Lucy W. Camino por los pasillos de la escuela sin rumbo fijo, ahora todo se tornaba gris a mi alrededor, la alegría que alguna vez hubo en mí se desvaneció en cuanto supe que solo fui un objeto, una diversión para un ser tan falso y aberrante como lo es Valentino Dalmazzi. Cada vez que me encontraba con alguno de ellos cambiaba de dirección, no quería ver a nadie, en adelante estaba sola, él se había robado hasta mis amigos, ¡odio a ese tipo con toda el alma!, maldecía la hora en que se cruzó en mi camino y al parecer sus intereses sentimentales también cambiaron, ahora Irina no se le quitaba de encima, no era para más, la verdad es que se merecía alguien como ella. A pesar de que suplique a papá para irme a vivir a otra ciudad o a Brokemond con mi abuela todos mis intentos fueron en van

