—Gracias por acompañarme al baile, no quería venir sola Le digo a Samuel.
—No podría permitir que vengas sola, además me mataría Flavio.
—No quiero hablar sobre el ahora.
—¿Volvieron a discutir? — Me pregunta y niego rápidamente.
—No, es solo que me hace falta, lo extraño y eso me afecta, le prometí estar bien, aunque no es fácil siento que llegaremos a terminar muy afectado con todo esto, trato de pensar en positivo, pero casi no hablamos y sé que está pasando por un mal momento, sin embargo, es como no se te explicar lo que siento.
—Bienvenido al mundo de los grandes, es así pequeña, él no está acá, pero tienes un amigo en el que puedes confiar, estaré para ti, eres como mi hermanita menor.
Suspiro y tomo su mano y entramos al colegio, muchos se me quedaban viendo y murmurando estupideces, trato de ignorarlos, porque sé que nada de lo que dicen es cierto, sin embargo, entiendo porque dicen que no cierres tus ojos, pues e tiempo comienza a pasar rápido, mi vida se convierte en estudio, la casa, en un momento estaba bailando con Samuel, al poco tiempo estoy recibiendo mi título, ver a mi familia en el fondo y leer los mensajes de mi novio.
Sin embargo, aunque quieras detener el tiempo a velocidad de caracol herido, el sale como un leopardo, sin darte cuenta pasaran los días, meses inclusive años y han pasado 2 largos años en el cual aún no vea a Flavio al menos que sea en video llamada sin embargo las duda y el dolor estaban allí, presente, se alargaba con los años.
—Es que estoy loca, es que no veo que te la pasas con verónica— Digo acotándome en la cama frente a la computadora.
—Digo que debes confiar en mí, yo te amo— Me dice el, mientras está haciendo un trabajo.
—Todos dicen que es tu novia, casi todos los días publican fotos juntos, parecen que se divierten, no me hace feliz eso, yo subo una foto con alguien y te histeriqueas.
—Es diferente, no dicen que me empate con el mejor amigo de mi ex
—Ahora soy la que te engaña con Samuel, estas molesto porque es mi amigo, pero es la única persona que tengo cerca.
—No quiero discutir
—Sabes que vete con Verónica, no sé porque sigues insistiendo, sé que pasa algo.
—Te has vuelto muy insegura de ti misma.
—Gracias a ti.
Puedo escuchar como tocan la puerta de su habitación, él se levanta abrir y la puedo ver ya que su computadora da la vista hasta la puerta, antes que me diga algo apago mi laptop.
Tomo una almohada y la lanzo contra la pared, estoy furiosa, siento que todo esto es un completo desastre, siento que esto va para ningún lado.
—Estamos molestos hoy— Dice Samuel al entrar, sin embargo, su celular empieza a sonar y sé muy bien quien es— Ya puedo adivinar qué está pasando.
—No le contestes, si lo haces dile que no estas conmigo
El solo sonríe y se sienta en mi cama antes de atender.
—¿Qué pasa Man?, quien, a bueno no discutas conmigo en vez decirme hola mi amor siempre me buscas cuando ella te tiene bloqueado, no te contesta— Hace una pausa— Estoy en su casa, en este momento en su cuarto— Él se aleja el celular de su oreja— Cálmate, ni que la estuvieras enamorando o haciendo cositas Le lanzo una almohada— Que agresividad de los dos, subí para ver como seguía de la fiebre que le dio y sus padres están discutiendo así que es normal— El hace una pausa y me mira— No te dijo que estaba enferma, es que no fue tan grabe solo termino en el hospital por deshidratada
—Le quito el celular— No le grites, fui yo la que no te dije.
—Soy tu novio y no sabía que estabas en el hospital, eso no me parece lógico.
—Samuel sabe es porque me desmalle en clase, como es mi compañero lo sabe
—No sé si me gusta la relación que tienen.
—Tranquilo, si quieres la próxima te llamo y espero desmayada hasta que aparezca, creo que es lo mejor— Digo molesta.
—Irina, Muñeca, solo quiero que estés bien, quiero mandarte a traer, pero eres terca y no quieres venir.
—Quieres que viva contigo, tú te fuiste por tu familia, así que yo me quedo por la mía, por mis estudios, así que espera dos años, solo entiende, no solo pienses en ti y en tus necesidades — Le digo recitando sus palabras— Te dejo debo salir, no quiero que Samuel dure mucho tiempo acá y que mis padres crean otra cosa, pero no lo hago por ti quiero que tengas muy encuentra eso.
No lo dejo terminar de hablar y corto la llamada, me acuesto en mi cama y Samuel me toca la frente.
—Aun tienes fiebre, deberías ir al médico
—Solo necesito descansar, es solo eso descanso, solamente eso
—Podrás repetirlo una y mil veces. Pero sabemos que estas muy estresada y eso está afectando tu salud.
—Sí, pero no puedo ser egoísta y pensar solo en mí, necesito seguir adelante mi familia me necesita,
—Solo piensas así y por eso te pasan las mayorías de las cosas, pero no diré nada, cada uno es consciente de las cosas que hace, las cosas que ambos hacen, quieren ser felices a sus familias y no piensan en su relación y por eso ambos la están perdiendo.
Me acuesto en silencio, durante la semana seguí pelada con Flavio, que en la universidad me busca alguien que conozco bien, me sorprendo al ver a la madre de Flavio, ella esta vestida de n***o y me observa con una sonrisa.
—¿Qué hace acá? — Pregunto— Flavio el— Ella me interrumpe.
—Flavio me pidió que te trajera esto— Me entrega una invitación.
Al abrirla puedo leer en las letras doradas que me estaban invitando a la boda de Verónica y Flavio, quedo en shock y ella se da cuenta.
—Ellos tienen 2 años más o menos saliendo, ella es la chica ideal para mi hijo, así que no lo molestes más.
—Es imposible, no puede ser eso, él es mi novio.
Siempre te dije que el jugaría contigo, mira por ti misma— Me muestra un video.
—Si debo decir en este momento quien sería la mujer perfecta para casarme seria verónica, tenemos tanto en común
—¿Qué pasa con esta otra chica? — Le pregunta.
—Siento que las cosas fallaron, que nos mantenemos por costumbre
—Bueno ahora si me marcho, no quisiera que mi hijo jugara contigo, él lo negaría todo, así que es mejor que te alejes por tu cuenta.
Es lo único que me dice, trato de llamarlo sin embargo no me cae la llamada, es como si fuera desconectado el celular, siento que mi mundo se cae en pedazo, siento que me estoy muriendo por dentro no puede ser cierto nada de esto,
Pasa una semana y no me puedo comunicar con él es como si la tierra se lo hubiera tragado la tierra, no se había conectado, comienzo a revisar las r************* y están subiendo tanto el cómo verónica fotos de un lugar de boda, mi mundo se termina de derrumbar.
Me doy cuenta que no todas las princesas están esperando un príncipe para vivir, no necesito una historia igual a de mis padres, eso sí que no lo acepto, ahora entiendo que no todos los príncipes pueden sostener una mentira, ese castillo que se construyó bloque a bloque con tantas mentiras, con dolor y lagrimas