se metió a mi oficina, todo mi escritorio esta…. Lo decía mientras con los dedos frotaba sus frente, creo que ya se estaba poniendo morado, quería salir corriendo, pero mis pies estaban pegados al piso.

-        Sr Moore yo en la mañana arregle su escritorio y lo limpie lo que pasa es que Alicia…………  y dale con que no me deja terminar de hablar, que bárbaro con este hombre.

-        No me interesa que le haya dicho Alicia usted trabaja para mí, no la quiero volver a ver metida aquí por nada del mundo a menos que sea que yo le ordene o autorice. Espero que me esté entendiendo.

-        Ok, Sr Moore. Con permiso

Y mi segunda llamada de atención en la mañana, con fe que el día continúe igual, aunque la verdad no sé qué cosas más terribles puedan pasar. Creyendo que si continuaba así me volvería loca pero aun eso no pasa ni pasara sin embargo mis días continuaron igual con varios informes, preparar la sala para reuniones y coordinar visitas o revisiones, supervisiones en los hoteles en el país.  Después de llegar a mi departamento decidí tomar un baño relajante, con mucha espuma, música de fondo y eso estaba haciendo cuando mi momento de relajación fue interrumpido con el sonido de teléfono, lo ignore ya que era un número no registrado, coloque de nuevo la música, ¡pero el teléfono sonó nuevamente demonios! Quien me arruina la noche.

-        Hola. ¿Quién habla?

-        Srta. Nandez….

-        Si soy yo, pero ¿Quién es usted? Aunque la voz se me hacía conocida intente que le me lo diga

-        Soy su jefe Thiago Moore

-        AHH!!! Pero….

-        Pero nada, no entiendo como no tiene mi número grabado. Le llamaba para indicarle que mañana la espero en la oficina a las 7 am.  >

Como se le ocurre colgarme, no es que nos pongamos a conversar, pero hasta por teléfono es un don gruñón, señor paciencia, al final decidí terminar mi sesión de baño, me prepare algo para cenar e irme a descansar ya que mañana tendría que madrugar.

Al llegar a compañía lo cual fue unos minutos antes de las 7, mientras esperaba la aparición de don gruñón arregle mi escritorio y fui a los servicios a arreglarme un poco el cabello ya que pareció un loca con algunos cabellos parados, cuando salí vi a mi jefe saliendo del ascensor al cual me acerque para saludarlo el cual me miro me ignoro “no es novedad” y entro a su oficina no sin antes darme indicaciones

-        Srta. Nandez la quiero lista en 3 minutos no más

-        Si

-        Lleva una libreta, agenda o lo que sea necesito que tomes nota de todo lo que te indique

Me alisté lo más rápido que pude, salimos de la compañía con rumbo al hotel para la supervisión, me sentí afortunada por conocer uno de los famoso hoteles XPRINCE y a la vez preocupada por la supervisión a realizar don gruñón, cuando llegamos al hotel ambos bajamos del auto donde en la entrada se encontraban algunas personas para recibirlo, antes de ingresar al hotel me presento con la administradora y luego le dio algunas indicaciones.

-        Srta. Nandez necesito que se reúna con la administradora en la cafetería del hotel y que ambas conversen sobre las mejoras.

-        Sr Moore se las podre mencionar mientras hacemos el recorrido. Comento la administradora

-        No es necesario, haga lo que indico.

-        Srta. Nandez, espere mi llamada

-        Está bien Sr Moore

Mis esperanzas de conocer el grandísimo y famoso hotel fue arruinada, nos dirigimos a la cafetería en la cual la administradora me comentaba todo los problemas, errores, las mejoras entre otras temas del hotel, el cual apuntaba todo sin olvidar nada ya que tenía la preocupación que si olvidaba algo seria colgada de la lampara por don gruñón, mientras terminaba de darles los toques a mis apuntes sonó mi celular era don gruñón así que salí de la cafetería y me dirigí a la entrada del hotel en donde don gruñón estaba por salir, me miro y me indico que me dirigiera a la empresa con un informe con lo conversado con la administradora y que el regresaba en unas horas, subiendo a su auto y yéndose.

Yo me quede en la entrada, mirando el auto que se alejaba. Tome un taxi para la oficina en donde después de almorzar inicie con el informe el cual estaba tan concentrada trasladando la información y puliendo detalles del informe que cuando me di cuenta la eran las 8 de la noche, me aliste para retirarme no sin antes dejar todo listo para mañana.

Al llegar a casa seguía pensando que don gruñón ni se asomó por la oficina ni recibí ningún mensaje de su parte, supuse que habrá tenido algunos asuntos privados que atender ya que su agenda estaba libre; decidí pedir un delivery para cenar mientras veía una película antes de dormir.

Como toda mañana estaba arreglando mi escritorio y preparando la cafetera por algunas visitas del día, don gruñón apareció por la oficina lo salude y como siempre ignorándome, decidí continuar con mis labores hasta acabar el día, lo más anormal del día ya que don gruñón no me molestaba para nada, y así continuaron algunas semanas se me hacía raro pero a la vez feliz porque así no tengo que aguantar sus gritos, si él deseaba café el mismo se lo servía, si necesitaba algún informe me lo solicitaba que se lo envíe por correo y si necesitaba algo como alistar la sala de juntas u otra cosa también me lo pedía por correo, era algo muy extraño porque aparte que me ignoraba parece que no le caía bien como mi persona, pero si soy adorable eso siempre me lo decía mi madre y mis hermanos, acordándome de ellos hace tiempo que no los visito.

Y así llegué al fin de semana, decidí levantarme muy temprano alistar un pequeño maletín con ropa y tome el autobús para ir a visita a mis padres y mis hermanos, llame a mamá avisándole de mi visita para reunirnos todos, podre ver a mis sobrinos también.

El autobús demoro unas 3 horas llegue a las 8 de la mañana justo para el desayuno y justo como lo pensé al tocar el timbre escuche unos gritos  y ni llegue a poner un pie en la entrada cuando casi mis 5 hermanos y mis padres se me lanzaron encima de la emoción no los veía ya hace un años los extrañaba bastante, en el jardín estaban mis sobrinos en una mesa de plástico tomando su desayuno, ellos estaban tan felices con sus panqueques, tocino, huevo y frutas que ni cuenta se dieron que apareció su tía favorita.

Mientras tomábamos desayuno, venían a mi mente buenos recuerdos de cuando vivía en casa, un lugar muy acogedor mis padres trabajaban tenemos una bodega con todos los productos del mercado, nuestra casa está cerca a la playa, recordaba que siempre nos íbamos con ellos a la playa a jugar, mi hermana mayor quien es Linda, la cual tiene dos hijos, luego Gustavo solo tiene un hijo, Jimena tiene gemelas y un pequeño en camino, Rafael estaba por casarse en unos meses, yo la explotada y mi hermana Mariana que aun estudia en la universidad.

Ese día fue muy productivo después del desayuno fuimos todos a la playa en la noche vimos una película mientras comíamos todos los platillos preparados cada uno había preparado su comida preferida y compartíamos entre todos. A la mañana del domingo me levante temprano para prepárales el desayuno a ellos, jugo de naranja, café, un saltado de carne, entre otras cosas, nos contábamos mientras comíamos anécdotas recordando momentos divertidos, para la tarde hicimos una parrilla en el jardín ya casi a las 6 de la tarde me fui a la estación para tomar el bus de regreso prometiéndoles a mis padres que regresaría pronto; mama me reclamo que no espere otro año para regresar y que no sea una ingrata, adoraba a mi madre por siempre ser tan sincera y sarcástica al mismo tiempo, me divertí mucho al volverlos a ver y aunque ellos también estén ocupados en su día a día como yo sería buenos visitarlos más seguido.

Empezamos la semana otra vez, tenía una flojera extrema de ir a trabajar ya que odiaba los lunes aun así me alisté lo más rápido que pude, al llegar a la oficina empecé mi rutina matutina diaria, estaba imprimiendo unos pequeños informes para la reunión con unos inversionistas que tenía don gruñón, cuando llego un correo donde mi jefe me pedía un informe impreso que le mande hace unas semanas atrás pero lo quería impreso incluyendo un café cargado, me quede extrañada ya que primero que se acordó que tiene asistente y segundo que me estaba pidiendo ver mi adorable rosto aunque no digo lo mismo de él.

Llego el día viernes me sentía feliz porque llegaba el fin de semana donde dormiría hasta tarde, y haría cosas relajantes, pero mis planes del viernes en la noche fueron arruinados cuando mi teléfono empezó a sonar, ya había sonado dos veces y era un numero desconocido y me preocupe así que al tercer llamado conteste y era un señor preguntándome si conocía al Thiago Moore, me dio una dirección de un bar ya que don gruñón estaba pasado de copas y se había peleado con alguien aparte que el chofer no le dio la gana de contestar y como estaba tomado no podía conducir.

Cuando llegué lo maldije millones de veces como no tenía idea, lo peor es que no me dejaban ingresar por que no era cliente VIP después de pelearme unos 30 minutos desistí y se me prendió algunas neuronas y llame al número que me aviso gracias al señor me dejaron ingresar al bar club y encontré a don gruñón dormido en la barra y aunque era muy vergonzoso lo que pasaba decidí despertarlo y fue una mala decisión.

Desde que lo desperté hasta sacarlo del bar se la paso insultándome, dándome indicaciones y mandatos lo peor fue conducir su auto, no tengo licencia de conducir para me enseño lo básico pero dejo de hacerlo cuando se lo choque cuando practicaba, maneje de la manera más lenta parecía una abuelita, llegamos a su casa don gruñón vivía en una casa enorme, lo que pude curiosear fue la sala que parecía sacada de una revista era grande con acabados muy finos, sillones que se veían cómodos y de colores pasteles, adoraba esa sala.  Deje a don gruñón con su ama de llaves y su chofer y me retire ya no quería saber más tenía sueño y estaba cansada sentía que la que estuvo metida en el bar era yo y no el, yo tenía resaca sin tomar.

                                                                                     …………..

Empezando la semana otra vez, don gruñón salía en todos los periódicos saliendo de un bar borracho peleándose con quien se cruzará y con una chica que lo sacaba del bar por suerte la cara de la chica no se veía, aunque yo sabía quién era, yo su explotada asistente.

Me reía cada vez que miraba el periódico, por su rosto gracioso parece que hubiera chupado limón era muy divertido decidí cortar la noticia y guardarla como anécdota. La empresa era una sin fin de chismes sobre la borrachera de don gruñón, él estaba en un situación de malos términos gritaba a todo mundo, estaba con un humor por la resaca supongo que por el escándalo. La pobre chica del área de relaciones publicas la gritaron dos veces por qué no solucionaba las noticias.

Una de las reglas que me entere que su padre dio para que tenga el puesto quera cero escándalos y problemas con la prensa ay que eso era algo habitual en él, borracheras, salidas con chicas, según decían que tenía una novia, que por eso dejo los escándalos con chicas de una noche.

La situación en la oficina era muy tensa toda esa semana no había día que don gruñón no gritara a alguien, yo trababa de hacer las cosas bien, de no meter la pata y que no me despidiera, aunque muchas veces quería renunciar, tirarle los informes a la cara e irme de ahí, pero no lo hacía por no sé qué, en fin, después de dos semana aguantando a don gruñón, me llama por interno pidiendo unos informes toco la puerta de su oficina hasta que se diga de hacerme pasar.

-        Sr Moore los informes que me solicito, con permiso

-        Espero un momento por favor.

-        OK

MINUTOS DESPUES

-        Srta. Nandez…. en eso suena su celular y se puso a discutir con alguien, yo solo quería irme, pero me detuvo.

-        Sr Moore, voy a ir preparando el otro informe y recuerde que tiene una junta a las 12

-        Un momento, me podría explicar cómo puede ser posible que el informe no esté detallado sobre los acreedores

-        Sr Moore, esa información se encuentra en el otro informe en el cual está más detallado.

-        Srta. Nandez…. sabe hacer algo bien.  Lo mire con cara de pocos amigos, es un IDIOTA

-        Necesito que vuelva a realizar este informe. Levantando el informe entre sus manos

-        ¿Qué? Pero si está bien realizado el anterior usted lo aprobó.

-        Igual le estoy avisando que está mal y lo vuelve hacer

-        Pero…. Es que es injusto todo porque esta amargado. Está bien si eso quiere usted

-        Apúrese. Y en eso me tira en informe sobre mí y para mi mala suerte cae sobre mi pecho y luego al suelo

Mi mirada de reproche y fulminante, lo insulte todas las maneras posibles, es un idiota un insensible por eso nadie lo quiere, me estaba por salir de su oficina yo no me iba a humillar recogiendo del suelo ese informe que me tiro, tengo dignidad.

Me llamo como un loco me retire de la oficina para no seguirlo escuchando, me pase casi media tarde terminado el informe, hice todos mis asuntos al día siguiente le entregue el informe terminado como don gruñón lo deseaba, solo atine a dirigirle la palabra para temas laborales y nada más. Aún seguía enojada por su comportamiento, era un desgraciado.

Llego otro fin de semana, tenía pensado ir a caminar después de comer algo y pasear al centro comercial y ver una película quizás, pensé dormir 30 minutos más, pero fue arruinado cuando recibí una llamada de mi jefe.

-        Srta. Nandez…. Necesito que vaya a la oficina y me traiga unos documentos a mi domicilio

-        ¿Es urgente?

-         Si es urgente, le doy la dirección xxxxxx.  Y corta la llamada

-        Demonios

Me levante ya que no podía seguir durmiendo, me aliste y tome desayuno, tampoco me iba a ir corriendo ya que es fin de semana y no trabajo me sentía una rebelde, llegue a la oficina por los documentos que necesitaba y me encamine a la casa de don gruñón, pero al llegar me quede sorprendida ya que de día esa casa se veía más hermosa, parecía una mansión, al entrar vi la grande sala con esos sofás de color pastel, con costuras doradas, me atendió su ama de llaves a la cual deje los documentos y me retire, le dije que no era necesario que le avisara de mi presencia y me retire a continuar con mi feliz fin de semana.