DANIELA.
EN LA ACTUALIDAD...
Miro por el pasillo a Mona, la coordinadora de bodas de Eva, pero parece ocupada, así que me agacho y sostengo el extremo de mi ramo en el suelo como me piden. —Hay un árbol grande— dice un plesiosaurio de plástico azul de cinco centímetros de largo.
—Creo que deberíamos comerlo— responde un estegosaurio verde.
—Por favor no me comas— digo moviendo ligeramente el ramo. —¡Tengo una boda a la que asistir!— Bree, mi sobrina de tres años, empieza a reirse. Los dinosaurios avanzan. —Nooooooo— dice mi ramo. —¡Mis flores no!— La risa se intensifica y ella me mira, con pura picardía en sus bellos ojos azules.
—¡Morda!— ella grita entre risas, el plesiosaurio de alguna manera se lanza de cara, hacia un lirio. —¡Muerde, muerde, muerde!—
—¡Auuu!—
—Muerde— Este es e
